Capítulo: 35 "Amarre. Dos"

9.4K 1.2K 122
                                    

Una hora paso, y la incertidumbre no aminoraba, al contrario, aumentaba con cada segundo, la impotencia lo volvía loco, quería zafarse y salir corriendo a la ayuda de sus amigos, pues era obvio que no planeaban nada bueno para ellos, el silencio abrumaba su pensar, los látidos de su corazón hacían eco en su ser, la ira provocaba a su cuerpo temblar.

Los minutos pasaron y la desesperación albergaba sus sentidos, cuando un joven Wen se paró enfrente de él, con una voz burlona, le susurro en su oído.

-¿Qué paso putita? ¿Quieres que te den energía yang? – Con una despreciable sonrisa plasmada en su arrogante rostro, Wen Wuxian reprimió los insultos en su garganta, en cambio con ojos brillosos asintió tiernamente.

-Descuida, el joven amo Wen te satisfacerá. – Dijo con un tono de ira en cada palabra escupida. Wei Wuxian negó con su cabeza tiernamente, luego sumisamente abrió sus piernas ante el joven Wen, este sonrió lascivamente y acaricio la suave mejilla del doncel, retiro la mordaza, con un hilo de saliva cristalina se deslizo fuera de los rosados labios, con una voz sumisa y baja hablo.

-Por favor, no me siento bien, la necesito ahora, además él tiene una energía muy diluida, con una energía yang muy débil, no me sirve, en cambio este joven maestro siento que tiene una energía yang de una muy buena calidad, estoy seguro que me satisfacerá por completo, estoy seguro que le gustara, se lo prometo.

-Sino fuera porque él es el hijo del líder de la Secta, me quedaría contigo, pero lástima que te quiere solo para él, aunque yo soy mucho mejor, eso te lo puedo asegurar. Bueno ya que te ves muy necesitado, creo que haré mi buena acción del día, pero trata de no ser muy ruidoso, no queremos que nadie nos interrumpe, ¿Cierto?

Wei Wuxian asintió con una bella sonrisa.

-Por favor joven maestro Wen, libéreme, los amarres en mis muñecas duelen mucho, casi siento como corta mi piel, libéreme por favor, además le enseñare una técnica que lo hará llegar al cielo. –Dijo con una voz suplicante y excitante, el joven Wen asintió, lo liberó de las cadenas y de las amarraduras en sus muñecas, Wei Wuxian sobó con delicadeza las hematomas púrpuras y negras de sus muñecas, con un solo roce el dolor se intensificaba, sus palmas de las manos volvían a tener su color original, el joven Wen al ver que tardaba mucho revisando sus heridas, los sujeto de una de las muñecas manchadas de un color negro con morado, jalándolo hacia él, el doncel mostró una mueca de dolor en su bello rostro, reprimiendo un quejido de dolor e ira.

-No te tardes, tenemos el tiempo medido, nose cuanto tiempo se tarde Wen Chao con WanYin, pero seguro no tanto, él siempre presume de su gran hombría, pero no dura ni cinco minutos. – Dijo con una voz burlona e irritada.

Wei Wuxian coloco sus manos sobre las mejillas del joven Wen, mientras que él manoseaba sus piernas y sus glúteos, levantando la parte inferior de sus túnicas, adentro sus manos en la ropa interior del doncel, al cual se estremecía al sentir su piel desnuda y pura siendo ultrajada por las asquerosas manos del perro Wen.

El doncel acerco su rostro con el contrario, iban a unir sus labios, ambos cerraron los ojos, sin embargo, Wei Wuxian alejo su cabeza hacia atrás y con fuerza la aventó hacia adelante, la frente del doncel se estampo contra la frente del joven Wen, dejándolo inconsciente, cayó al suelo en un golpe seco, WeI Wuxian sobo su frente rojiza por el impacto, movió su cabeza de un lado al otro, inhalo profundamente y luego exhalo, al sentir que recupero sus cinco sentidos a la perfección, se echó a correr, mientras buscaba donde se encontrarían sus amigos, al azar doblo en un camino y continuo corriendo, con cuidado de no ser visto por nadie.

Sin embargo, se detuvo en seco, cuando vio a JiangCheng siendo sometido por Wen Chao, la ira invadió su alma, sus manos hechas puños, sus nudillos pálidos, su corazón danzaba en un baile infernal, sus ojos destellaban dagas con sed de sangre fresca, sin su espada a la mano, tomo lo primero que encontró cerca, sujeto con firmeza la piedra en su mano derecha, sigilosamente entro velozmente hacia ellos.

Mientras que Son Lang, Lan XiChen, Lan WanJi y Wen Ning buscaban algún rastro que les indicara donde se encontrarían sus parejas, el cual la suerte les daba la espalda, se encontraron con el equipo de Jin ZiXuan que también buscaban algo o a alguien.

-¿No han visto a Xue Yang? Estaba con nosotros, pero fuimos atacados por unos cadáveresferoces y él se alejó, no le hemos encontrado. – Dijo Jin ZiXuan con el ceñofruncido y sus brazos cruzados, pues ya estaba harto que su primo fuera tanimprudente y maniático, siempre hacia locuras, arrastrando a otros a pagar lasconsecuencias de sus acciones.

.

.

.

.

elvis- Sempai 

El doncel del amor y la cultivaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora