Siempre Te Amare (Gaara Y Tu)

3°

Después de caminar por varios minutos, la niña divisó una gran torre, con un brillo de curiosidad en los ojos miro todo lo que pudo de aquella torre, ya estando cerca, se percato de la presencia de un pelirrojo, posiblemente de su misma edad..... espera..... ¿que edad tenia ella?.

Sacudió su cabeza, borrando aquel pensamiento, nuevamente observo al pequeño, que por alguna razón se veía triste, más su semblante cambio cuando vio al hombre que tenia a su lado, acercandose corriendo y con una gran sonrisa en el rostro.

—¡Yashamaru! —saludo emocionado, luego su atención cambio hacia la niña de cabellos largos de color violeta y hermosos ojos esmeralda —¿Quién es ella? —pregunto con curiosidad, nunca había visto a esa niña en la aldea, así que no pudo evitar preguntar aquello, y estaba seguro que esa ropa que llevaba era de Temari, si la pequeña T en la esquina fuera una indicación, además recordaba haberla visto con eso puesto hace un tiempo.

—Gaara —Yashamaru sonrió mientras sacudía los cabellos del pequeño con cariño —, no sabemos su nombre, por ese motivo la llevo con el Kazekage.

La niña, miro el intercambio de ambos con curiosidad, era más que obvio que estos dos se conocían, dio un paso adelante, llamando la atención de ambos.

—Etto... —susurro nerviosa —, tu nombre es Gaara ¿no? —el pelirrojo asintió, la niña un poco mas confiada, continuó —, espero que nos llevemos bien y podamos ser amigos Gaara-kun —realizo una reverencia de 90 grados completamente sonrojada.

Yashamaru sonrió ante la escena, dio un toque al hombro de la pequeña haciendo que esta se levantara, entendiendo el mensaje, rápidamente se despidió del pelirrojo y entró a la torre junto al mayor, se les estaba haciendo tarde.

Gaara, por otro lado, quién no se había movido de su sitio, reaccionó minutos después, estaba conmocionado porque esta era la primera vez que una niña le hablaba sin insultos de por medio y le proponía que fueran amigos.

Dio media vuelta con la intención de ir a su casa mientras una sonrisa iba apareciendo en sus labios y poco a poco esta se hacia más grande.

En su pequeño corazón un extraño sentimiento burbujeo con anticipación, estaba casi seguro de que era emoción, era poco común para el llegar a sentir algo como eso.

Abrazo con más fuerza su osito de peluche y entró a su casa, con la sonrisa aún en su rostro, solo esperaba volver a verla pronto para poder jugar juntos.

Era la primera vez que jugaría con alguien y solo esperaba no arruinarlo de ninguna manera. ¿Debería practicar con su arena para hacer cosas bonitas y así ella no le tendrá miedo como todos los demás?

EDITADO: 23/02/2022

EDITADO 2: 28/102023