Jugatela Por Mí (JuaniXEmma)

Capítulo 31

Juani

-estoy algo nervioso -le digo a Mariana.

-tranquilo, la primera vez que vine con Ben no pasó nada, igual ya te hicieron los estudios y salieron bien, no eres alérgico a ningún medicamento o compuesto químico, creo que ese es el único riesgo que podrías tener ahorita. -dice ella con tranquilidad.

No puedo creer que sea ella quien me este acompañando en este momento tan importante para mí, hoy es el comienzo de mi tratamiento con las hormonas y no quise que mi vieja me acompañara porque no sabía cómo iba a reaccionar y por primera vez quiero preocuparme en cómo voy a reaccionar yo y no otra persona, le habría dicho a Ben que me acompañara, pero estos últimos días he tomado un poquito más de confianza con Mariana porque hemos pasado tiempo juntos por la fiesta de Ben.

La endocrinóloga entra con la inyección ya en sus manos.

-¿listo? -me pregunta, pero aún ni en este momento dudo.

Asiento -listo.

-¿quieres que me salga? -Pregunta Mariana -o ¿queres que te tome de la manito como si fueras mi hermanito chiquito? -ríe

-debería quedarse, es lindo que tu pareja te banque mucho, además que es importante -una punzada en el pecho se me viene casi al instante.

-tiene razón -dice Mariana -hace mucho no le veo las pompis a mi novio -dice y me guiña el ojo, agradezco que no haya hecho de esto un momento incomodo tratándole de explicar a la doctora que no somos pareja. Toma asiento en una de las sillas que está dentro del consultorio, yo me recuesto en la camilla, comienzo a sentir de nuevo los nervios en mi garganta.

-relaja todo porque si no te va a doler mucho más -respiro profundo y trato de pensar en algo lindo, lastimosamente no se me viene nada a la cabeza y me río ante eso, ni siquiera me doy cuenta de que ya acabo todo hasta que veo que la doctora se dirige al bote de basura y bota la inyección vacía y sus guantes.

-¿ya? -pregunto extrañado

-sí, te dije que si te relajabas no iba a doler, aunque bueno tal vez ahora si duela un poco cuando te sientas -dice riendo un poco. -necesito que se queden como mínimo unos treinta minutos más para checar que todo está bien, pueden quedarse aquí si quieren por lo que ahorita no hay pacientes, aquí te traje unos medicamentos que más que nada es para evitar algún contratiempo con tu hígado y otros órganos. Recuérdalo tomar diario ¿está bien? -pregunta

-no se preocupe doctora, yo me encargo de que siga todas las instrucciones. -dice Mariana tomando todo el medicamento y guardándolo en su bolso.

-bueno, nos vemos dentro de dos meses para tu próxima inyección -dice y luego sale del consultorio.

-recuérdame darte las pastillas cuando nos separemos porque si no me cuelgo y me las llevo a casa -dice.

-Mariana, gracias -digo y la miro a los ojos, ella sonríe.

-no tienes nada que agradecer, posta. Necesitabas que te acompañara ¿Por qué no lo haría? -se encoje de hombros.

-no solo lo digo por acompañarme, sino por todo. -ella hace un pequeño gesto de incomodidad, temo que en serio se haya incomodado.

-¿que pasa? -pregunto, ella esquiva mi mirada, así que presiento que lo que me va a decir a continuación no es bueno. -lárgalo.

-no es que... -hace una pausa -sabes que te quiero ¿verdad? -Asiento sin saber a qué punto quiere llegar -y ya sé que lo que te voy a decir te va a romper las pelotas pero... -ahora si se lo que me quiere decir.

-pero crees que Emma es la que debería estar aquí y no tu -termino de decir por ella, ella asiente.

-sabes que después de esa inyección -señala el tacho de basura -pueden venir cambios repentinos, y no me refiero solamente a cambios físicos, si no cambios emocionales, cambios de humor, cambios hasta en lo sexual, y ella puede notar esos cambios y me parece que no da que no sepa el por qué, se va a quedar con una nube de signos de interrogación en la cabeza, no se Juani, me parece un poco injusto.

-tenías razón, que rompe bolas ¿eh? - ella ríe

-es en serio lo que te estoy diciendo pelotudo -me da un pequeño golpe en el brazo.

-ya lo sé, es solo que tengo miedo de perderla ¿Qué tal si no se banca nada de esto? ¿Y si me manda a la mierda?

-si te manda a la mierda entonces no era la chica indicada, yo sé que duele, pero si estas con alguien fingiendo algo que no eres, estas nada más alargando tu agonía, es mejor saber si de una te va apoyar o te va a mandar a la mierda.

-parece masoquista de mi parte, pero si por mi fuera, me quedaría con la duda para siempre con tal de no perderla.

-me das asco por lo cursi y boludo que sos -ríe y su risa me contagia a mi también.

-le voy a decir cuando salgamos del curso, faltan tipo un par de semanas para eso, y como no vamos a tener viaje de fin de curso porque la agencia de viajes nos estafo, creo que sería buen momento para decirle, además que después de decirle le voy a dar un tiempo a solas por lo que me voy de viaje con mi papá.

-¿vas a salir huyendo?

-me acabas de matar.

-tengo razón entonces.

-no, tampoco es que se lo voy a soltar y al instante voy a agarrar mis maletas y largarme, le voy a decir todo, vamos a dejar las cosas claras y le voy a decir que le voy a dar un tiempo para que vea lo que realmente le pasa y que si en serio quiere seguir conmigo.

-así que este es el Juani que hace las cosas bien ¿eh?

-siempre hago las cosas bien.

-te recuerdo que las coronitas para los trajes te quedaron para la verga - me río al recordar que le dije que yo me encargaba de hacer esas coronas y me quedaron horribles, cuando le mande fotos, me mando cientos de emojis de risa. Ella ve su reloj y luego me dice: -Creo que ya nos podemos ir, voy a ir a preguntarle a la doctora -asiento.

Realmente tengo mucho miedo de que Emma no me acepte, pero Mariana tiene razón, para que fingir algo que no soy con ella, me lo ha dicho ella, mi papa, mi vieja, hasta yo mismo me lo he dicho, ¿Por qué las personas trans tenemos que tener una vida tan complicada?