Parte 1 Sin Título

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Yo me decía que en esta vida no me podía salir nada mal, amaba a mi esposa y a mi hija, un trabajo soñado........cada que tocaba la primavera en la ciudad siempre nos íbamos de viaje aunque sea 2 fines de semana seguidos, 3 días lo podíamos pasar en un bosque acampando o pasando la tarde en un lago pero mi hija siempre prefería ir a esquiar al lago de la ciudad siempre que era la época de invierno.

Un día recibimos una llamada.......era de mi madre......... mi padre había fallecido de un infarto y ella se encontraba devastada, la noticia tomo a toda la familia de imprevisto, la ciudad donde ellos estaban se encontraba a 75 km de nosotros, cogimos lo esencial y emprendimos el viaje que nos causaba tanta angustia y a la vez nerviosismo por no saber con qué nos íbamos a encontrar al llegar

Pude recordar todos los momentos que tuve con mi padre, no era un señor muy hablador pero con solo una mirada podía entablar una conversación contigo sin emitir una sola palabra, muy estricto pero amoroso.......poco a poco podía sentir como mis ojos se llenaban de lágrimas, en ese momento comprendí que había perdido a mi mejor amigo y que no lo volvería a ver pero con algo de tranquilidad al saber que iba a estar en un lugar mejor, lejos de este mundo de preocupaciones.

No recuerdo cuantas horas estuve conduciendo por ese camino tan tétrico, con cada km que recorría me adentraba cada vez más a una oscuridad siniestra, todo lo veía de una manera muy tenue, solo podía concentrarme en las luces de mi coche reflejadas en el pavimento, me sentía en piloto automático como si alguien estuviera haciendo mi trabajo y el verdadero yo mirando desde algún lugar.

Mientras me sumergía en mi propia agonía, algo en mi cabeza me podía decir que tanto mi esposa Jennifer y mi hija Samantha no la estaban pasando bien tampoco, preocupadas por mi repentino cambio anímico

- "¿John estas bien?" – ella pregunto un tanto preocupada.

-"sí, me encuentro de maravilla" – le dije en un tono algo tranquilo para calmarla.

-"Te veo algo raro; no te encuentras bien.......te conozco". Se preocupaba por mí pero no quería que ella se angustiara también, necesitaba que ella se sintiera bien mientras emprendíamos el viaje.

Las horas pasaban y ya no me encontraba en condiciones de seguir conduciendo, poco a poco pude sentir como mis parpados se hacían cada vez más pesados, intentaba ser fuerte y seguir despierto para llegar lo más pronto a casa de mis padres, eche un vistazo al asiento trasero del automóvil para ver cómo se encontraba Samantha, lo siguiente que recuerdo es ir en línea recta hacia una luz gigante, hice el intento de girar el volante para evitar impactar de frente con esa luz pero ya era demasiado tarde.

Lo siguiente que pude sentir fue como todo daba vueltas, como si estuviera en una lavadora con la función de batido infinito activado, el auto tras dar un par de vueltas fue a parar hacia la orilla de un risco, poco a poco el auto se iba deslizando, vueltas sin control empezó a dar el automóvil bajando por aquella cuesta de tierra con rocas inmensas.

Recuerdo por fin despertar de aquel sueño que pensé que era eterno, de estar viendo oscuridad y vacío a empezar a ver luz y claridad. Me sentía consiente pero no podía ver bien, todo estaba borroso y nublado, escuchaba varias personas a mi alrededor conversando y me repetía una y otra vez ¿Qué había sucedido? ¿Por qué me encontraba en esa cama? ¿Dónde está mi familia?

Después de un rato pude abrir los ojos y me di cuenta que me encontraba en una habitación de hospital, ese tono blanco verdoso que producía la lámpara que estaba al final del cuarto, olor a guantes de látex, conectado a una máquina, una ventana inmensa con la cortinas cerradas, y yo...........postrado en aquella cama esperando respuesta alguna a mis inquietudes, rápidamente llega una enfermera muy exaltada, se notaba algo eufórica y emocionada pero al mismo tiempo algo nerviosa.

Sinister johnWhere stories live. Discover now