El pasado de mis pesadillas

Capítulo 3

9:48pm

Pensaba que todo el camino hiva a ser de silencio pero me confundí.
Ale comenzó la conversación y terminó en que vamos a hacer mañana.  Desde antes y después de la U; ella tiene que pasar con su familia y bueno yo... yo tengo que hacer deberes que me he dejado acomular para el día lunes.

-Ya tienes que dejar de pensar- dice Ale con una sonrisa en su rostro- también debes divertirte.

La sonrisa se debe a mi último comentario "Soy un niño de departamento que lleva a la U encima suyo"

-Enserio- digo riéndome- tengo demasiados deberes que realizar...

-Bueno te creo, te creo

Pasamos unos tres minutos en silencio pero por fin se acabó porque llegamos a su casa.

Salí del coche y abrí su puerta oara que saliera del coche.

-Bueno llegamos- digo extendiéndose mi mano y la recibe.

-Gracias caballero- dice algo divertida

- De nada Madame- digo llevándola del brazo a su puerta.

-Deja de estar enojado- me codea - No me gusta verte así.

- No estoy enojado sólo que...

- Es por lo que te dije- dice poniéndose delante mío- ¿Verdad Sebas?

-Algo así- digo triste, bajo la cabeza y sus manos tocan mi mentón.

-Si me amas me entenderás- dice con su mirada en mi pecho.

-Tranquila- no lo pienso y la abrazo.

Haciendo así a cualquier persona me siento feliz, completo y que nada me falta por un momento y se que ella ya lo sabe.

-Alejandra...- al escuchar la voz de su madre nos separamos bruscamente de nuestros brazos- ¿Qué son estas hora de...

Se queda callada al verme alado de su hija y encaminó yo prosigo.

-Buenas noches Señora Lupe-  me acerqué a saludarle- perdón por pasarnos de la hora pero es que el tráfico estaba tenaz.

-Tranquilo Sebastián...- dice de una forma muy alegre- ya sabes cuando quieras y siempre, que sea contigo, claro que puede salir Alejandra.

La señora es como mi otra made desde hace cuatro años o desde que salgo con su hija.

Ella siempre nos a apoya y junto con su familia ya que Alejandra tiene dos hermanos menores y sus padres, la señora Lupe y el señor Wilson.

- Por favor mamá- dice Ale algo apenada de todo el discurso de su madre.

-Creo que ya me tengo que retirar...

- Claro Sebástian...- dice la señora Lupe- ten cuidado y regresa pronto hijo...

-Madre ya- dice Ale algo irritada- vamos adentro, perdón Sebas pero ya me voy.

Dice mientras hala a su madre del brazo y la lleva para la casa...

-Vaya...- doy un suspiro de alivio y serenidad por alguna razón.

Pero me siento más tranquilo en no estar enojado con Alejandra.

Retorne a mi coche y lo puse a andar en dirección a mi departamento.
Por alguna extraña razón para regresar a departamento coji la ruta más larga, lo que pocas veces hago, eso es algo raro en mi.

Me faltaba sólo dos cuadras más para llegar a mi casa por los semáforos que se encontraban allí tenía en mente que ya eran más de 11pm.

Al pasar mi último semáforo, me llamo la atención una chica que estaba corriendo desesperadamente por la vereda y que llevaba unos libros.

El semáforo cambio a verde y llegue lo más pronto a la puerta de entrada del garage.
La chica estaba viniendo en dirección a el coche pero no era por mi... logré divisar que un hombre la seguía y de igual manera corría para alcanzarla.

De un impulso estoy fuera del auto con esperanza de ayudar a esa chica que por alguna razón me llamo la atención.

Regrese a verme en el reflejo de las ventanas del auto como para disimular y quise abrir la puerta de igual manera para disimular pero sentí que alguien tropezó contra mí.

-Au- dijo la voz que topo el suelo.

-Lo siento ¿Te hice daño?

- No tranquilo...- por su voz se notaba que estaba cansada y desesperada.

No regreso a verme pero se puso en cunclillas, con su pelo para atrás, y recogió desesperadamente los libros regados en el suelo.

-Dejame ayudarte...

-Gracias- susurra cansada.

-¿Los robaste de una biblioteca? - digo por todos los libros de anatomía que distingo.

- No, Claro que no...- dice alzando su rostro y logró ver un destello en sus ojos.

Me quedé paralizado a ver ese color y ese destello en sus ojos.

-Entonces...- las palabras no me salían- ¿por qué te siguen?

-¿Me vigilas?- dijo algo confusa mientras retiraba unos libros de mi mano- Gracias- dice por último

- ¡Señorita Dodban!- viene de lejos y ella se sobresalta y empieza a correr.

-Espera...- la detengo por su brazo que no cargaba libros- ¿Quien eres?...- busco sus ojos y logró verlos con el mismo destello particular que me parece conocido.

Sus labios querían decir algo pero otro grito se lo impidió:
- ¡Señorita Dodban, espere!
Y salió corriendo con su cabello largo y ondulado, lo que también me llamo la atención de ella.

-Joven disculpe...- regrese a ver a la voz que provenía de mis espaldas- ¿A dónde se dirigió la señorita?- era un señor de traje

Me quedé recordando esos ojos y de donde los recuerdo.

-¿La señorita donde se fue?- me saca de mis pensamientos nuevamente.

-Recto...- digo sin pensarlo- pero... ¡¿Por qué la persigue?!

Lo último grite porque el hombre salió corriendo. Para decir que era un secuestrador o violador no parece y que por eso este la chica tan agitada, no lo creo...

Pero...

-Esos ojos...- susurró para mí- esos ojos...- ya se de donde los recuerdo pero- no, no puede ser...

Entre al coche y regresaron unos recuerdo pero no imagenes sólo recuerdos.

Me quedé pensativo todo el camino que restaba para llegar a mi habitación.

-Esa voz...- digo sin más- esos ojos... ¿Donde?

En este momento me encuentro en mi cama viendo hacia la ventana y razonando bien en no equivocarme en la respuesta...

-Esos ojos...- abrace a la almohada- esa voz... sólo puede tener una persona.

- Pero... esa persona está... prácticamente... muerta... no puede ser verdad- dice una vocelliza en mi cabeza.

- Sí, claro que me estoy imaginado todo- digo mientras me pongo a pensar más sobre esa voz y esos ojos de esa chica.

- No puede ser porque ella está... muerta...