CIRCUS MONSTER | NCT |

Animalistico

Recuerda, esas cosas están recargadas.

La emoción que tenías, trata de no enseñarla. No te pueden lastimar, no otra vez. Tú sabes más que eso.

Ahora, prepárate, es tiempo para tu acto.

—¡Canta!—

Entonces canto....

—¡Baila!—

Entonces bailo...

Haré todo lo que digas, solo si me haces este pequeño favor. No me lastimes, "amigo".

—¡Habla!—

Entonces hablo....

—¡DEFIÉNDETE!—

Entonces me defiendo.

No sé por qué hago esto por ti, solo me lastimarás otra vez.

Repito la rutina, una y otra vez, solo para complacerte y que no me dañes.

No me resistiré si presionas el gatillo. Pero es tan difícil creer que eres un maldito mentiroso.

Soy peor que los leones, que los tigres, que los oso, y por dios, soy mucho peor que la bestia peluda.

—No te acerques, o tratará de morder.—

Es lo que dicen para hacerme llorar. A este punto...creo que tienen razón.

Rompí tus reglas una vez, dos veces, ¿cuántas veces lo he hecho? Pero tú siempre te disculpabas con el público, y yo soy la razón por la que les mentiste.

Detrás del telón, me arrojaste devuelta a la jaula. Y ahora volviste en busca de sangre, en busca de mi carne....otra vez.

Ahora ya no tienes tu sonrisa macabra, ahora sí, te ves furioso. No te importa estar frente a todos los del equipo, en sufrimiento igual que yo. Sacas tu arma y lo apuntas a mi cabeza, para después empezar a gritar y escupirme:

—¡MIRA QUÉ TAN JODIDO ESTAS Y TODOS YA TUVIERON SUFICIENTE CONTIGO!—

Luego te preguntas por qué todos los días yo actuaba balístico. No eran ellos, eras tú. Tú eras la razón por la que era tan.... animalístico.

Luego se preguntan por qué mis metas no eran realistas. No era yo, eras tú. Tú eras la razón por la que me salía de control y actuaba como una bestia verdadera, aparte de mi asqueroso físico.

Con toda honestidad. Con tus promesas. Es tan triste que me alegra, ¿por qué me metiste?
Probaste que yo estaba bien, y yo lucharía para probarte mal.

Debía intentar, y mantenerme fuerte....

Con los instintos animales no se juega. Así que no me vengas con tus chingaderas.

Repito la rutina una y otra vez....

Los monstruos gruñen y rugen. Ya que tú nos derribabas uno por uno.

Así que, te pido un solo favor, responde a esta pregunta:

—¿Qué no eres tú quien siempre está al acecho?—

Soy un animal, una bestia.

Corriendo débilmente hacia la salida. Gritos fuertes. Manchas de sangre por toda la carpa. Los cueros de tu propio equipo. Pero aún así me sigues y con esa sonrisa macabra me derribas y te encimas a mi.

—Pedazo de mierda.... Tú no te vas de este circo.—

La única forma en la que me quede aquí es si me matas ahora. Mierda, tan cerca pero tan lejos de poder escapar, creo que terminaré como el resto que está a mi lado. Fue un intento en vano...

—Vamos... Dispara...—

Fue lo único que dije. Moriré aquí como el resto del equipo, todos tratamos de escapar, pero él fue demasiado fuerte....