Estaba en el internado con mis compañeros que siempre tenían algo más que tirar de sus horribles bocas o no se por que les caía tan mal, quizás fuese el hecho de que yo no hablaba con nadie y me aislaba solo. Igual es medio normal para un chico de 17 años o no? Quizás es verdad que no soy un chico de 17 muy "normal" tampoco, escucho cosas en los corredores y hasta veo personas, pero lo que voy a contar esta vez es algo sinceramente aturdidor y que me dio muchísimo miedo. Ese mismo dia, viernes, termine la clase de Historia Regional y salí del salón y me dirigí a mi habitación que compartía con otros 5 alumnos, quedaba en el 3 piso y cuando ya son las 7pm tienes que apurarte a llegar por que después da un poco de miedo ir o por lo menos a mí. El internado esta bajo el control de monjas y sacerdotes, hasta tienen un área en el 2do piso donde entrenan a los monaguillos, nunca fui ahí pero siempre que pase cerca se escuchan latigazos sobre carne. Ya te imaginarás cómo es donde vivo, pero lo que me pasó hoy me esperaba afuera, estoy a 45 minutos de la ciudad caminando, el internado está súper aislado, lo único que está más cerca de él es un minisuper y 3 casas a la par a 15min y siempre que nos daban el finde nos íbamos a divertirnos en la ciudad con 2 amigos, por cierto yo soy Jerry y mis mejores amigos son Mer y Fred, la noche en la ciudad fue como tantas otras, ellos se fueron a un motel, dijeron que volverían en Uber, en mi regreso, 40 minutos después de despedirme de mis amigos pasó lo que a día de hoy me tiene perturbado y muy preocupado. Volviendo, había dejado la ciudad como 500 metros atrás y estaba adentrándome en el mismo camino que conocía de memoria, cuando de repente, luces en el cielo, muchas luces que formaban circunferencias y no fue hasta que mi vista se amoldo que pude caer en lo que veia, eran naves extraterrestres gigantes muy grandes y muy a la vista, agarre mi teléfono y me dio tiempo a sacar unas fotos y grabar un video, cuando desaparecieron me quedé helado por si se habían dado cuenta de eso..... Y así fue, en un momento vuelve a aparecer una nave y me dirige una luz en todo mi cuerpo, empezé a correr lo más rápido que pude en dirección a la ciudad y sin ver me topo contra el pecho de alguien que no logré ni mover , yo me caí del impacto pero el señor no, era un hombre de aproximadamente 50 años vestído con un sombrero y un sobretodo , media como 2 metros de altura y era muy flaco pero en sus ojos denotaba una fuerza descomunal, al lado de él su compañero no tan alto, más bien bajo y gordo al que no se le veía la cara a causa de la noche y su sombrero, el alto me dijo que vuelva al internado y que esa noche no había ocurrido nada y yo saliendo de mi shock le dije que no iba a decir nada que no vi nada, empece a caminar muy rápido en dirección al internado no pasaron ni 5 minutos que un auto quiso esquivar no sé que en el camino, que choca contra un árbol, voy a ver y eran Mer y Fred, mi amigo estaba convulsionando al costado del auto y Mer me gritaba que hiciera algo, leí en alguna parte que a los que sufren epilepsia los tenían que poner de costado para no ahogarse con su propia saliva y esperar a que pase, y así lo hice por suerte Fred no tardo más de 1 minuto en recomponerse, en eso me paro a ver al conductor del auto y estaba muerto, una rama del árbol donde había chocado le atravesó la boca y lo dejo inmóvil en el asiento, mientras que Mer rápidamente había bajado a Fred del auto para practicarle primeros auxilios. Ante mi mirada anonadada en el cuerpo, pasaron los 2 ancianos y siguieron de largo en dirección al internado, les dije a los chicos que había que seguir pero cuando volví la mirada habian 2 personas más con ellos que no pude distinguir ya que estaban de espaldas, pero si vi que estaban vestidos igual que los otros 2 y uno era un chino o japonés que tenía el pelo largo y desalineado era flaco y bajo. Ellos hablaron con mis amigos, estos demostraban mucho miedo en la cara, se pararon y se pusieron en marcha al internado. 5 minutos más tarde sin hablar ni una palabra les pregunte si ellos habían visto algo arriba y me dijeron que si, vieron lo mismo que yo vi y estaban igual de asustados que yo, más por qué el bajo y el alto estaban a unos 100 metros adelante y el chino y otro más que no recuerdo cómo era estaban atrás de nosotros a unos 30 metros. Con todo el valor que tenía me di la vuelta con la intención de preguntar el por qué de su visita o quiénes eran o algo pero el chino me miró alzó su mano y me apunto, los ojos se le volvieron azules como si fuera una llama de gas, me di rápidamente la vuelta de nuevo y seguí caminando, llegamos al minisuper y los tres sentimos que teníamos una fuerte necesidad de tomar alcohol y compramos ron , whisky y una cocacola, cuando salí del minisuper vi que los 4 individuos estaban por entrar a una de las 3 casas que había cerca, cuando les dije a Fred y Mer ya era tarde, me preguntaron de que hablaba ya que ellos aseguraban recién haber salido del internado a venir a comprar alcohol para la fiesta de los alumnos a escondidas de los monjes, supe que solo yo lo sabía y saque mi celular para mostrarles pero no había nada, no me creyeron, quise volver a la ciudad para ver al conductor pero el miedo me gano, al día siguiente no había noticias ni nada sobre el choque ni la muerte de nadie, fui de día al lugar y tampoco hallé nada, sigo contando la misma historia pero nadie me cree, a veces el señor alto y flaco viene a visitarme para decirme que no cuente nada que igual nadie me creerían. No le hice caso y sigo contándolo y tengo 32 años y estoy en el Manicomio Cane Hill de mi ciudad. Escribí esto y lo lancé por la pequeña ventana que da a la calle esperando que alguien lo encuentre y se contacte conmigo por situaciones similares, cuidado con el hombre alto.