Una pareja de jóvenes amantes, atrapados por las convenciones sociales arraigadas hasta la raíz por costumbres acerca del matrimonio y la familia, platicaban acerca de un extraño caso en un café a las afueras de la ciudad.
—¿Lograste convencer al dueño de la casa para que te la vendiera?– Preguntó Chanwoo después de darle un largo trago a su café.
—No, claro que no.– Yunhyeong hizo una pausa larga, donde algunos pensamientos de angustia llenaron su mente. —Ese chico me preocupa, es tan joven y está tan... roto.
—Ese corazón tan noble tuyo debe sufrir constantemente.– Los ojos del más joven se entornaron hacia su amante con ternura y preocupación.
—Dime, Chanwoo, ¿perderías la razón si yo falleciera?
Después de escuchar la historia de aquel desafortunado chico, Yunhyeong se había hecho aquella pregunta, intentando imaginar como sería su vida si el menor se fuera para siempre del mundo.
—Yo...yo moriría también.– Contestó el menor, sintiendo el escozor de la tristeza raspar su garganta.
Desde que nació, Kim Jinhwan fue heredado de algunas pertenencias que en vida le dejó su abuela. Desde cosas pequeñas como una colección de postales del gran imperio coreano, hasta un edificio y una casa en la ciudad de Ulsan.
Jinhwan vivía en Busan con su familia, nunca le interesó el negocio de bienes raíces, pero fueron sus padres quienes pusieron en renta las propiedades, con ese dinero solventaban los gastos para los estudios de su hijo.
Un día sus padres no pudieron ocuparse de ir a cobrar las rentas, por lo que muy a su pesar Jinhwan tuvo que ir por primera vez a conocer sus edificios.
Ambas propiedades eran elegantes y bonitas, una en particular llamó su atención, pues se trataba de una construcción al estilo tradicional japonés, un matrimonio de japoneses exiliados políticos ocupaban esa casa.
Jinhwan iría a visitar a las familias que habitaban sus propiedades para cobrarles la renta, cosa que le molestaba y le parecía incomodo, pero no tenía otra opción más que hacerlo.
Hecho del cual estuvo sumamente agradecido los años siguientes, pues ello provocó que conociera al hombre que le robó todo rastro de quietud, con la intensa fuerza de su ser había llegado a despertar la marea de cada parte de su ser.
Y es que Jinhwan nunca sintió un deseo tan vehemente por nada en el mundo, no supo hasta que conoció a Junhoe el verdadero significado de extrañar a alguien.
Junhoe fue su todo, en una forma tan radical que habían instantes donde aquel amor que sentía por él lo obsesionaba, lo enloquecía y sufría ante cualquier señal donde sentía que Junhoe podía abandonarlo.
Y la muerte llego atraída por un arrebato, locos desvaríos justificados por un amor que rebasó toda razón y lógica.
—Jinhwan sigue esperando por él.– Dijo Yunhyeong de repente, mientras descansaba en el lecho en la casa de Chanwoo.
—Has hablado mucho con él últimamente.– Respondió el menor, sentándose en la cama.
—Fuiste tú quien me mandó a tratar de convencerlo de vender su propiedad.– Contestó el mayor a la defensiva, imitando la posición de su acompañante. —¿Estás celoso?
—Sí, pero sé que sólo te preocupa Jinhwan.
—Me conoces muy bien.– Yunhyeong tomó la mano contraría para acariciar las venas de la muñeca. —No sé cómo ayudarlo.
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Obsession. JunHwan- iKON
FanfictionJunHwan (JinhwanXJunhoe) Especial de Halloween- iKON FANFICS "Porque cuando amas estás dispuesto hacer lo que sea. Porque no hay obstáculo, no hay reglas. El amor no se entiende con la razón. Porque como fantasma, el amor aparece y yace en el mundo...