La Maldición Que Me Persigue

#3

Muchas veces creía que todo era una mentira y que algún día iba a despertar de ese horrible sueño 

Cada vez la convivencia en la  casa era mas difícil,  siempre discutíamos, nunca teníamos momentos familiares , mi padre llegaba de malgenio a  golpearnos.

El miedo a que él llegara era aterrador, mi hermana y yo nos escondíamos hasta que el se acostara a descansar, porque Marcela siempre hacia que mi padre se pusiera de malgenio con las cosas que le inventaba sobre nosotras.

Mientras tanto Marcela iba haciendo de las suyas sobre nuestra familia, la estaba arruinando poco a poco.

Los episodios de posesión demoniaca por parte de Marcela eran cada vez  mas frecuentes y a mi me daba mucho miedo porque en ese estado alterado ella amenazaba con matarme, y esto me generó muchos traumas. Recuerdo un día, que estando sola con ella, se desmayó y se trasformó en una figura demoniaca  y comenzó a rasguñarse y pude ver, espantada, que en el cuerpo le aparecían símbolos satánicos.

Era común ver la estrella de cinco puntas hecha con sangre y palabras como "muerte" y "peligro", en la espalda de Marcela.

Muchas veces me encerré en mi cuarto y no salía hasta que llegaban mis padres. Marcela golpeaba la puerta intentando abrir, yo me desesperaba tanto que sentía  que iba a morir 

Eran cada vez mas la veces que se desmayaba e intentaba suicidarse, tanto que a mi mamá le tocaba estar muy atenta de ella todo el tiempo. 

Una vez dijo  que la habían violado y llego a la casa desnuda con rasguños y sangre en todo el cuerpo, era horrible se veía maltratada y cansada. 

La vida en nuestra casa era compleja y estresante, a mi me gustaba ir al colegio porque allí me olvidaba de todo lo que estaba pasando en mi hogar, allí en el colegio jugaba y se me pasaba un poco el dolor  emocional que sentía, pero al llegar a mi casa de nuevo revivían los problemas. Últimamente Marcela había decidido acusarme de robos que yo nunca había cometido, esto desencadeno en palizas tan fuertes que no he podido olvidar; también recuerdo palabras  que mi mamá me decía, que marcaron mi vida frases como "usted es un basura", "usted no sirve para nada","estupida " , "bruta ", "me arrepiento de haberla traído", etc, aun retumban en mi mente  hasta el punto de creerlas.

Olvide decirles que mi familia es cristiana, que todos los domingos íbamos a la iglesia, pero en realidad eso no servia de nada, pues salimos de allí igual o peores discutiendo todo el tiempo 

A pesar de mis peleas con Dios, mucho tiempo después pude entender que ÉL si sabia de lo doloroso que resultaba para mi toda esta situación en mi casa.

Mi vida se había vuelto solitaria y vacía, en el colegio era agresiva y odiosa y por eso nadie me quería ni se metían conmigo. Una vez le rompí la nariz a un niño. Me estaba convirtiendo en una persona conflictiva y llena de odio.