Capitulo 1

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El chico se encontraba sentado en un incómodo asiento del lujoso auto de sus padres, esperando con la cabeza recostada en la ventanilla, desinteresadamente. Su rostro era inexpresivo, cómo siempre. Sus padres ya estaban acostumbrados a su forma fría y indiferente, también su mejor amigo, William, que es su hermano.

Perdido en sus pensamientos no se ha dado cuenta de que ya llegaron a su nuevo destino, La Urbanización "Los Lares". Era un poco nuevo el lugar, fue hecho hace como 5 años. Tiene casas muy grandes y lujosas, pero son pocas. Al rededor de unas 15 a 20 casas.

- Bajen las maletas, muchachos. - Ordenó la señora Taylor, Kristie. Su esposo, el señor Taylor, Robert, ayudaba con las llaves o hablando con los vecinos curiosos que miraban el auto intrigados por saber que familia nueva habitaría el urbanismo.

Cuando salieron del auto, William se estiró poniendo los pies de puntillas y estirando los brazos, mientras Seth miraba el lugar con la misma mirada de siempre.

- Creo que nos rodean narcotraficantes. - Dice William, tratando de suavizar el ceño fruncido de Seth. Éste mismo lo mira diversión.

- Creo que nos rodean anestesiólogos. - Dice. Seguía mirando el lugar hasta que su madre gritó con desespero:

- ¡MALETAS! -

Se miraron entre ellos y se encogieron de hombros mientras iban a la parte trasera del auto.

··········

La casa era enorme, pero cómo todo lo demás, Seth no le dió interés, mientras William estaba que daba saltos de alegría al ver que había obtenido el cuarto más grande. William siempre fue el más alegre, sociabilizador y divertido. Seth tampoco es el chico "follachicas" , simplemente se entretenía más boxeando o andando en su moto por las calles oscuras. No asistia a carreras, lo vé cómo una tonteria, si quería despejarse o es un saco de boxeo o un camino libre y despejado por donde pueda respirar aire puro y no un aire adinerado.

- Chicos, arreglense que vamos a ir a hablar con los dueños del urbanismo. Ya saben - Paró - A sociabilizar un poco - Agudizó la penúltima sílaba y, Seth Bufó. William bailaba por su habitación mientras tarareaba "We are champions". - En media hora, adiós.  -

Si se preguntan por donde hablaban pues, les respondo la duda. Altavoces. Había uno en cada cuarto para asi despertar o alertar a sus hijos.

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- Kristie, me siento un poco mal. Ya sabes - Seth tosió falsamente, con una mano rozando su estómago - Problemas, supongo - Le restó importancia. Su madre le miró con reproche, sabía perfectamente el perfecto estado de salud de su hijo. Pero lo deja pasar, no es la primera vez que quiere evitar algún evento social o algo comparado a eso, simplemente sus padres tienen más compasión con él.

- Seth...  - Empezó ella, sin querer terminar la oración. Pensando cautelosamente la palabra indicada.

- Kristie. - Soltó con sequedad. El la miró con un semblante frío, nada nuevo para ella de hecho. Nunca dije que aunque sus padres les tuvieran compasión el tuviera algo de la misma con ellos.

Ella suspira, rindiéndose.

- Vale. - Se acercó al llavero y sacó las llaves de su moto. - Llegó aqui ésta mañana. Toda tuya - Dijo su madre, con una sonrisa a boca cerrada, que nisiquiera le llegaba a los ojos.

Sus ojos se iluminaron, no hay nada más que ame Seth que su moto. Hombres. Pero es así.

Miró la sala en busca de algún reloj que estuviera en alguna pared de la sala, intentando saber la hora. Su madre carraspea la garganta y dice:- Por alla - Señala la pared que estaba al lado de las escaleras.

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⏰ Última actualización: Aug 12, 2014 ⏰

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Perdida en ti[PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora