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Muchos creen que llegar a la cima del éxito es fácil, pero a Hoseok le había costado más que trabajo. Le había costado emociones rítmicas al sentir su corazón palpitar con anhelo al pisar el escenario. Le había costado la vida estar frente a una multitud que le aplaudía con emoción y fervor al escucharlo y verlo cantar. Vaya que había costado dejar atrás las reuniones familiares, las reuniones con los amigos del instituto, las reuniones o citas a ciegas con chicas. Las fiestas a altas horas de la noche, las pasaditas de copa. Todo eso le había costado trabajo dejarlo atrás.

Pero ahora era un Ídolo en la punta del monte Everest, disfrutando y gozando del pleno éxito que se poseía. Viendo como el mundo se excitaba al escuchar su música y verlo bailar. Todo aquello era complaciente para él, era merecedor, era totalmente fantástico.

Quien diría que un chico normal y ordinario cumpliría su sueño, que sería el sueño de alguien más. Quien diría que Jung Ho Seok el chico más tonto y nerd del instituto estuviera gozando ahora mismo de su inmensa riqueza.

Quién lo diría.

Los meses y años pasaban desapercibidos pero las cosas nunca cambiaban de parecer. Jung Hoseok tenía una absoluta debilidad. Una sola, con nombre y apellido.

Baek Hyu Na.

Una chica joven y peculiar entre las demás. Una chica tan linda como los sentimientos de Hoseok. No se había equivocado al pedirle que fuera su novia en el instituto y hasta la fecha cumplían ocho años siendo novios, novios distantes.

Bien dicho que a Hoseok no le importaban las relaciones distantes, le daban cierto desafió interior, pues al saber que la distancia se interponía entre ellos le hacía luchar todos los días por tenerle a su lado. Sin embargo por aquel detalle siempre se armaban discusiones. Pues a Hoseok últimamente no le daba tiempo ni de contestar las llamadas de su novia. Tenía demasiadas entrevistas, discos por grabar, catálogos de productos que rellenar con su rostro, sesiones de fotos, videos que grabar, coreografías que practicar, canciones que producir, canciones que escribir y un sinfín de cosas. El tiempo no le ayudaba en nada.

Justamente hoy, 18 de Abril cumplía el octavo aniversario con Hyuna. Quería felicitar, claro, por quererlo y amarlo, por estar con él en los peores momentos, por las veces que ella le llevaba una soda cuando estaba en su estudio escribiendo alguna nota filosófica. Estaba agradecido con ella por todo el apoyo en las audiciones porque aun cuando su familia no aprobaba su idea de convertirse en "productor" ella siempre le caía de maravilla esa afirmación que hacia Hoseok. Siempre tenía buenos ánimos para decirle que su sueño se cumpliría.

Pero claro estaba, Hoseok no había podido coger el móvil para llamarla si no hasta las altas horas de la noche. Pues había tenido que hacer una grabación para una tal colaboración con un artista estadounidense. Quería contarle a su novia (la cual mantenía en secreto) como había pasado su día, quería contarle cuanto había pensado en ella. Pero Hyuna no contestaba el móvil, o amenos después de ocho veces más.

Fake Love » ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora