Con solo escuchar tu voz

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La perilla de la puerta sono varias veces dando a entender que Taihei ya habia llegado a la casa. Ebina que se encontraba en casa de Umaru por una sospechosa tarea por equipo no podia mas con su escandaloso corazón.

En cambio Taihei entro de lo mas normal hasta que vio que no habia ropa ni mangas en el pasillo, eso significaba que habia visitas en casa, lo primero que paso a su mente fue que era Ebina, de hecho las posibilidades de que ella estuviera ahi eran realmente altas. Agarro aire un par de veces y ya mas tranquilo se adentro al apartamento.

-Buenas noches-

Mientras saludaba se dio cuenta que todas estaban ahí, bueno al menos no era solo Umaru y ella, que sería aun más incomodo.

-Buenas noches!-

Dijeron las chicas al unisono. Era realmente extraño que todas estuvieran ahí y más a esa hora, era normal para Ebina, ya que ella vivía abajo, pero para las demas era muy oscuro como para volver a casa caminando.

-chicas, ¿Las van a recojer?-

Las dos asintieron con la cabeza, para que al final Sylphy hablara.

-Mi Oni-sama va a venir a recogerme y vamos a llevar tambien a Kirie-san!-

Taihei rio para sus adentros, estar dentro del carro con esos dos escandalosos no creo que sea muy buena experiencia para Kirie, el solo imaginarlo le causaba gracia.

-¿Quieren cenar konnyaku con nosotros?-

Aprovechando que todas estaban ahí el joven Doma se puso a cocinar Konnyaku, cosa que odiaba Umaru porque no tenia nada de carne. Pero se tenía que acostumbrar que no siempre se iba a comer carne, aparte era bastante barato y nutritivo.

-O..Oni-san-

Taihei sintio como su cuerpo se estremecia al escuchar aquella voz.

-¿Pasa algo Ebina-chan?-

La menor tomo aire un par de veces con su mano en pecho como un intento de calmar sus latidos.

-¿C..Como va a preparar el Konnyaku?-

Taihei se dio cuenta que Ebina solo queria ligerar el aire incomodo que había entre ambos, cosa que lo sorprendio pues ella no era el tipo de chica que tomaba riendas en el asunto, no iba a desperdiciar el esfuerzo de Ebina, ya que sabia lo dificil que debio haber sido para ella decir aquellas palabras.

-Lo voy a hacer en guisado-

Dijo con aquella sonrisa que ella amaba.

-¿G..Guisado?, En Akita siempre lo hacia mi m..mamá en sopa-

Y así empezo una conversación sobre temas sin gran relevancia, lo importante es que ambos estuvieran pasando un momento juntos, el tema de la conversación era lo de menos, solo querian escuchar la voz del otro.
Apesar de estar reunidas ahí para hacer la tarea, las chicas no interrumpieron a Ebina-chan, pues no siempre se podia ver en ella un rostro tan brillante.

Al terminar la tarea las estudiantes cenaron y se fueron a casa, Umaru obrigo a Taihei que acompañara a Ebina a su apartamento apesar de vivir literalmente a unos pocos metros de distancia.

Ya frente a la puerta del apartamento ambos se despidieron como siempre lo hicieron y no mencionaron nada respecto a la llamada de la tarde.

-Adios Ebina-chan!-

-A..Adios....Oni-san-

La chica quería llamarlo por su nombre como anteriormente habían acordado, pero al escuchar que el no lo hizo  simplemente tampoco pudo. Al cerrar la puerta Taihei se puso de cunclillas mientras se agarraba la cabeza con sus manos.

Se maldecia a el mismo por haber dicho que iba a cambiar y al final no hacer nada, el mismo fue el que propuso lo de llamarse por sus nombres, pero a ultima hora se acobardo, lo mismo paso con la llamada, ¿porque era tan cobarde?.

Mientras se arrepentia de sus acciones le llego un mensaje a su celular.

-Gracias por la cena Taihei-

Era un simple mensaje, no era lo mismo que decirlo en persona, pero eso no fue barrera para que el corazón del joven Doma se acelerara, Ebina era tan buena chica y el era tan cobarde, no podia huir mas, cuando veía que ella se esforzaba tanto apesar de su timida personalidad. Así que al igual que la chica se armo valor y le abro por telefono, pues ya sabía que se le daba mejor hablar por ahí, al menos era mas sincero.

-¿Q..Q..Que paso Oni-san?-

Pudo escuchar los pasos de la chica hacia la puerta, pero alcanzo a agarrar la perilla.

-No la abras, si veo tu rostro tal vez no sea capaz de decirlo-

Ebina algo insegura solto la perilla.

-Mira Ebin...dire Nana, mmmm.....haaa esto es dificil aunque no pueda verte-

El corazón de la peliroja no dejaba de acelerarse mas con cada palabra que el decía, no quería pensarlo, pero eso parecia una confesión.

-Lo que dije en la tarde por el celular de Bomber.....era verdad-

El decirlo hizo que un peso dentro de Taihei saliera, pero uno más grande entro al no escuchar respuesta por parte de la chica.

-.....¿Me escuchaste?-

Los sentimientos de ambos (TaiheixEbina)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora