A L E X I T I M I A

B E G G I N I N G

Me levante de mi cama, no hacía mucho que había salido el sol y los rayos del mismo perforaban sobre mi piel haciendo que subiera la tempratura, era lunes sabía que tendría que ir al colegio, lo mismo de siempre. Saludar a todos con mala cara, sentarme, hacer trabajos y salir. La rutina en mi colegio es muy monótona así que trato de hacer alguna actividad para no aburrirme.

Cheque la hora en mi celular, mierda. Se hace tarde, me levante como pude y tome mi ropa, me puse el uniforme, me lave los dientes y por lo general nunca me peino, ¿quien se peina?, tome mi mochila y baje del segundo piso.

Al parecer mi madre se encontraba dormida, encontré y agarre las llaves de mi casa, antes de salir me quede pensando alguna cosa, no sabía que era pero era algo, como cuando despiertas y sientes que estás dormido pero en realidad estás despierto, creo que es algo un poco irracional explicar, pero ahí estaba. Me reincorpore y salí.

Los rayos del sol daban en mi cara, el clima estaba ardiendo, era una mañana muy acalorada y para ser temprano ya había demasiado movimiento en las calles, para suerte mía mi colegio no está muy lejos de mi hogar, así que puedo llegar a tiempo si tan solo camino rápido.

Mientras me hacía camino hacia mi destino, una mano se posicionó sobre mi hombro.

.- Hey Nathan, ¿cómo estás?, no supe nada de ti este fin de semana, pense que al menos llamarías.- Dijo mi amigo Zack mientras se incorporaba a mi rápida caminata, al parecer el también iba tarde.

.- Eh.. en realidad estuve un poco ocupado.- Vociferé para luego dar un gran bostezo, la noche anterior no había podido dormir muy bien, pensamientos iban y venían en mi cabeza, hasta que en algún punto de la oscura noche me quede dormido.

-. ¿Ocupado?, ¿tu?, que va!, pero nunca haces nada, simplemente malgastas todo tu tiempo haciendo música, ¿Que jamás te aburres de hacer lo mismo?

Zack tenía una idea muy estupida sobre hacer música, dice "Si puedo escucharla de otros, no veo la necesidad de hacerla" tal vez antes de que me sumergiera profundamente en el mundo de la música no le molestaba, ya que pasaba más tiempo con el, pero ahora que mi prioridad son mis canciones, creo que le molesta.

.- Calla imbecil, ¿Te he dicho cuan estupido suenas al decir eso?.- solté dándole una mirada un poco enojado, pero era obvio, nadie habla así sobre lo que más amo.

Después de una discusión sobre por qué su idea es estupida y algún intercambio de palabras sobre lo que él hizo en sus días libres, por fin llegamos al colegio y por ende a mi salón de clases.

Al entrar, alguna caras conocidas voltearon a dar miradas de curiosidad, por razones de la vida el humano es curioso, ya que si no lo fuera algo estaría fallando, aunque sea una molestia es algo con lo que aprendes a vivir.

Me senté en mi lugar, última fila de lado derecha, ultimo asiento en la esquina, un poco alejado de todos, me viene bien a la hora de hacer música o escribir alguna letra de alguna canción que se me haya venido a la mente sin tener que soportar las miradas y preguntas curiosas de mis compañeros.

Al parecer llegue un poco más temprano de lo que parece, tengo la mala costumbre de levantarme antes de la hora y así pensar que llegaré tarde, en fin algunos lo verán como bueno, pero yo solo pienso en que pude haber tenido horas de sueño extra.

Zack se fue con su grupo de amigos, si aunque fuéramos amigos, dentro del salón parecemos desconocidos. Mirando por la puerta blanca del salón de clases vi entrar a quien esperaba, siempre con su suéter verde oscuro, se posicionó frente a mi. Abraham, mi mejor amigo, lo conozco de toda la vida, nuestras madres eran amigas así que fuimos forzados a entablar una amistad, en realidad no fue difícil, desde que tenemos memoria nos llevamos muy bien, podría decirse que es la persona que sabe todo y puede ver a través de mi.