Un intruso se asomaba a mi ventana mientras las flores danzaban en el aire, era un espectáculo tan hermoso que anunciaba lo horrible que sería este día.
No soy pesimista, solo digo lo que sé por experiencia. Un pétalo entró por mi ventana al igual que un bello sonido, era un canto tan dulce que intentaba distraerme de mi amarga existencia. Me levanté con pereza y me dirigí al baño, en el espejo se reflejaba mi rostro cansado, mi largo cabello rojo despeinado que si bien mucha gente me había dicho un centenar de veces que lo cortara nunca le tomé importancia al asunto, bajo mis ojos violetas se encontraban unas ojeras más grandes de lo habitual, mis ojos son y siempre serán mi más grande tesoro, sé que son inusuales y es por eso que me gustan.
Si me hubieran puesto un espejo delante en medio de la noche me habría orinado encima; parecía un muerto viviente, a mi hermana le hubiera dado un infarto pensando que me habían poseído o algo así.
Bajo las escaleras hacia el comedor y me encuentro con la sonrisa nerviosa de mi hermana mayor mientras juega una y otra vez con su rosario, ella asistió a un convento a sus 6 años, de no ser por que regresó hace 1 año yo no recordaría su existencia. Mi abuela era una mujer exageradamente religiosa, inculcó a mi madre a ser una santa y al notar que no lo lograba llegó al límite, ella se casó desobedeciendo a las enseñanzas de su "sagrada" escuela, arrepentida prometió al cielo que su hija sería mucho mejor que ella y bla bla bla.
Muchos me preguntan por qué voy a la iglesia si no creo en la religión y la respuesta son esas dos paranoicas, una institutriz y una monja en casa, digamos que no tango mucha alternativa.
-Buenos días Andreu, ¿cómo dormiste? - en su voz se notaba la inseguridad al tratar conmigo, siempre mantenía su distancia como si mi presencia rebosara de pecado. No digo que yo sea lo más puro del planeta, pero ¿podría intentar disimularlo no?
-Bien, Sara es tu primer día ¿no? - ella asintió lentamente; se levantó de su asiento de manera delicada, como si cualquier movimiento brusco pudiera romper aquella muñeca de porcelana.
Su falda larga casi llegando a sus tobillos se movía de manera ligera con sus pasos y vueltas alrededor de la cocina y la sala buscando su almuerzo y su mochila, los tomó y salió de manera apresurada con un saludo muy discreto como quien se encuentra con alguien que no recuerda y solo mantiene apariencias.
Me senté sólo en la sala para hacer algo de tiempo ya que la escuela me queda demasiado cerca y no es necesario que llegue tan temprano; el silencio, mi amigo más querido y acompañante más fiel se hacía presente mientras fuera de la ventana danzaban las flores.
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Y bueno chicos espero hayan disfurtado este prólogo(?
El personaje principal es Andreu si quieren les hago ficha técnica, pero por ahora lo conoceran como el amargado de la vida poco a poco chavos poco a poco 7w7
(523 palabras)
