don't leave me | minsung

único

—¡No! ¡JeongIn ven para acá! —el adulto corría detrás de su hijo quien insistía en hacer oídos sordos e ignorarlo. —¡Lee JeongIn! ¡Te juro que si no dejas de correr en este intante no vuelves a salir con HyunJin!

Y ahí fue cuando el niño de nueve años se detuvo abruptamente y dió vuelta mirando a su padre con los ojos totalmente abiertos.

—¡Papá! No puede hacer eso~ —el menor hizo un puchero acercándose de mala gana.

—¿Quieres probarme? ¡Ah! —Jisung le respondió con una mano en su cintura y con la otra en su cabeza —. Tu padre debe estar esperándonos, vamos.

—¿Qué padre? Si máximo lo veo una vez a la semana por su estúpido trabajo —respondió bruscamente y Jisung suspiro deteniendo su paso. Él sabía que debía ser comprensible con su pequeño hijo pero por momentos se estresaba demasiado.

—Jeonginie~ —Jisung se arrodilló quedando a la altura de sus ojos y tomó su mano —. Ya hablamos de esto pequeño.

—¡Ya lo sé! ¡P-pero q-quiero a papá conmigo! Así c-como Felix hyung —el menor dejó salir unas cuantas lágrimas de sus ojos —. Sé que d-debo ser fuerte porque usted también lo e-extraña pero me duele mucho, padre.

—Está bien, mi amor. Hablaremos con tu padre hoy, ¿Bien? —el pelinegro le prometió llevando sus dedos al rostro de su hijo y limpiando las lágrimas traviesas —. Ahora sonríe, ¿Qué quieres que te prepare para comer?

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—Hola amor —Minho le dió un suave beso cuando se acercó a él, miró a su hijo quién observaba con atención el lugar —. Hola campeón.

—Hola, padre — fue lo único que recibió y Minho frunció el ceño con duda. Su hijo era bastante imperativo las veces que se veían, es más, no solía despegarse de su lado en ningún momento.

—Si quieres ve a jugar, JeongIn —murmuró el mayor y con un asentimiento, su hijo fue a pasos apresurados hacía su habitación.

Jisung sabía perfectamente lo que su esposo le iba a preguntar así que se adelantó en ves de dar tantas vueltas como comúnmente hacían al encontrar una diferencia.

—Te extraña. Me ha dicho que quiere que seas como los padres de sus amigos y no, no hablo de lo exitosos que son como seguro tu mente está imaginado, él quiere pasar una jodida semana con su padre pero, que casualidad, ¡Él nunca está! —farfulló Jisung con su voz teñida de total molestia, estaba enojado y no solo con su esposo, sino con él también. Por permitir que su hijo sufra por tanto tiempo.

—Trabajo para mantener esta familia, Jisung. Y cuando regreso después de un largo viaje tú solo me recibes con gritos —le responde malhumorado —. Doy todo para mantenerlos bien, para darles una buena vida.

Jisung sintió ahogarse al notar cuán destruída estaba su relación. Dios, JeongIn solo quería tener un padre real, no uno aparentemente invisible.

—Quiero el divorcio —murmuró mirandolo fijamente —. No puedo seguir con esto, lo siento pero me cansé.

Minho sintió su cuerpo debilitarse y sus ojos llenarse de lágrimas que se negaba dejar salir. Divorcio, iban a terminar su relación después de tantos años, él podía sentir como todo lo que ambos habían construido se derrumbaba de un día para el otro, o tal vez desde hace tiempo pero él no había sido capaz de notarlo.