Juego de gemelas

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Serekunda, Gambia (camarakunda)
—Sarah ¿Me vas a decir dónde se ha metido tu hermana en un día tan especial como hoy?

—¿Me acabas de llamar Sarah? Yo... soy... Jalilla...-Dijo con voz entrecortada.

—Ya claro, ¿y esto? -Dijo apartando el velo rojo que tenía, mientras acariciaba con los dedos el hombro de su hija. -¿Desde cuándo Jalilla tiene el mismo lunar que tú y justamente en el hombro?

—Este...mamá te lo puedo explicar...

—¿Explicar? ¿Explicar qué otra vez os habéis intercambiado?¿Cuántas veces te diré que no te hagas pasar por Jalilla ni ella por ti? ¿A qué creéis que estáis jugando? Definitivamente me estáis tomando por idiota. Por el amor de Dios, vais a recibir un castigo severo por todo lo que me estáis causando. -Calló un segundo y prosiguió. La culpable soy yo por no saber distinguir a mis propias hijas...-Dijo desesperada, levantando sus manos hacia arriba. -Algún día de estos me vais a matar del disgusto. Llevo toda la mañana pensando que tú eras Jalilla. ¿Por qué me mentís? ¡¿Por qué hacéis esto justamente hoy, cuando el prometido de tu hermana está por llegar?! -Dijo prácticamente gritándole.

—Mamá, no te enfades... ya te habíamos hablado de esto y me costó confesarte mis sentimientos hacia él. Soy yo la que quiere a Omar, no Jalilla. Me gusta mucho mamá. No sé porque no podría estar con él, total si nadie nos sabe diferenciar. Dime mamá, ¿quién se pondrá a investigar si soy o no Jalilla? Sobre la existencia de mi lunar solo lo sabemos las tres a menos que tú se lo hayas comentado a alguien. Mamá por favor permite... permite que sea yo la que ocupe el lugar de Jalilla. Sé que está sonando a película y que será difícil de asimilar, pero debes entender que con esto ni ella ni yo seremos felices.

—Esto no lo vuelvas a repetir ¿eh? Esto que no te lo escuche nadie. Este será el último día que te hable de esto.
Sabes me pareció una estupidez lo que me contasteis, por eso no os quise ni responder, pensé que con eso os había quedado claro lo que pensaba. Debería darte vergüenza enamorarte del hombre con el que se ha comprometido tu hermana Jalilla. Más allá de lo que sintáis hay un compromiso de por medio.
Y además ¿estás segura de que nadie os diferencia? Te olvidas del más importante, quien te ha creado y quien ha escrito tu destino ¡Allah!

Sabes que no fue mi decisión. Ha sido la de tu padre Ibrahim que Allah este en paz con él. Hay que respetar su voluntad Sarah. Antes de morir tu padre me lo dejo muy claro. Quería que Jalilla fuese para Omar. Allah me libre de romper la promesa que le hice a tu padre de que así sería, acaso...¿no sabes que dice el islam de romper promesas? Si te acuerdas cuando os hable sobre el Surat Al-Má'idah, Allah hizo un convenio con los hijos de Israel, y luego les explicó la recompensa que recibirían si cumplían la promesa de cumplir ciertos dogmas. Allah concertó el pacto con ellos diciéndoles que si hacían la oración, pagaban el Zakât, creían en sus mensajeros, hacían caridades generosamente en su nombre, les absolvería de sus faltas y los introduciría en sus jardines más preciados. ¿Qué pasaría con todo aquel que no cumpliera con la promesa de cumplir con ello? Ya sabes la respuesta. Allah los castigaría en sus eternas llamas. Es un claro ejemplo de que para nuestro señor las promesas son muy importantes y por ellas puedes quemarte. Desde luego yo no a ir a Jahanam por nadie, por más insignificante que os resulte la situación.
Sabes cuanto debería pesaros la palabra de vuestro padre, lo contento que estaría desde su tumba viendo como hemos cumplido sus deseos. Además cuando vino el tío de Omar a por la mano de tu hermana os quedasteis calladas, ahora las nueces de kola están repartidas entre las familias. Sabéis que esto es un símbolo sagrado y de unidad para las parejas que tenemos que respetar. Ante los ojos de nuestro señor, la que está comprometida con Omar es tu hermana no tú. En el supuesto caso de que os intercambiaseis, todo lo que hicieras con él, sería ¡haram! Tú misma sabes que antes del matrimonio, todo lo que hagas con un hombre está prohibido.
Mira no quiero hablar más de este tema. Cada vez que reces, pídele a Dios que te saque esos sentimientos. No te preocupes hija tus primos vendrán de Banjul a visitarnos, son igual o más guapos que Omar y tendrás la oportunidad de tener un marido. Sino lo hacéis por vuestra madre, hacerlo por Allah o por la gente que no quiere que esté compromiso salga adelante. Por favor ve ya a por tu hermana. Búscala donde sea que esté y venir antes de media hora. Hay muchas cosas que hacer y nada está resuelto.
Sin apenas ganas de contestar a todo lo que su madre dijo, Sarah salió en busca de su hermana Jalilla.

SIN TRES NO SOMOS DOS(terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora