Tengu

IV

El zorro plateado comenzó a cubrirse de llamas de un tono azulado, poco a poco el cuerpo aumento su tamaño hasta dejar esa forma de zorro y tomar la de un hombre de gran estatura, su rostro estaba completamente oculto tras una mascara de zorro color blanco con detalles rojos y portaba una yukata azul celeste con bordados de zorros color blanco, sobre su cabellera plateada y despeinada sobresalían un par de orejas y tras su espalda baja una gran cola a juego con su cabello. Hinata observó fascinada la trasformación de la criatura sobrenatural, parecía encantada por el fuego que lo había cubierto hace tan sólo unos instantes y que ahora se estaba extinguiendo a los pies del zorro.

—Que hermoso...- Murmuró involuntariamente.

—¿Quién es ella, Obito?- Preguntó sin quitar la vista de encima de la joven.

—No importa.- Espetó Obito pasando de largo junto a Hinata y se colocó al lado del zorro.- ¿Qué sucede? ¿Por qué estás aquí? ¿No deberías estar con los demás?

Kakashi regresó su mirada a Obito.

—Madara-sama y Minato-sama estaban preocupados, no eran capaces de localizar tu energía por ningún medio, creyeron que tú habías...- Se pausó un momento.- Bueno...

—Tsk.- Obito cruzó los brazos sobre su pecho mostrando un gesto de indignación.- Todos ustedes me subestiman completamente.

—Emm...- Hinata comenzó a sentirse algo incomoda al estar escuchando una conversación que no le correspondía.

—¿Qués es lo que quieres?- Preguntó Obito con el orgullo irritado.

—Bueno... Creo que debo marcharme para que hablen con tranquilidad y en privado.

— Cierto.- Contestó cortante.

—Disculpa...- Kakashi se acercó a ella mientras se agachaba para poder quedar a su altura y así verla a los ojos.- Eres una sacerdotisa ¿Verdad?- Hinata afirmó un par de veces con la cabeza.- ¿Dónde está tu templo?

Hinata observó que tras los huecos de esa máscara aquel ser, poseía un ojo completamente negro y otro muy parecido al ojo de Obito.

—No pertenezco a ninguno.- Sonrió despreocupada.

—¿Por qué?- Kakashi se irguió sorprendido esperando su respuesta.

La sacerdotisa se encogió de hombros sin saber qué o cómo responder a su pregunta, el Tengu no lo demostraba, pero al escuchar la respuesta de Hinata sentía interés, él también quería saber la razón y al notar que no obtendría una respuesta sólo desvió la mirada.

—Ya veo... Tal vez no eran capaces de encontrarte por ella.

—Pff...- Bufó.- Como sea... ¡Oh!- Giró la cabeza fastidiado pues al parecer algo le había llegado a la mente.- Por favor dime que no vienes con Naruto, Menma o Sasuke...- Vociferó.

—No, Menma fue con Shisui y Naruto está con Sasuke, yo he venido con Itachi, pero nos separamos, queríamos cubrir más terreno para finalizar tu búsqueda.

Obito suspiró aliviado.

—Como sea... larguemos de aquí... Mujer.- Giró sobre sus talones para dar la espalda.- Gracias.

Kakashi observo sorprendido y atónito a su viejo amigo, no entendía por qué le agradecía y él era un zorro curioso, tal vez luego preguntaría sutilmente a su arisco amigo en otro momento, mientras tanto, hizo una reverencia para Hinata y a paso rápido logró acercarse a él.

—Obito...- Murmuró con voz profunda.

—No lo digas.- Interrumpió.- No te atrevas, Kakashi.