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El día estaba por terminar, ésto se podía notar al ver como el sol bajaba por el horizonte, pintando el cielo una vez azul de diferentes tonos de rojos, naranjas y amarillos. Las personas por todas partes de la ciudad caminaban por las aceras devuelta a su hogar después de un largo día de trabajar o estudiar.

Dentro de todas esas personas, se encontraba una chica. Ésta chica, de nombre SuYeon, caminaba con lentitud hacia su hogar luego de un día repleto de exámenes. A pesar del sol, hacia un poco de frío, el viento le revolvía el oscuro cabello y sentía que sus piernas se congelaban debido a la corta falda del uniforme.

Mientras caminaba, solo podía pensar en lo mucho que disfrutaría de probar las comidas de su madre y dormir cómodamente en su cama.

Es una lastima que no podría.

Debido a lo hambrienta y cansada que se sentía, tomó la decisión de cortar camino y llegar mas rápido por un atajo. Se adentró a un oscuro callejón que parecía deshabitado, apresurando el paso.

El callejón estaba sumido en un silencio espectral que aterraba a la pequeña SuYeon, quien respiraba por lo bajo, temiendo romper tal quietud. Comenzó a caminar con rapidez, estar en tal lugar la asustaba y deseaba salir de allí lo más rápido posible.

Entonces, su corazón comenzó a latir con fuerza y sus manos se tornaron sudorosas cuando escuchó el sonido de una persona caminando detrás suyo. Tragó con fuerza.

Pensó que tal vez, sólo tal vez, si mantenía la calma y caminaba rápido, ésta persona no le haría daño. Oh SuYeon, tan inocente y crédula.

Todos esos pensamientos se desvanecieron cuando pudo sentir una respiración contra su oído y un afilado cuchillo contra su cuello.

"Si gritas, lo cortaré." Un escalofrío de puro terror recorrió el cuerpo de la pobre chica, y pudo sentir como el hombre presionaba el cuchillo contra su blanca piel, hiriendola tan solo un poco.

La situación era demasiado para SuYeon, que estaba acostumbrada a vivir una vida tranquila, ni una vez teniendo que vivir una experiencia tan seria como esa. Y es justo por eso, que la chica cayó de rodillas frente a su asaltante para luego golpear su cabeza contra el concreto del suelo, desmayada por semejante susto.

El hombre hizo una mueca al ver el cuerpo en el suelo y suspiró. Revisó sus alrededores para verificar que nadie había visto lo que estaba sucediendo, y al estar seguro de que nadie lo observaba, comenzó a hurgar en las pertenencias de su víctima.

Dentro del bolso que ésta cargaba consigo, encontró un teléfono celular,ㅡque estaba seguro costaría una buena cantidad de dineroㅡuna billetera con algunos wones, y un reloj que parecía estar en buen estado.

Al terminar de guardar los objetos que eran ahora de su pertenencia, observó a la chica frente a él. No podía simplemente dejarla allí, ella seguramente correría con la policía.

Así que tomó el cuchillo y le abrió el estomago.

[...]

Ya eran pasadas las diez de la noche cuando el detective Kim recibió una llamada del departamento de policía de Seúl.

"¿Si diga?" Contestó en una voz adormilada, había estado leyendo para pasar el rato cuando se quedó dormido.

"Señor, hemos encontrado el cuerpo de una chica en un callejón de la calle 43, tercera avenida."

NamJoon se levantó de su pequeño sofá color vino de un salto, dirigiéndose hacia la puerta. "Voy en camino." Al decir esto dio por terminada la llamada y tomó su abrigo, listo para salir.

Una vez fuera del edificio donde habitaba, caminó hacia donde yacía su auto estacionado. A esa hora era el único residente dejando el complejo de apartamentos, y el guardia que cuidaba el estacionamiento estaba por quedarse dormido.

NamJoon se despidió del señor y emprendió camino hacia la escena del crimen. Su semblante era serio, a pesar de trabajar en casos similares a diario, siempre se encontraba algo nervioso antes de ver el cadáver de alguna persona. Muy en el fondo aún temía encontrar que la persona asesinada fuera ella.

Para cuando llegó, el callejón se encontraba cerrado con una cinta policial y los forenses inspeccionaban el cuerpo y tomaban fotografías del lugar.

"Detective." Lo recibió el policía que había realizado la llamada.

"Oficial Jeon." Saludó él. "¿Qué tenemos aquí?" Preguntó mientras se ponía de rodillas frente a la chica de oscuros cabellos que ahora se encontraban bañados en su propia sangre seca.

El joven policía se aclaro la garganta. "Una estudiante de la secundaria Dukwon, se calcula que lleva muerta unas horas, encontramos su carnet de estudiante en el suelo a unos centímetros de ella, su nombre era Lee SuYeon."

NamJoon asintió, susurrando el nombre por lo bajo. "¿Cómo creen que murió?"

"Se cree que se trata de un robo frustrado, pues no encontramos pertenencias de ningún tipo aparte de unos libros."

El detective se levantó del suelo, asintiendo. Observó los ojos cerrados de quien alguna vez fue llamada SuYeon antes de apartar la vista y dirigirla hacia el oficial a su lado. "Busquen a sus padres, yo investigaré a los habitantes de edificios cercanos, vere si vieron a algún sospechoso."

Jeon asiente, alejándose de la escena y llamando a su compañero, Park JiMin, para comenzar la búsqueda de los padres de la víctima.

Kim mira el cadáver una ultima vez. "Encontraré a quien hizo esto, SuYeon."











•••

esto iba a ser un one shot but me di cuanta que no podría incorporar todas mis ideas en un solo capítulo, so aquí estoy

Perdónen cualquier error en la ortografía y/o redacción

val 💗
















arrest me! / jinnam Donde viven las historias. Descúbrelo ahora