⛤ Siempre tendremos rendez-vous ⛤

Nuestro último rendez-vous

Ahí estaba, frente aquel niño que en poco tiempo había logrado adentrarse en mi corazón y dejar una hermosa rosa, estábamos en un campo de rocas, algo raro para ser nuestro último rendez-vous, pero si Yoongi era feliz así, yo también lo sería.

"Mi principito," comencé diciendo, tenía ese miedo irracional de arruinarlo todo, "Tú que vienes del cielo..." Lo vi arreglarse su hermoso cabello rubio y luego mirarme. " Vienes de las estrellas, y eres libre como las golondrinas... Has sabido devolver las alas a mis mortales ilusiones." Me miró, con esa mirada dulce que siempre tenía, esa mirada que era tierna y agradable, casi como un gato, y a su mismo tiempo transmitía un fuerte sentimiento.

Lo observé acercarse un poco más hacia mí, lo vi tomar aire para luego abrir sus labios y pronunciar sus siguientes palabras; "Yo, que caí de ninguna parte," Cerró sus ojos, parecía que en cualquier momento gotas relucientes tal cual diamantes, lágrimas, iban a descender de sus hermosos ojos gatunos y pasar a recorrer sus suaves mejillas,  "o de un planeta desconocido," ahora que lo decía, yo nunca supe de vino, solo un día apareció a mi lado y se aferró a mi... ¿O yo me aferré a él? Quizás él ya se quería ir, pero sentía pena al verme tan solo, quizás...  "me iré y no por azar, pero nunca te olvidaré..." Y por fin, por fin pude ver como esas gotas brillantes como diamantes caían de sus gatunos ojos solo para hacer más melancólica la escena, y que tras cada gota, la flor que se encontraba en mi corazón se marchitaba. 

"Siempre tendremos rendez-vous" comencé a cantar con una suave tonada mientras sujetaba a mi principito entre mis brazos, me mecí al ritmo de la tonada y continué; "En  estos campos rocosos..." Quizás para algunos, ese sería el peor lugar para despedirse de alguien, pero no me importaba, no era lugar ni momento de los demás, era nuestro. 

"Lo esencial es invisible..." Mi pequeño príncipe, aún en mis brazos, continuó la canción, y quise vivir ese momento para siempre, que el tiempo se parara y solo quedemos nosotros abrazados, estaba todo callado, en silencio, uno tan cómodo que no importa cuanto tiempo nos quedáramos así, estaríamos en paz. Pero, Yoongi siguió cantando, con esa hermosa u¿y melodiosa voz que tiene, "...para las almas insensibles..."  Me sorprendí al escucharlo cantar esa linea, ojalá pudiese yo ser el caballero de este hermoso principito, pero solo soy un simple aviador.

"Siempre nos daremos rendez-vous" susurré en su oído mientras me aferraba más a él, me aferraba a él con esperanza  de que no se fuera, de que no me dejara solo, en este horrible lugar. "...En estos campos rocosos..." Y las gotas cristalinas que esperaba nunca salieran, escaparon, Yoongi me miró pero yo solo le dediqué una sonrisa, de esas que hacen que mis ojitos desaparezcan. Lo solté, y seguí con la hermosa canción, que con nuestro sentimientos habíamos creado, "Lo esencial es invisible" repetí su linea, nuestras miradas se juntaron, y al unisono cantamos; "...Para los ojos de los insensibles". 

"Y aunque salga del decorado"  al principio, no entendía, pero luego me dí cuenta de qué era el decorado, y ese era el mundo que habíamos creado juntos, las aventuras que habíamos vivido, "Aunque me vea muerto por fuera"  Este era el punto en el que ya no entendía, supuse que se refería a su falta de expresión en ese momento, pero preferí no comentar ni preguntar, si es que lo veía de nuevo un día, le preguntaría... Y él continuó, "Sabes que no será verdad"  Y quizás aquel que lea esto no lo entienda, quizás no está listo, o quizás, y solo quizás... Las personas grandes  todavía no le quitan la identidad... En mi cabeza, miles de de preguntas daban vuelta sin destreza, pero la única de necesitaba responder con urgencia era una, ¿porque se tenía que ir? Me miró y luego bajó la vista y se alejó, de seguro pensaba que no le estaba prestando atención. Y siguió una vez más, dejando de cantar y solo hablando; "Porque tenemos..." Más de esas cristalinas gotas brillantes siguieron cayeron y la rosa en mi corazón más se marchitaba. "P-porque t-tenemos...toda una eternidad..."

Y cayó a mis brazos, lo abrasé y lo cargué para luego yo también decirle unas palabras mientras lo miraba a los ojos. "Todos, tenemos una rosa en el corazón" Solo hizo falta mencionar aquella flor para que el principito mio sonriera, tan feliz era con solo la rosa? Continué, "Tenemos volcanes que nos asustan, tenemos pilas de amaneceres... Y también tenemos nuestros demonios y nuestras maravillas"  Al segundo que pronuncie la palabra 'demonios' el pequeño yoongi se tensó y se aferró más fuertemente a mi, él siguió llorando, y yo cantando; "Siempre tendremos rendez-vous, en este campo rocoso..." Limpié sus lagrimas y lo miré a los ojos, "Lo esencial es invisible para las ojos de las almas insensibles" Paró de llorar y se unió a cantar conmigo; "Siempre nos daremos rendez-vous" cantamos al unisono "En este campo rocoso... lo esencial es invisible a los ojos de los insensibles"

"Nosotros, que comprendemos la vida.." Besé su frente "Nosotros que nos burlamos de contar" Besé su mejilla, su mejilla aún mojada por las lagrimas y que ademas ahora estaba rosada. 

Y él siguió, con un hilo de voz débil y frágil, "Solo queríamos un amigo, incluso si un día tendríamos que dejarlo." Y por su tono débil y todas las emociones que tenía guardadas, lloré una vez más. 

Pero me atreví a cantar una vez más, "Yo, que de ninguna parte caí..." Es su parte, era consciente de ello, pero en ese momento eso no importaba... "De un planeta desconocido"  No quería que se vaya... Si él se iba, se llevaría mi corazón, y me dejaría con las espinas de aquella rosa que tengo ahí. 

El Principito respondió con una gran sonrisa; "Me iré... y no por azar..." Lo miré, y él me observó, nuestras miradas se juntaron y soltamos el ultimo verso, y lo hicimos a tal momento en el que nuestras voces parecían una sola; 

"No te olvidaré jamás"