IDK (en pausa)

Hey, hey, hey!

Ya habían pasado dos semanas desde que Akaashi respondió aquello que tanto esperaba la estrella de Fukurodani.

Bokuto caminaba distraído hacia el gimnasio, hoy tenían entrenamiento extra, pero como el los amaba, no se quejaba para nada.

-¡Hey, hey, hey!

Entró saludando, algunos le respondieron, otros rieron, el ambiente era muy ligero.

-Bokuto, ¿como estás?

Sonrió incluso más grande que cuando había llegado hace 5 minutos y le respondió:

-Akaasheee, estoy bien, gracias por preguntar ¿Vos como estás?

-Estoy bi...

-¿Comiste bien? ¿Estás durmiendo lo suficiente? ¿Otra chica te está molestando? ¿Cómo estuvo tu día hasta ahora?

Akaashi le puso la mano en el hombro y Bokuto de golpe dejó de preguntar, estaba quieto como piedra, lo cuál extrañó bastante al pelinegro.

-Estoy bien. Dormí bien. Comí bien. Tuve un lindo día. Y respecto a chicas, no hay ninguna. 

Y se le escapó una sonrisa que Bokuto llegó a ver.

-¿Por qué estás sonriendo? -preguntó sin dar vueltas, así como siempre lo hacía.

- Me acordé de algo...

El entrenamiento comenzó y terminó con éxito. Como siempre, Kotaro esperó al setter para acompañarlo a su casa.

-Bokuto, aprecio mucho que me acompañes, pero no es necesario.

-No lo hago porque sea necesario solamente, lo hago porque quiero y me gusta que estemos juntos.

Akaashi se sonrojó de golpe, intentó mirar para otro lado pero fue demasiado tarde, en 2seg ya tenía a su compañero revisando su temperatura y preguntándole si estaba mareado. Aunque el pelinegro le aseguró que no era fiebre, tampoco le hizo saber al más alto que era.