Estoy en casa, concretamente en la cocina, viendo como mama prepara un pastel de chocolate gigante.
Tiene la cara llena de harina y pegotes de masa en el pelo, pero no podría verse mas contenta mientras canta y baila canciones de Ed Sheeran, hace la tarta y charla conmigo. Parece mucho mas joven de lo que es.
-Me repites porque no puedo ayudarte? Para ver si ahora le encuentro el sentido- le pregunto
-Porque estas triste, y este es tu pastel sorpresa para animarte- me responde
-Claro mama, mi pastel sorpresa- le digo riendo
-Bueno ya que estas tan pesadita, puedes ayudarme... Limpiando mientras yo hago la tarta.
Yo suelto un sonido de queja
-Pero mama, esa es la parte no-divertida de hacer un pastel
-Niña caprichosa- me dice riendo- anda ven aquí y ayúdame a decorar el pastel, mientras yo hago unas galletas.
Me levanto del taburete riendo y me pongo con lo que me ha mandado
-Acepto tu pastel sorpresa para animarme, pero además unas galletas, no es demasiado?- le pregunto mientras pongo glaseado sobre el pastel
-Las galletas son para tu abuela, vamos a ir a tomar el te con ella
-Hoy? Puedo escaparme?- le pregunto con cara de suplica
-Cielo, si no quieres venir no pasa nada, pero es tu abuela y no esta bien que no quieras verla
-Pero la abuela me trata como una chica bonita sin cerebro que tiene edad para casarse
-Tu abuela piensa que si no llevas rímel, el pelo bien peinado y un anillo que pese en tu dedo es que no has tenido éxito en la vida. Pero ella es vieja y cabezona, y yo ya he dejado de intentar convencerla de que soy mas que la mujer de alguien.
-No hay que rendirse
-Mi niña dulce- dice mi madre antes de abrazarme- desde que nací llevo intentando que se de cuenta que mi mente vale mas que mi imagen y nunca lo he conseguido. La quiero y no quiero discutir con ella, así que un día decidí dejar de intentarlo y es mucho mejor. Algunas batallas no se pueden ganar, las personas no cambian.
Yo le abrazo fuerte
-Ya se que tu lo sabes, pero eres una mujer increíble.
-Gracias mi cielo- me responde besando mi frente- nunca viene mal que te digan cosas bonitas, pero ahora al lío, tu pastel sorpresa no va a hacerse solo.
Nos separamos y seguimos horneando y bailando con la cocina hasta que oímos el sonido de la puerta.
-Que bien huele- dice mi padre entrando.
Entra a la cocina y va directo hacia el pastel, cuando esta apunto de meter el dedo en el glaseado, mi madre y yo lanzamos un grito de terror.
-Nooo!- gritamos las dos
Mi padre se lleva un buen susto para después mirarnos como si estuviéramos locas, pero al menos hemos conseguido que no estropee el pastel.
-Pero que os pasa? Casi me da un infarto del susto- dice mi padre mirándonos con los ojos muy abiertos.
-Frank cielo, es un pastel sorpresa- le dice mi madre acercándose a él.
-A bueno, y para quien es la sorpresa?- le pregunta a mi madre antes de darle un beso.
-Para mi!- respondo yo sonriente.
-Para ti? chicas, tengo que explicaros el significado de la palabra sorpresa- nos dice riendo mi padre.
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Serendipia
RomanceSam arruinó su futuro. Anabel tuvo que volver a empezar. Pero juntos conseguirán dejar el pasado atrás y afrontar las nuevas dificultades. O lo harán por separado? Embárcate en esta historia de amor y disfruta del trayecto.