Quédate Conmigo // Calum Hood // Vic Fuentes

Capitulo VIII

Someone Else – Kellin Quinn
Reproduzcan cada que acabe beibes

— Gracias Mike — murmuré cabizbaja, realmente no entendía lo que sucedía a mi alrededor, me sentía.

Vacía.

Como si algo importante faltará en mi vida aúnque no supiese que era lo necesitaba y lo he necesitado mucho tiempo, gire mi vista del cigarrillo para poner atención al rostro de Michael el cual me observaba con una sonrisa — ¿Qué?

— Nada — encogió sus hombros — sólo... Eres linda — comencé a toser ya que me ahogaba con el humo del cigarrillo — Estefanía ¿Estas bien? — me cuestionó dando palmadas a mi espalda

— Si, si, solo que tu comentario me... Uhm nada — respondí ¿Qué demonios pasó? ¿el me había llamado linda? — Tengo qué irme — comenté apagando el cigarrillo

— ¿A donde? ¿A casa? — Me cuestionó ¿Casa? ¿realmente tenia un hogar? Di un largo suspiró y me límite a asentir para seguir caminando.

Llegue al lago de siempre pero esta vez me senté en un árbol cercano al parque tome otro cigarrillo y lo encendí, di una calada cuando comencé a ver a los pequeños jugar y recuerdos llegaron a mi mente.

— Mamá vamos solo un pequeño rato ¿si? — supliqué nuevamente, mi madre sólo me observó con molestia

— Joder Estefanía ya cierra la boca — dió una bofetada y yo ya no dije nada sólo me quedé ahí mirando el piso

— ¿Que demonios le sucede?  La pequeña solo quiere jugar — escuché decir a una mujer mayor, Vivian

— Es mi hija y puedo hacer lo que quiera — respondió tomando mi brazo con fuerza arrastradome a casa donde me jalo del brazo haciéndome caer — Me haz puesto en vergüenza Estefania — sentí mi cuerpo entrar en pánico mi madre enojada no era bueno.

Las lágrimas bajaban por mis mejillas ante aquel recuerdo

— Mami lo siento no volverá a suceder — murmuré totalmente asustada ella me miró pude ver la ira en ella mientras se acercaba a mi con los puños cerrados

Y estaba llorando ante aquél recuerdo varias personas me notaron pero me ignoraron como haría cualquiera, limpié mi rostro y me levante de ahí para caminar a lo que yo llamó hogar, caminaba con las manos en mis bolsillos y el cigarrillo en mi boca cuando al otro lado de la calle ví una pequeña dando sus primeros pasos hacia su padre, suspiré ante la escena

— Mamá ¿donde esta papá? — cuestioné al ver como los otros niños de mi clase corrían a los brazos de sus padres, mi mamá me observó indiferente y seguimos caminando — Extraño a papá — comenté entrando a casa — mamá — ella me miró — ¿Cuando volverá papá? — ella se acercó a mi, retrocedí unos pasos asustada

— Tu padre ya no te ama por eso se fue de casa y ¿adivina que?  Tiene otra mujer a la cual prefiere antes que a ti dime,  ¿Quien te preferiría a ti?  Eres solo un maldito error

Recuerdo perfectamente como me sentí en ese momento.

Rota.

— ¡No es verdad! — lancé mi pequeño peluche — ¡Papá me ama! ¡El volverá! — lágrimas resbalaban por mis mejillas — ¡Tu eres mala! — exclame cuando sentí mi mejilla arder, estába en el suelo, mamá me había golpeado

— Así que papá te ama ¿he? — me miro con rabia — pues vete con el — tomó mi brazo sacándome de casa —maldita mal agradecida — me dijo cuando me dejo allí y cerró la puerta detrás de ella.

— Fue la primera vez que me hecho de casa — murmuré limpiando las lágrimas — Allí — fije mi vista en el columpio del parque, una sonrisa melancólica apareció en mi rostro — Vic.

Me encontraba llorando en aquél parque solitario — oye — una voz me llamó y gire encontrándome con la figura de un chico algo mayor a mi mirándome con una sonrisa — ¿Estas bien? — ignoré su pregunta y gire mi vista — Soy Víctor — lo volví a ver

— Estefanía — murmuré y le regale un pequeña sonrisa

— Vic cariño — escuche a una mujer mayor llamarlo, ambos giramos — Cielo Mike tiene que ir al baño — se acercó limpiando el rostro de Vic — Oh hola — me saludo — Vic no me dijiste que habías hecho una amiga — Vic sonrió — soy Vivian la madre de Vic — me observó unos momentos — Tú eres la niña del otro día — baje mi cabeza — ¿Estás bien? — yo me levante del columpio y corrí a casa.

— Estefanía — limpié mis lágrimas y gire logrando ver a Hood acercarse a mi, me detuve y el se colocó al frente de mi — ¿Estas bien? — cuestionó al verme yo aparté la vista — Hey ven conmigo — limpió unas lágrimas de mi rostro, tomo mi mano y me llevo a una casa que desconocía supongo que era su casa, entramos y caminamos hasta la sala donde nos sentamos en el sofá — ¿Que te pasa? — y finalmente me quebré, realmente no quería hacerlo pero necesitaba hacerlo quería llorar hasta quedarme sin voz, me aferré a su camisa mientras escondía mi rostro en su pecho sentía su mano en mi cabello.

— Quisiera ser alguien más — murmuré el levantó mi rostro y limpió mis lágrimas

— Alguien más... ¿Quien exactamente? — me cuestionó

— Alguien mas fuerte, mas inteligente quizá mas sabio ¿crees que me gusta ser como soy? — cuestioné

— Estefanía — me llamó, levante levemente mi rostro mientras el me regalaba una sonrisa — Eres fuerte, jamas dejan que te vean quebrar, eso es ser fuerte, además eres una de las alumnas de alto porcentaje no eres una nerd pero tampoco eres estúpida — reí — Y vamos para ser sabia necesitas experiencias y de esas tienes muchas, Eres especial tonta

— Alto — interrumpí — ¿Me llamaste tonta?

— Mierda.