Un Día Más

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Era solo otro miserable día de mi vida, no había mucho que hacer en ese entonces en mi casa. Mi tía vino a mi casa con intención de ayudarme con el empaquetado y traslado de todas mis cosas hacía  su casa, aunque desgraciadamente lo termino haciendo todo ella sola. Ojala hubiera podido ayudarla con todo pero no estaba de los mejores ánimos como para hacerlo.

Ya han pasado un aproximado de dos semanas desde que mis padres murieron, no me culpo por ello, tampoco me siento triste , es como si estuviera bloqueada completamente de mis emociones. Varios de mis amigos y familiares vinieron a hablar conmigo y no se cansaban de repetirme que todo estaba bien, que ellos me amaban, ellos que saben que tipo de relación llevaba con dos desconocidos que apenas veía dos veces al año. Lo que más me dolió de todo esto es que incluso muertos me seguían haciendo la vida imposible, gracias a esto me tendría que mudar, dejar mi vida atrás y empezar desde cero. Pero no podía oponerme a nada, soy menor de edad y por eso mi tía se hizo cargo de mi, ya que al parecer al resto de mis familiares no les caigo tan bien y prefieren tenerme lejos.

Al pasar dos días ya estaba yo con mi característica remera roja y mi short de jean puestos mientras movía las últimas cosas que quedaban en la casa al camión de mudanza. Con la ayuda de mi tía y de Juan ( mi primo de 20 años ) terminamos de empacar y comenzamos el no tan largo camino a mi nuevo hogar ( si es como lo puedo llamar ).

Antes de que la camioneta arrancará pude dar un último vistazo a mi casa, en la cual estuve toda mi vida, en la cual conocí a mis mejores amigos, los únicos que tenia. Pero era momento de decir adiós a toda esta mierda de vida, porque a pesar que era la única que conocía era la más miserable que podía haber.

-Pollo ¿Lista para conocer tu casa de ensueño?-Dijo Juan

"Pollo" un apodo que odiaba ya que me lo dieron mis primos porque era la más bajita de niños. Juan sabe que lo odio pero a él se lo dejo, porque es el único que lo dice con cariño.

-Nunca se esta preparado para dejar tu vida atrás ¿No?- Dije sin apartar la mirada de aquella casa, que alguna vez cumplió la función de hogar.

-Míralo de este modo Pollo, ahora vivirás en la playa, el sueño de casi cualquier persona- Trato de animarme, creo.

-Si, una playa asquerosa y que en invierno parece mas el polo que otra cosa. Que vida de ensueño- La camioneta arranco. "Ah.. Me hubiera gustado quedarme un poco mas", pensé.

-Siempre el lado positivo. ¿No Anix?- dijo mi tía desde el asiento del conductor

-Ya no rompas las bolas Leo.- Dijo Juan ganándose una mirada asesina de parte de mi tía. Ella es una de las personas mas amable del mundo pero nunca la llames por su nombre.

-Juan discúlpate antes de que la tía nos mate y que lo haga parecer un accidente de transito.- Dije en un reflejo por tratar de que lleguemos vivos a la costa

-Tranquila Pollo, Leo nunca mataría a su propio hijo. ¿O si?- Dijo esta ultima pregunta mientras miraba como su madre soltaba el volante para agarrarlo de los hombros.

-Mira que yo fui la que te pario por casi 3 horas. ¡Como mínimo me llamas "mamá", ¿Entendés pendejo de mierda?!- Tan tranquila la tía como siempre.

Mientras mi primo se disculpaba y mi tía se apiadaba de nuestras jóvenes vidas decidí dormir, con todo este quilombo de fondo pero era mejor que esa casa. por primera vez en unas tres semanas pude relajarme y descansar, creo que dormí hasta que llagamos a la casa de mi tía.No es la gran cosa sinceramente. Una casa de un piso pero bastante amplia. Tiene tres habitaciones, un patio trasero y delantero, un baño, una cosina-comedor y una terraza espectacular. Lo mejor (o peor no se como describirlo) es que esta a unas cuatro cuadras de la costa.

-Arriba Pollo que estas cosas no se van a bajar solas.- Dijo Juan de manera que no me podía enojar con el.

Soy de esas personas que tienen un humor de mierda a la hora de levantarse pero Juan me llama de una manera de que me es imposible enojarme. Nunca conocí a una persona que tuviera los mismos dones que él a la hora de despertarme. Decidí que era hora de levantarme de este incomodo asiento y ayudar. En unas dos horas habíamos bajado todo lo que estaba en esta camioneta y las ordenamos mínimamente, pero por desgracia todavía faltaba que llegaran los otros camiones de mudanza.

-Creo que es hora de que tu primo te muestre el lugar y donde queda tu secundaria- Dijo mi tia con su vos mas tranquila y pasiente.

-Apúrate pollo y abrígate que yo no voy a esperar a lentas como vos- Dijo Juan mientras se dirijía a la puerta delantera.

Decidí tomar un saquito de lana negra y salir a la calle siguiendo a mi primo. No hacia frió pero se podría decir que estaba fresco, lo cual es normal en época de otoño. Las calles estaban empezandoce a vaciar lo cual es normal ya que eran las 9:30 PM, se podría decir que eramos lo únicos dos locos que se les ocurría salir a esta hora de la noche. Pasamos por enfrente de un instituto el cual seria mi secundaria por este ultimo año que me faltaba hacer, se parecía en tamaño a mi anterior escuela pero no era lo mismo.

-Tranquila pollo, creo que a la gente de aquí le caeras bien. Siempre y cuando cambies esta perfecta cara de culo que tenes ahora.- dijo mientras agarraba mi cara y hacia muecas con mis cachetes.

-Si, si lo que digas.- dije mientra  apartaba sus manos de mi rostro. - Y ya que estamos aquí... ¿Me presentas a esta persona que no paras de hablar en los mensajes que mandabas? Digo, quiero ver quien es el estupido que prefiere salir con vos, en ves de cualquier lindura que este en la playa.

- Me partís el corazón pollo, pero esta bien. Creo que estas lista para conocerlo. - dijo mientras se tocaba el pecho como si estuviera ofendido.

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⏰ Last updated: Dec 09, 2018 ⏰

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