Capitulo 4, parte 1

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En un día soleado, alrededor de un árbol de cerezo volaban mariposas, mientras tanto en el colegio Shudo de Hiroshima,

-tomen sus calificaciones –dijo Ume sensei con una sonrisa

-oh, obtuve siete punto nueve, mi hermana me cocinara el curri que tanto me gusta –dijo Kiro emocionado

-tu cuanto sacaste Yuma san,

-diez –dijo Yuma con bastante seriedad

Kiro se quedo perplejo por la calificación perfecta de Yuma

-has respondido todo correctamente en el examen, como es posible,

-intuición, solamente –dijo sonriendo

-chicos mañana tendremos un viaje escolar, a los aguas termales, prepárense ira todo el colegio,

-será divertido no crees Yuma san –pregunto Kiro

-si –respondió él

-dejen en mi escritorio, el trabajo que encargue ayer,

-Yuma san, estoy perdido,

-¿no has hecho la tarea?

-no, pásame los apuntes por favor –lloriqueo Kiro

-por favor, solo por esta vez, te comprare el almuerzo hoy,

-por una semana –dijo yuma aprovechándose de la situación

-bien, por una semana está bien – dijo Kiro con una sonrisa

Yuma saca su cuaderno de su maleta y se lo dio a Kiro, lo apunto todo deprisa y, le devolvió el cuaderno, suena el timbre para la hora del almuerzo,

-oye, Yuma san –dijo Kiro

-¿qué pasa? –pregunto mientras serraba su maleta

-escuche que hoy habrá panqueques, salgamos deprisa

-voy, voy –Kiro y Yuma salen del salón, de camino a la cooperativa, el salón se queda totalmente vacío, eso parecía hasta que abren la puerta muy lento y entra Laurie como una agente secreto pero, al dar unos cuantos pasos se tropieza y cae al suelo, se levanta aturdida y prosigue con la misión, camina hasta el asiento de Yuma, abre la maleta de él, deposito una carta, escucho que alguien se acercaba y rápido salió de el salón dejando la puerta entre abierta, entra Ume sensei al salón camina hasta el escritorio, toma su bolsa, sale del salón y se marcha, Yuma y Kiro se encontraban sentados en las bancas del campo de voleibol, las chicas estaban jugando en ese momento,

-dime porque tengo que venir contigo aquí –dijo Yuma

-poes, porque tenemos una vista esplendida, mira a Konoha san y a las demás chicas se ven hermosas, tienes que admitirlo –mientras babeaba

-son lindas pero –Yuma se queda paralizado, al voltear hacia la ventana del tercer piso, al otro lado del cristal se veía el cabello rubio tal cual color oro al reflejar del sol, su mano en la barbilla, su mirar transparente lleno de dolor y amargura,

-Yuma san, oye Yuma san –dijo Kiro zangoloteando de un lado a otro a Yuma y pasando su mano por enfrente de el rostro de él,

-Shioki san dame un besito –estiro sus labios

-¡Yu, Yuma san! –Kiro tartamudeo y le dio un par de bofetadas a Yuma

-¿porque lo has hecho? –pregunto Yuma sobándose las mejillas

-no volvías en si y, querías besarme

-¿yo quería besarte?

-sí, mientras trataba de que reaccionaras, decías: Shioki san dame un besito –lo remedo a la perfección

-no recuerdo, ¿lo estas inventando?

-he, es enserio, bueno así que ¿te gusta Shioki san? –afirmando con sus cejas, para que le respondiera Yuma,

-am, bueno –tartamudeo, sonrojado

-hola –dijo Konoha, Yuma y Kiro se asustaron al escuchar su voz,

-hola –respondieron los dos al mismo tiempo

-¿de qué hablaban? –pregunto sonriendo

-de shi,

-de los Shimasu –interrumpió Yuma, dándole un piñizco en la espalda a Kiro

-ah sí, yo no los he probado, tuve que practicar con mis compañeras, ire por uno antes de que se acaben, adiós

-adiós –responde Yuma, suelta la espalda de Kiro y Kiro comienza a lloriquear mientras se sobaba la espalda

-Yuma san, juro que la próxima vez te pateare el trasero,

-lo siento, pero ibas a decirle que hablábamos de Shioki san –dijo sonriendo

-que Shioki san te gusta, ¿ahora lo aceptas?

-si, desde antes de ingresar a este colegio, había soñado con ella,

-y ¿Por qué no le has expresado tus sentimientos?

-no es fácil

Suena el timbre para volver a clases, se levantan de las bancas,

-nada mas guarda el secreto, nadie tiene que enterarse al menos por el momento no,

-si, seré todo una tumba, mientras no me piñizques

-sí, no lo volveré a hacer, ya lo dije –reía a carcajadas

-chicos saquen su libro de biología –dijo Ume sensei

Todos los alumnos sacaban el libro de biología pero, Yuma al sacar su libro cae una carta al suelo y Kiro se da cuenta, la coge,

-toma Yuma san –Yuma coge la carta

-se acaba de salir de tu maleta –afirmo

-gracias –desenvolvió la carta y la estiro para leerla, tenia estampadas varias florecillas

-yo quiero verla –se inclinaba en el asiento

-no, espera –dijo Yuma mientras empujaba a Kiro, en un forsejeo y el contrapeso, el asiento rechina, las patas resbalan y kiro cae al suelo con todos los cuadernos, los alumnos comenzaron a reír,

-oye, Kiro san – dijo Ume sensei, con una voz intimidante

-si –contesto nervioso y asustado a la vez

-si no te comportas, te cogeré de tu lindo cabello y te clavare a la pared como ha un retrato

-lo siento-mientras alzaba su asiento y sus cuadernos,

Llego la tarde, Yuma, Kiro, Chieko y Ume sensei estaban en casa de Yuma para celebrar el cumple años de Yui, ya estaba todo preparado solo faltaba que llegara la cumple añera, Yuma pone el ultimo plato de porcelana sobre la mesa, tocan el timbre,

-ya están aquí, todos a sus puestos –dijo Yuma mientras caminaba hacia la puerta, todos se escondieron, Yuma abre la puerta, entra Yui con una venda roja atada a sus ojos, detrás la guiaba Konoha a Yui,

-Konoha chan, no puedo ver nada, a donde estamos –dijo asustada, Konoha le desato la venda y , todos salieron de un salto,

-sorpresa –gritaron todos

-feliz cumpla años Yui san –dijo Yuma sonriendo

-enserio hicieron esto para mí –pregunto con lagrimas en los ojos

-si, por que eres nuestra amiga

Watashi ga ikuru sekaiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora