Nota.
Tn: Tu nombre.
Ta: Tu apellido.
Yuma sólo era contratado por bares pequeños a ofrecer su servicio como cantante y su novia Tn a veces lo acompañaba tocando la guitarra. Ambos tenían talento, pero no eran valorados por un grupo de borrachos.
Tn sabía que Yuma se sentía mal por no ser reconocido así que hizo todo lo que estaba en sus manos para ayudarlo a triunfar en el mundo de la música y lo primero que hizo fue llevarlo a un concurso de canto en el cual fue aceptado y quedó en tercer lugar. A pesar de no haber ganado el primer lugar, una disquera lo contrató y saltó a la fama.
El Mukami cumplió su sueño y al lado de él siempre estuvo Ta que se volvió su manager y su apoyo incondicional.
Todo en su vida marchaba bien incluso habían decidido casarse; sin embargo, no todo era perfecto. Yuma amaba a Tn, pero en el punto más alto de su fama sentía que ella ya no lo satisfacía y buscó el amor con otras mujeres.
Tn no lo sabía hasta que una foto comenzó a rondar por Internet y en los programas de chismes. En la imagen se podía ver a Yuma saliendo de un hotel con una chica muy atractiva.
Aún recordaba el día en que su prometida lo confrontó y le pidió una explicación. Ambos estaban en la sala de la casa lujoso en la que vivían, Tn estaba sentada controlando su llanto y Yuma estaba enfrente de ella observándola fijamente.
-¿Desde cuándo empezaste a engañarme? -preguntó completamente adolorida.
-Ha sido tanto tiempo que ni siquiera puedo recordarlo -el castaño no quería lastimarla más, pero tampoco quería mentirle.
-¿Por qué? -su voz fue casi imperceptible.
-Tn, yo soy una estrella y necesito a mi lado a alguien que triunfe ¿lo entiendes? -ella solo asintió y se fue a la habitación que compartían.
Yuma se sentía mal por eso así que decidió no acostarse esa noche a su lado y prefirió dormir en su estudio de grabación. A la mañana siguiente esperaba que todo lo que había pasado se borrara y que Ta fuera la misma de siempre, pero se llevó una gran sorpresa al encontrar sobre la mesa de la sala su anillo de compromiso.
-¿Tn? -la llamó, pero no recibió respuesta. -¡Esto no es gracioso! -gritó mientras comenzaba a buscarla por todas las habitaciones de la casa.
Pero no había rastro suyo incluso su ropa ya no estaba guardada en los grandes armarios de la habitación. Antes de llamar a la policía fue a la entrada de la casa donde estaba uno de sus trabajadores de seguridad.
-Buenos días -saludó al ver al Mukami. -Se ve muy alterado ¿pasó algo?
-¿Ayer trabajaste hasta la noche? -el guardia asintió con la cabeza. -¿Viste salir a Tn de la casa? -el hombre se quedó pensando.
-Sí, recuerdo que la señorita salió en la madrugada a pedirme que le abriera las puertas de la casa porque iba a salir -respondió después de largos minutos en silencio.
-¿Te dijo a dónde iba? -él negó con la cabeza.
-No lo hizo y supongo que tenía prisa por irse por la velocidad a la que manejaba.
-Gracias -Yuma regresó a su hogar y lo primero que hizo fue buscar el teléfono y marca el número de Tn, pero ella nunca contestó.
Estaba tan desesperado que recurrió a la policía que se encargó de buscarla. No hubo noticias suyas por varios meses hasta que hablaron a la casa de Yuma diciendo que habían encontrado el carro que les había descrito.
El músico con eso se dio cuenta de que Tn había desaparecido para siempre de su vida.-¿Me estás escuchando? -la voz de Reiji lo sacó de sus pensamientos.
-No lo estoy haciendo -respondió el castaño apretando sus sienes.
-Deberías hacerlo porque en este momento estamos hablando de trabajo.
-Sólo repite lo que dijiste -comentó molesto el castaño, no estaba para reclamos.
-Tienes que sacar un disco, a eso te dedicas ¿no? -el músico prefirió no decir nada. -Y tienes que ponerte a trabajar desde ya porque tú vas a escribir las letras -al oír eso el castaño se sorprendió.
-Para eso existen los compositores ¿no?
-El director te está castigando -respondió el azabache. -Y será mejor que te apresures con eso. Vendré a verte mañana para ver cuánto has avanzado -después de eso el hombre se fue.
Yuma sólo dejó escapar un suspiro, a pesar de que habían pasado cuatro años seguía buscando a Tn y ese nuevo disco sólo le quitaría tiempo. Decidió no quejarse más y fue a su estudio para comenzar a trabajar.
Estuvo horas encerrando pensando en qué escribir, pero nada se le ocurría y lo poco que pasaba por su mente era relacionado a Tn. Pasado varios minutos pensó que tal vez podría usar la música para buscarla.
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One-shots Diabolik lovers (PersonajexLector)
Hayran KurguSerie de One-shots de Diabolik lovers