La chica del café

Mismo lugar, diferente chica.

Nuevamente me encontraba caminando por la acera, era un día normal y simple, otro día cotidiano de mi vida, y de repente estaba ella, en ese lugar la misma cafetería de siempre y con esa maldita sonrisa encantadora y esos ojos verdes, me encantaba cada vez que la veía sonreír de esa forma, lo único malo era que siempre se encontraba acompañada, siempre de alguien diferente de una chica nueva al menos cada dos días y eso para mí era extraño, me preguntaba si algún día yo estaría sentada con él en ese mismo lugar y con la misma bebida, un café expreso por lo que podía observar.

No podía dejar de pensar como sería salir con ella, acaso sería igual deperfecto como lo imagino, una cita las dos juntos, probar sus labios quizá esoo tan solo poder entablar una conversación con ella, no podía sacar esa idea demi mente.

Iba tan metida en mis pensamientos que no había notado que ya me encontraba justo en la entrada de mi trabajo, no podía quejarme me gustaba lo que hacía pero necesitaba algo más no sé qué era pero lo quería y no sabía cómo obtenerlo, quizá era otro puesto digo el mío no estaba tan mal y era un puesto importante después de todo, cerrar los tratos con los clientes no era nada fácil a veces y pocos tenían esa capacidad antes de llegar esto recuerdo lo que costo y cuantas personas lo aspiraban, lo logré y fue satisfactorio sentía poder y me gustaba quizá ya no es tal genial como lo imaginaba

- Hey Camila llegando, que tal tu mañana

- Buen día Kevin bastante bien supongo y la tuya que tal (se acerca a saludarme de beso)

- Lo normal ya sabes, estaba pensando que quizá cuando salgamos podríamos ir a cenar juntos o por un café – Kevin era el chico que intentaba constantemente invitarme a salir, siempre decía que no y siempre volvía a insistir no sabía cómo alejarlo –.

- Realmente sería bueno pero no puedo, tengo que llevar a pris al veterinario, quizá sea en otra ocasión, te veo más Kevin iré a la oficina. – Y me fui de ahí metiéndole en varias ocasiones ya le había indicado que realmente no quería nada pero no podía entenderlo, llegando a la oficina afuera siempre estaba Alma tan puntual como siempre, era una buena secretaría la mejor que he tenido, nunca nadie me había soportado tanto soy exigente a un gran nivel, así que en teoría agradezco que permanezca conmigo –.

- Buenos días Alma, algún recordatorio para hoy

- El día de hoy tiene agendada una cita a las 12 PM con la señorita Jauregui quien es un nuevo cliente y busca publicidad innovadora y garantizada para su empresa.

- De acuerdo a las 12 PM la anuncias y te indicaré para que pase a mi oficina, algún otro pendiente por hoy.

- Por la tarde tiene una cita con su padre y su hermano.

- Cancela diles que no podré asistir, tengo cosas por hacer, y Alma necesito que mandes a alguien por mi ropa a la tintorería la necesito a las 2 PM en el departamento, y acomodada en el lugar de siempre, gracias, cualquier alguna otra cosa más te aviso, no quiero molestias por favor.

- De acuerdo señorita Camila