another lovesick afternoon | larry | girl direction.

única parte.

Esta obra no es de mi propiedad. Tampoco pude pedirle permiso a la escritora porque la subió forma anónima a la plataforma AO3. De todos modos, todos los créditos van hacia ella. 

El link de la obra original está en la descripción y lo dejaré en un comentario también.

Disfruten la lectura :).

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Llueve. Harry observa cómo los árboles danzan gracias al fresco aire otoñal, las hojas secas dan embriagadoras piruetas sobre el pavimento, el cielo está cubierto por nubes espesas y melancólicas que se mueven hacia el horizonte rápidamente, como si estuvieran llegando tarde a algún lado.

El mediodía no parece muy lejano, pero la sombra del crepúsculo ya quiere empezar a surgir afuera. Harry resopla suavemente y remueve los cabellos que cubren sus ojos, volviendo a enfocarse en su computadora portátil, posando el brazo en el respaldo de su silla. Bueno, no su silla. Pero por la cantidad de tiempo que pasa metida allí, bien podría ser de ella.

Le encantaba la vibra de 'Moon Brew Cafe' incluso antes de haber puesto un pie adentro. Cada vez que pasaba se sentía atraída por la calidez que parecía emanar aquel lugar: no era elegante y moderno como el resto de los cafés de la ciudad. Era único y hogareño, las mesas de madera no coincidían y las sillas cómodas estaban gastadas. Y cuando finalmente tuvo tiempo de ingresar, luego de meses de apresurarse para llegar a clase, Harry estaba aún más enamorada.

El zumbido de los bulliciosos adultos desesperados por la cafeína sirve como un ruido blanco perfecto para cuando necesita concentrarse en sus entregas. Estudiar en su piso siempre le ha sido imposible; simplemente hay demasiadas distracciones, muchas otras cosas que hacer. En casa, Harry siempre se encuentra mirando televisión, pintándose las uñas, tomando una siesta e incluso limpiando para evitar hacer trabajar. Pero 'Moon Brew' ahora es su refugio. Hay algo mágico en el lugar: es lo suficientemente acogedor como para sentirse cómodo, pero no lo suficiente como para volverse perezosa. 

Aunque, eso no quiere decir que no haya distracciones.

"¿Relleno la taza, amor?"

Harry levanta la mirada por la pregunta, sus cejas se alzan y los dientes se hunden en su labio inferior. Es deslumbrada por la mayor distracción de todas: Louis.

Louis ha estado trabajando allí desde el primer momento en el que Harry se había detenido en el café. A pesar de la hora ridículamente temprana, el calor de su sonrisa había sido brillante y electrizante. Harry ordenó el moca que había estado mirando en el menú, pero de repente descubrió que ya no necesitaba cafeína. Esa sonrisa había sido lo suficientemente energizante como para hacer que pasara el día.

"Eres tan... lesbiana", Nick la había fastidiado cuando le había contado sobre la primera vez que la vio. "Una chica bonita te sonríe, y de repente estás enamorada"

Y Nick realmente no tenía nada para decir. Porque Harry recuerda con una poética vivida las memorias sobre el chico que le había prestado un lápiz en su clase de Introducción a la Estadística durante todo un semestre. Entonces, ¿qué tenía de malo si Harry pensaba en qué flores tendrían para su boda (hortensias blancas y eucaliptos de oro y plata)? 

Tal vez la cantidad de tiempo que ella se la pasaba imaginando tocando a Louis, probándola, sólo era parte del juego del papel lésbico hambriento en el que sus amigos la pusieron y les encantaba bromear. No hay nada de malo en soñar despierta. Había pasado muchos de sus años de la adolescencia sintiéndose asquerosa y culpable por la atracción que sentía hacia las mujeres, pero finalmente lo había superado y se negaba a acarrear esa mierda consigo, incluso si todavía le costaba tener una conversación informal con una chica bonita.