22· Lado oscuro

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 Narra ____


Mientras esperaba el ascensor para poder ir a descansar a mi habitación, muchas cosas habían pasado hoy, solo quería dormir.


A pesar de todo me reconfortaba el hecho de que el que yo creía que era un idiota esta de nuestro lado así que puedo descansar mas tranquila, llegue a mi habitación y las chicas estaba hipnotizadas viendo televisión, cosas que me causo gracia ya que ni hablar coreano saben.


-Y ustedes que hacen?-dije tirándome en la cama observándolas con cierta diversión, ellas me miraron  sonrieron.

-Solo tratamos de adivinar que sera lo que dirán en la televisión, ya sabes para pasar el rato-reí-y tu? te divertiste en el bar?-pregunto Majo, de inmediato recordé lo que me había pasado, aun creía que era una locura.

-Bueno, normal, me encontré con el tipo que mi madre dijo que viera-dije fingiendo desinterés, sus ojos iban a saltar de sus lugares de la impresión, ella se acomodaron frente a mi para darme su completa atención.

-Como? que te dijo? lo mataste?-exagero Mía.

-No, resulta que el esta en una situación igual o peor que la de mi hermana y yo-dije, ellas al parecer no entendieron-Su padre también es una escoria que lo obliga a casarse por extorsión-ella así entendieron, vaya chicas.

-Oh es decir que esta de nuestro lado?-Asentí-Y ahora cual es el plan?-pensé un poco.

-De la unión nace la fuerza no?-ellas rieron-que? es en serio el nos ayudara y nosotras a el, simple, desde ahora comenzara nuestra pequeña aventura-finalice.

-Por cierto antes de que se me vaya la idea, es lindo?-soltó Majo, oh claro había olvidado su enfermiza obsesión con los chinos.

-Pues para ser de aquí lo es-me sincere.

-Claro, como el no es Harry Styles-Bromeo Mía, yo la mire mal.

-El problema con Harry Styles es que, dejando de lado su forma egocéntrica, egoísta y extraña de ser, el me odia-Explique, en teoría me odiaba aunque no a mi misma pero si a una parte de mi.-El maldito aun así se atreve a decirme que soy suya BAH!-Mi problema ya tenia nombre, maldito Harry.

-Retrocede un poco, dijo que tu eras suya?-pregunto Majo, asentí-y a ti no te gusta el-no respondí-pues ahí esta tu respuesta-se recostó en mis piernas-Quizás lo que odias es el hecho de que el algún día se enterara de la verdad, y vera que tu eres el chico que el odia con su alma-la verdad creo que tenia razón, y me sorprendía eso, pocas veces ella tenia razón.

-Tu sabiduría me impacta-exagero Mía nuevamente, yo reí.

-Oh no lo se, me guste el o no yo creo que seria totalmente imposible, el me odia y se supone que yo debería odiarlo a el pero, no entiendo porque no lo hago-suspire.-Iré a dormir-me levante y busque en mis cosas mi pijama y fui directo al baño a cambiarme, no quería pensar en algo que se que me llevaría al borde del colapso.





******




Una semana después...




Una semana paso de completa locura con mis amigas en Corea, claro era un reto salir con ellas a las calles, aunque me preguntaba como lograban conocer y saludar y tomarse fotos con la mayoría de las persona que se encontraban, si no habían venido nunca a este lugar.


Pero ya pasada esa semana tuve que olvidarme de cualquier tipo de diversión, ya que la gran gira comenzaba el día de mañana y debía estar lista, después de la carrera aquí en Corea iríamos a Italia, es decir visitaría el mundo entero.


Caminaba por las calles de Corea con Charlie quien como siempre un día antes de una importante carrera me invitaba un helado para calmar mis ansias, lo cual desde que tenia 17 años se había vuelto una tradición.

-Ya estas lista mentalmente para mañana?-pregunto, yo asentí mientras saboreaba mi helado.

-Siempre lo estoy, oye hablando de cosas importantes, salí un par de veces con ese sujeto que esta en la misma situación que mi hermana y yo-el asintió para que siguiera.-Ideamos un plan, para poder destruir a los viejos-Charlie me observo no muy convencido.

-No creo que sea buena idea-dijo, yo le mire.

-A que te refieres?-dije, el dudo un poco.

-Es decir, tu madre no es cualquier persona y tu, solo eres su hija-Auch eso fue a dar justo a mi orgullo.

-Cuando me inicie en el motociclismo también dijiste que era mala idea y mírame-alce un poco la voz. Charlie podía se muy aguado.

-Aun no me convence eso pero esto es diferente a tu antojo de andar en moto-me detuve y lo observe con detenimiento, el imito mi acción.

-Antojo?-dije un poco indignada.-Acaso me he matado estos años por solo un antojo?-ahora si estaba enojada, podía decir que el sonaba como mi madre.

-No me mal entiendas, te apoyo porque de verdad te quiero, pero aun así no puedo evitar que te lastimes o algo así, eres una chica, no un chico, por algo es un deporte masculino-dijo, lo mire aun mas enojada, después de tanto tiempo viene con esta mierda?.

-Ya veo-dije riendo irónicamente-Y que quieres que haga?-pregunte al borde-que siga aguantando a la mierda de mi madre?-me puse en frente de el mirándolo a los ojos-Se supone que debo adaptarme a esta sociedad?-Reclame aun mas enojada-Te aseguro que mientras yo siga respirando y este consciente de mis actos no dejare de hacer lo que a mi me parezca, para que tu perfecta sociedad deje de ser -Le advertí, no me detendría, en mis planes no estaba el simple hecho de rendirme así como así, y no lo haría.


Tire lo que quedaba de helado en el bote de basura mas cercano  fui directo al hotel ignorando los llamados de Charlie, maldito.


Quizás estaba siendo dura con el, quizás estaba en un punto sensible, pero la verdad odiaba que me dijeran que por ser chica no podía ser capaz de hacer las cosas porque podía herirme, o estupideces así.


Vaya mierda.


Hace unos años estaba en una relación sumamente toxica donde el tipo creía que por yo ser chica y cosas así, yo debía vivir bajo su sombra, pretendiendo que yo era una inútil mas del montón que necesitaba un hombre para poder sobrevivir.


Hasta que llegue al punto donde decidí mandar todo al demonio.


Fue cuando yo misma reconstruí mi autoestima, patee el trasero del idiota ese y entre en este mundo, para mi mala suerte no permitirían que una niña de 17 años estuviera en todo esto, y ahí nació Jack, de alguna manera gracias a Jack podía hacer de todo, sin importarme una mierda la sociedad, en algún momento les demostraría que no por ser chica debo ir un paso a la vez lentamente.


Soy una chica, y por eso soy mejor que todos.

El Motociclista sin Rostro (H.S) ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora