El sentimiento que no desaparece

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¿Escuchas mi voz? claro que no simplemente me utilizaste hasta cansarte, mi desesperación por salir de ese estúpido juego formado por ti era tu mayor entretenimiento.

Heriste a mucha gente, incluyendo a mis amigos: Shiki, Beat, Rhyme e incluso a mí, el recuerdo de tu traición me persigue una y otra vez pero por más que lo intente no puedo odiarte.

Aunque tampoco puedo perdonarte, al menos aún siento que confío en ti y tal vez solo tal vez quiero volver a verte.

Era el tercer suspiro que Neku dejaba salir esa noche, no podía sacar a ese sujeto de su cabeza, simplemente se colocó sus audífonos y se lanzó a su cama, cualquier persona con "sentido común" le diría que intentar dormir con auriculares es una locura que le podría causar daño pero eso no le importaba en lo más mínimo.

La música le relajaba, de ella obtenía paz y tranquilidad, algo que realmente apreciaba luego de tantos eventos desesperantes por los que ha tenido que pasar.

Al paso de los minutos logró conciliar el sueño, el sudor surcaba por su frente mientras se removía inquieto entre las sabanas, sentía un dolor inmenso recorriendo todo su cuerpo, en especial dentro de su pecho y gracias a eso despertó abruptamente dirigiendo su mano hasta la zona afectada.

Sus lágrimas amenazaban con brotar, sin embargo mostró resistencia con tal de no parecer vulnerable, no era débil pudo resistir en el juego del compositor esto es pasajero, trataba de convencerse a si mismo.

Despertó del trance en el que se encontraba y se sobresaltó al notar que no se encontraba en su habitación, estaba parado en el cruce de Shibuya.

— Que rayos... ¡¿porqué no estoy en mi habitación?!

Las personas pasaron de él, como si no existiera y otros mantenían su vista en sus celulares mientras corrían de un lugar a otro.

No tenía ni la menor idea del porque no estaba en su habitación, pero no se iba a quedar a pensarlo. Si esto era un sueño podría regresar a su casa, así que decidido retomó su camino, no obstante solo encontró un sendero cubierto de árboles y vegetación en donde se supone que debería estar su hogar.

— ¿Me habré equivocado de camino? —Neku observó hacía atrás y el camino era justo como lo recordaba

Su cabeza comenzaba a dar vueltas, no entendía que rayos ocurría primero estaba en su habitación, luego apareció en medio de la calle y ahora resulta que su casa se había esfumado por arte de magia.

Se quedo observando el lugar sin saber que hacer, eran altas horas de la noche y no tenía manera de acudir a sus amigos, tendría que buscar una solución por su cuenta.

El compositor o como algunos le llamaban "Joshua" se encontraba revisando algunos reportes que había recibido cuando algo o más bien alguien llamo su atención.

En los reportes que recibía se discutían distintos temas que conciernen a Shibuya, uno de esos era la población y extrañamente en este habían anotado el nombre de Sakuraba Neku.

Sus ojos se abrieron de par en par, el no había elegido nuevamente a Neku para participar en el juego de los Reapers, no había razón para que el estuviera en el SM.

Se dispuso a rastrear el paradero de Neku, pudo sentir que este estaba confuso y hasta podría decir que asustado, realmente esperaba recibir ayuda para escapar del embrollo en el que se había metido.

Debía buscarlo no podía dejarlo a su suerte, con un suspiro se levantó de su asiento y desapareció en un abrir y cerrar de ojos.

Neku aún reflexionando que haría logró escuchar el grito de una chica, cosa que lo alarmó. Decidió ir a ver que ocurría, el grito de la chica le había guiado a un callejón y al llegar solo pudo ver como la chica desaparecía junto con un chico que se encontraba mal herido en el suelo.

En ese momento cayó en cuenta, esto no era un sueño y si estaba presenciando el juego ¿pero cómo era eso posible?

De la nada emergió una cantidad considerable de Noises que terminaron por rodearlo y su mirada se quedó en blanco. "Genial" pensó irónicamente para comenzar a correr de aquellos seres que se encontraban persiguiéndolo.

Siguió corriendo sin parar esperando perderlos de vista, pero eventualmente el aire le comenzó a hacer falta, así que a regañadientes tuvo que detenerse para recuperar el aliento.

Colocó una mano en la pared mientras intentaba normalizar su respiración y al elevar su mirada notó que su mano estaba apoyada en su graffiti favorito de su ídolo CAT.

Una leve sonrisa se plasmó en su rostro, de alguna manera siempre terminaba en este lugar.

Sintió unos pasos acercarse por lo que se giró para mirar detrás suyo y como pensaba los Noises se las habían ingeniado para arrinconarlo, no tenía un compañero y ni siquiera estaba seguro si realmente estaba participando en el juego o solo era un simple espectador.

Un Noise comenzaba a acercarse a él y por acto de reflejo cerró sus ojos esperando a ser atacado, aunque para su sorpresa eso nunca sucedió, solo sintió como alguien lo abrazaba disminuyendo el espacio entre ellos como si nunca hubiese existido tal cosa.

Al sentir tal contacto abrió sus ojos y claro que pensaba apartar a la persona que se atrevía a tomarse tantas confianzas, pero al ver de quién se trataba se quedó totalmente paralizado.

— Mmh ¿no te alegras de verme querido?

— ¿Jo-Joshua...?

— Lo siento, descansa un poco Neku

Iba a separarse de él dispuesto a exigirle explicaciones, sin embargo sus párpados comenzaron a pesar y un sueño indescriptible se apodero de el antes de poder hacer algo para impedirlo y terminó perdiendo la consciencia en brazos de Joshua.

El compositor lo tomó en brazos y con una gélida mirada hizo que los Noises retrocedieran temerosos de lo que este fuese capaz de hacerles, así que huyeron sabiendo que sus vidas pendían de un fino hilo que estaba a punto de ser cortado.

Devolvió su mirada a Neku, anhelaba no tener que hacer lo que pensaba, pero era necesario, debía desaparecer de la vida de Neku por su bien.

Posicionó una mano en la frente del peli naranja dispuesto a desaparecer todos los recuerdos que lo involucrará con el, sus cargas se irían y volvería a disfrutar de su vida común y corriente sin la necesidad de estar en peligro.

— Creo que deberías considerar tus opciones Josh -dijo Hanekoma Sanae con una sonrisa de medio lado.

— Sanae no te entrometas en esto - contestó cortante ante la ligera diversión que parecía asomarse por el tono del mayor.

— Sabes que podrías necesitarlo, además el chico no estará contento si descubre lo que hiciste

— Es por su bien, el lo entenderá

Con un suspiro y sin borrar su sonrisa Hanekoma dijo lo siguiente

— Al menos cuando desaparezcas de su vida ten la decencia de observar por última vez su rostro, puede que te lleves una sorpresa cuando lo veas

Al decir esto simplemente desapareció dejándolos a solas.

Le intrigó lo que dijo el productor y así lo hizo observó el rostro de Neku y como si hubiese colocado su mano dentro de una intensa llamarada, apartó su mano sintiéndose irremediablemente culpable y sin impedirlo permitió que una pequeña risa escapará de sus labios mientras sus ojos brillaban de forma melancólica, añorando algo que no veía posible, más sin duda alguna quería creer que existía una mínima oportunidad.

— Neku si tienes una expresión como esa no puedo hacerte esto...

Neku estaba sonriendo, levemente pero lo hacía. Era una rareza verlo sonreír y que el pudiese ser la causa de tal expresión en su elegido evitaba el querer privarle de su memoria nuevamente.

— Tendre que buscar una manera en la cuál puedas sonreír de esta misma forma, pasé lo que pasé todo será por tu bien, puedes descansar tranquilo — susurró llevándose a Neku entre sus brazos, sin pensar en las posibles consecuencias que esto traería después.

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