Capítulo 14 "Cuederno de deseos"

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- Entonces en el verano estaré en Buenos aires, haremos un concierto y estaremos en promos para una línea de ropa y celulares- Jimin me contaba emocionado- así que cuando estés en Argentina podremos vernos, ¿Qué opinas?

- Genial, me encanta- respondí seca y el me miró con cara de pocos amigos.

No sé ni cómo tengo el descaro de mirarlo a los ojos después de todo lo que hice para estar con el. Tampoco sé cómo hice para dormir ayer con toda la culpa que me carcomía por dentro.

- ¿Pasa algo? Si algo va mal entre nosotros dímelo, no hay problema- hablaba como una persona madura de su edad- los problemas se solucionan hablando, Ann enserio no quiero que estemos mal.

Soy una niña

- No, solo estoy cansada- me la pasaba descansando, así que estaba mintiendo- necesito relajarme

- ¿Mi chica está cansada?- me preguntaba haciendo aegyo

Esta muerto

- No digas "mi" porque la próxima te castro ¿Si?- me había enojado bastante su comentario, no era mi culpa ser criada en libertad.

- Está bien, te entiendo- y se comenzó a reír

Espero que cuando le cuenta toda la estupidez que hice se lo tome con tal calma.

- ¿Así que está estresada la chica más hermosa que ha visto mis ojos?- lo volvió a intentar

- Si algo así- dije mientras me acercaba a él y me sentaba en su regazo- te quiero- creo que era la primera vez que yo se lo decía.

- Yo también- depósito un beso en mi frente- pero hay tanto lugar en este maldito sillón ¿Y te tienes que sentar encima mío?

Jimin y sus hormonas alteradas me ponían entre la espada y la pared.

- Me tienes harta Park- dije girando los ojos

- Entonces siéntate en el sillón- por último hizo una de sus bellas sonrisas seguido de dar golpecitos en la parte vacía del sillón.

- ¡Que molesto eres!- puse mis manos en su cuello- bésame

- ¿Que?

- Que me beses- me estaba enojando, hacia dos días que no me daba un maldito beso.

Ann, maldita sea
No te rebajes
Que te pasa

- Te estás volviendo atrevida, me gusta- se acercó a mí para besarme tiernamente.

Claramente serían unos de los últimos besos que quizás recibiría de parte de Jimin.
Me iba a dejar y lo sabía.

- Mañana ven a casa- Jimin no me dejaba hablar depositaba besos cortos por cada palabra que decía- te tengo que mostrar algo.

- Está bien, ¿Traigo algo para comer?- pregunto con total inocencia mientras lo miraba raro- Es que tu madre está a dieta y las cosas que hay en la cocina son demasiado saludables.

Eso me alegraba, después de mucho tiempo estaba tomándose a la ligera el tema de cuidarse y ser extremadamente delgado.

- Trae lo que quieras, por mí no hay problema

- Estoy en proceso de ganar músculo- me gire a verlo para fulminarlo con la mirada.

- ¡Jimin!

- Pero esta vez saludablemente y sin obsesiones- dijo tirando de mi brazo haciendo que quede encima suyo muy cerca de sus labios- cambiando de tema ¿En que estábamos?- este chico me mataba en todos los sentidos.

A ciencia cierta tenía que buscar las palabras más adecuadas para decirle toda la verdad y no tenía mucho tiempo.

- Ann hoy saldrás con tu madre, me dijo que te presentará a alguien- Susy me avisaba mientras dejaba la ropa limpia en mi cama para que luego la acomodara- también dijo que debes estar elegante, irán a un restaurante lujoso o algo así.

- Me llega a presentar a un supuesto novio suyo y me tiró de un puente- dije riéndome

- No exageres, tiene que pasar la página, la vida sigue- poniendo cara seria- así que te recomiendo que vayas a tirarte de un puente.

- Bien, ¿En dónde hay uno?

- A unos 2 kilómetros saliendo de la ciudad

- Mejor voy al restaurante

Nos encontrábamos en el restaurante y definitivamente si, estaba saliendo con un hombre, es su compañero de trabajo y era bastante agraciado.
Me contó que hace 2 años vivía en Corea, el nació en México, Guadalajara y por razones de trabajo vivía aquí.
Moreno, castaño y alto, mi madre parece no saber perder el tiempo.

- ¿Y hace cuánto están saliendo?- pregunte

Si, estaba haciendo un interrogatorio, no todo en esta vida es fácil.

- Específicamente un mes- respondió Victor

- ¿Alguna otra duda hija?- mi madre tenía cara de querer matarme.

- Por el momento no, voy al baño, permiso- me levanté y los dejé solos

Iba caminando mientras sentí unos pasos detrás mío y estaba nerviosa, iba a gritar cuando un sujeto me tomo del brazo y me giro hacia el.

El imbécil de mi novio.

- ¿Se puede saber que demonios te pasa?- dije exaltada casi al punto de gritar

- Sh, estamos en una junta con otros artistas y no quería que se dieran cuenta de esto- contesto Jimin justificando mi casi muerte- te quería ver, estás hermosa ¿Qué haces aquí?

- Mi madre me presento a su novio

- Que interesante es tu vida- dijo vacilando- en veinte minutos termino, te espero en la puerta trasera que lleva al contenedor de basura.

- Que romántico eres Park

- Si entras al baño conmigo te demuestro que puedo ser más romántico- subió una ceja suya en forma coqueta

- Eres un pervertido

- Tu lo eres, deja de pensar mal

Mi padre siempre dijo:
"Cuando te guste alguien lo único que harás serán solo estupideces"

Y en ese momento sin pensarlo dos veces entré al baño.

- Te necesito más que nunca- comenzó a besarme, con una mano a mi cintura y otra a duras penas cerrando la puerta- en dos días me voy a Busan a visitar a mis padres y mi hermano, luego vuelvo a Seúl pero para las prácticas y luego tengo el tour- corto el beso para darme esa mala noticia.

Amo fracasar

- Debes estar contento, estarás con tu familia

- Si, realmente lo estoy, pero no podré estar contigo, bueno al menos no mucho tiempo.

- De igual manera te seguiré queriendo.

Se acerca a mí para volver a besarme, mientras que siento mi bolso de por medio y con un bulto, era el maldito cuaderno.

- A fuera te tengo que mostrar algo- dije cortando el momento.

Ahora o nunca

- ¿Que es?

- Es algo que está en mi bolso, nos vemos en unos minutos.

Por un audio subliminal- Park JiminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora