Just some HP one shots (sin editar)

The Kids (D.M.) 3

-Primera semana-

NinaPOV:

Primer día con los niños, y con Malfoy por desgracia. Nada más encontrarnos ya estábamos discutiendo.

Habíamos llegado pronto al gran comedor para que nos vieran los menos alumnos posibles y, con suerte, casi desconocidos; y estábamos discutiendo por en cual mesa nos sentaríamos. Esto era demasiado patético. 

-Cede un poco Malfoy. Ayer cenamos en la mesa de Slytherin. Lo justo es ir hoy a Ravenclaw, o al menos una vez.- Insistí.

-Y yo te repito que no voy a ir a la mesa donde la mayoría son traidores de sangre, y menos donde se sienta una asquerosa sangre sucia como tú, que ni siquiera debería estar aquí.- Su expresión daba miedo, y su tono era fuerte. Pero a mí no me intimidaba. Cuando terminó de hablar le di una bofetada y lo acerque a mi de la corbata.

-Puedes meterte conmigo, con mi forma de ser de pensar y hasta de pestañear si te apetece. Pero te metes con mi casa, mi familia o mis orígenes, y las pagarás caro Malfoy. Muy caro.

Al principio parece que se sorprendió un poco por mi reacción, pero se mantuvo serio y firme.

Le solté bruscamente y me acerqué a la mesa de Slytherin donde estaban los niños jugando entre ellos.

-Niños.- Les llamé. -Me tengo que ir pero luego os veré. Portaos bien y hacedle caso a Draco hasta que vuelva.- Cogí una fruta de la mesa y tenía la intención de irme. Pero los mellizos me detuvieron. 

-Mamá, ¿Porque lloras?

Su pregunta me sorprendió. Me sequé las mejillas con las manos para comprobarlo y, efectivamente, estaban húmedas. Me sequé rápidamente y pensé en que decirle, pero Draco llegó antes de que yo hablara.

-¿Quién está llorando?- Draco apareció detrás de mí. Con suerte no me habrá visto. Es lo último que necesito ahora mismo.

-No pasa nada cariño. Imagino que mamá de tu tiempo os lo habrá dicho.- Le dije a Eider que me preguntó. Agarré mi fruta, me despedí de los niños y salí del gran comedor lo más rápido que pude.

Deambulé por los pasillos un rato mientras devoraba bruscamente la manzana que había cogido de la mesa del desayuno. Necesitaba relajarme para no volver al gran comedor y matar a Draco. 

Al final acabé llegando a la sala de los menesteres. Y no me venía nada mal de hecho. Necesitaba desahogarme, y ese era el lugar perfecto. Entré y pasé casi toda la mañana allí entrenando y ensayando un poco. Me ayuda a desahogarme y cambiar mi humor para bien. Cosa que realmente necesitaba.

Cuando llegó casi la hora de comer salí y fui a ducharme y cambiarme rápidamente para llegar a tiempo al gran comedor. Había hecho casi mas ejercicio que en un entrenamiento intensivo de Quidditch.

Iré a comer pronto y les explicaré todo a los chicos. Así además evitare ver a Draco. No creo que sea tan tonto como para ir con los niños cuando todo el mundo esté en el gran comedor.

NarratorPOV: 

Draco se sentó junto a los niños para desayunar y les preguntó que pasaba, y si sabían por que Nina se había ido casi corriendo.