Cristal Azul

Lluvia

Desde pequeña he sido tratada como algo fuera de lo normal , mis padres se separaron cuando yo tenia tan solo cuatro años según mi madre por que yo era especial . Desde ese momento hasta ahora toda mi vida llevo haciendo la misma rutina día tras día sin descanso alguno .

Me levanto todas las mañanas con el tono de rudeza de mi estricta madre . Su fuerte voz hace temblar la habitación entera .

- Es hora de levantarse - desde el otro lado de la puerta espera impasible mi respuesta que no tarda en llegar . un " ya voy mama" hace que vuelva a su labor . Tener todo perfecto .

El agua caliente recorre mi cuerpo empapándolo todo incluido mi pelo . La mañana empieza como siempre , un desayuno basado en fruta y cereal junto a mi madre, Ella encabezando la mesa y yo a su lado izquierdo .

No pasa mucho cuando es hora de empezar las clases . El señor Edwin es alguien de mucho prestigio - según mi madre - que todos los días viene a casa a infundir todo su conocimiento sobre mi .

Las conversaciones con el cada día se volvían mas pesadas . según el no tenia que mostrar interés mas haya de las puertas de casa, cosa que me parecía irritante . No sabia nada , solo veía correr el tiempo desde mi ventana , en las calles de día veía a los niños jugando en las pequeñas aceras con sus mochilas a la espalda , los jóvenes enamorados agarrados de la mano paseando tranquilamente, me hacen recordar esas novelas que el señor Edwin me añadía a la biblioteca de vez en cuando . Esas novelas son el único conducto de escape que tengo de mi triste realidad .Ç

Hacen que mis latidos aumente rápidamente y que me emocione por palabras que han salido de personajes que seguramente no exista . El primer beso es tan emocionante y algo tan lejos de mis posibilidades que resulta tan tentador y a la vez una simple ilusión que a mi pesar no se hará realidad . Pasan las horas y la voz del señor Edwin me pone los pelos de punta . Esta mañana su comportamiento sale de lo normal . su pelo que siempre esta impecablemente ordenado y hoy esta pringado de gomina , su comportamiento delante de mi madre fue el de siempre , algo intimidado pero no fuera de lo normal pero ahora las palabras que salen de su boca me parece irracional . Su mirada no se despega ni por un segundo de la mía y eso hace que rápidamente baje la mia .

-Anabelle ¿estas escuchándome ? No puedes quedarte perdida en tus pensamientos . volvamos al tema inicial .

Las horas pasaban y las clases del señor Edwin se hacían largas y pesadas . No era de esperar que en el ultimo momento apareciera mi estricta madre enfundada en un vestido hecho a medida completamente blanco a excepción de sus tacones que eran grises .

-Señor Larson , un encanto siempre verlo en mi casa - dice mi madre con una sonrisa que la mayoría calificaría como bonita para mi ,en cambio , me parece escalofriante , tan fingida que a veces al pensarlo me daba miedo .

Los dos adultos inician una charla que para ellos parece entretenida , a mi parecer es la misma platica que tienen delante de mi todos los días, nunca sabré de que tanto hablan en el despacho de mi madre pasan horas y horas . Mi atención directamente se dirige a los impresionantes deberes que tengo que hacer y seguro me llevara toda la tarde .

Pasan las horas y como de costumbre mi madre y el señor Edwin están en el despacho . El gran ventanal que hay a mi derecha me llama la atención mas bien si no lo que hay de tras de ella .

Me levanto con sigilo y me dirijo al cuyo lugar ,donde de cielo cae una especie de lluvia negra .

Quedo atónita por la tenebrosa imagen que miro ante mi . Rápidamente empiezo a pensar que podría ser pero nada llega a mi mente . Salgo de la sala de estudio rápidamente hacia la azotea . En el momento que empiezo a subir las escaleras los pasos apresurados de mi madre y el señor Edwin retumban el suelo. se dirigen a la sala de estudio .

Con rapidez subo todas las escaleras llegando a la azotea ,donde mi madre lo tiene lleno de flores de colores llamativos que en este momento no se puede apreciar por el liquido espeso que las cubre . tapada de la lluvia por el pequeño tejado que hay en la entrada estiro mi mano hasta tocar la extraña lluvia . lo primero que me llama la atención es que es muy espesa y quema , rápidamente alejo mi mano tocándola para suavizar el dolor .

Unas figuras vestidas de negro cayeron del cielo aterrizando en mi ya cubierta de negro terraza . Esas figuras que ahora son mas nítidas en realidad son personas , muy grandes y fuertes . todos iban detrás de una persona en particular , su cara tapada mostraban unos ojos grandes y rojos .

Oscuridad .

Todo se vuelve negro e incluso puedo sentir un sabor amargo a mi alrededor . El frio sin duda es lo peor , es como si estuviera empapada , empiezo a temblar inevitablemente , un dolor palpitante en mi cabeza hace que vuelva a prestar atención a aquellas figuras negras que hace tan solo unos minutos estaban prostradas ante mi , todo al mi al rededor cambio a excepción de ellos , que ahora se acercaban a mi con pasos que hacían temblar toda la superficie .

Todo eso quedo en nada cuando la voz de mi madre salió de la nada consiguiendo que vuelva a ver todo como era .

Los hombres de negro estaban tan cerca que podía verles a todos el rostro , todos con la maldad impregnada en ella . El brazo de mi madre me coge con mucha fuerza y me aleja volviendo a entrar a mi ahora reconfortante casa. mi madre susurra unas palabras que no comprendo y todos vuelven actuar como si nada pasara .

- Anabelle ve a tu habitación , estas castigada - antes de que pudiera abrir la boca vuelve a soltar- no quero replicas si no quieres que el castigo sea peor .

indignada me dirijo a mi habitación sin saber que hacer . estaba perpleja y mi madre no me dirá nada aunque le pregunte. Ya la conozco . No entiendo por que se enfada conmigo por tener curiosidad por el exterior . Es normal tener curiosidad por algo que nunca he visto . He leído tantos libros sobre grandiosos exploradores y me resulta tan insufrible no poder hacer lo mismo yo .

Decepcionada me siento en mi cama mirando la ventana . Aun podría ver la lluvia .

Con pasos acelerados me dirijo a la ventana , temo abrirla , así que me doy el placer de contemplar el tétrico paisaje detrás de mi ventana .

Ya a oscuras , contemplo caer desde mi cama la inagotable lluvia que aun no ha cesado . Mi habitación era mi lugar favorito de toda la casa después claro de la biblioteca que se encontraban en el primer piso . mi habitación estaba en el segundo piso cerca del despacho de mi madre que en este momento esta ocupado por unos hombres vestidos de negro pero mucho mas formal .

Nunca los había vito . a casa solo viene el profesor Edwin y la señora Adams , la que tiene la casa como un diamante de brillante.

Unos fuertes golpes y los ruidosos gritos de mi madre me hacen saltar de la cama y dirigirme hacia la puerta . la intento abrir pero me es imposible . Empiezo a golpear la puerta con todas mis fuerzas pero no consigo nada . grito y grito llamando a mi madre pero con consigo que cese .

La ventana por la cual había estado mirando toda la tarde se abre de un fuerte golpe dejando entrar un viento congelador haciendo que los pelos de mi cuerpo se erizan. Giro lentamente contemplando al hombre que ahora esta frente a mi . Vestía al igual que los otros todo de negro solo dejando ver sus ojos , estos a diferencia de aquellos individuos eran de un azul tenue .

Dolor.

Sus ojos me cautivan y no puedo separar los míos de los suyos. mi cuerpo se mueve con tranquilidad hacia el suyo . no tengo miedo .

Su mano se posa en mi mejilla y todos aquellos gritos de mi madre se desvanece, solo podía prestar atención a una persona y era esa que estaba susurraba palabras ahora mismo incomprensibles para mi pero que por raro que parezca me relejaba . Era como si sonara una hermosa melodía , que al escucharla podías olvidar todos tus problemas .

Aquel extraño se tumba a mi lado en la cama , aun susurrando esas palabras ,con una de sus manos cubre nuestros cuerpos con la manta que se encuentra al final de calma. Estaba tan relajada que ya no escuchaba los gritos . No escuchaba ni un solo ruido en toda la casa .

- Ahora solo duerme - y con esas palabras cierro los ojos .

Todo ahora es tranquilidad.