Beyblade spanish edition (la aventura chiqui aracnida del yaso)

Parte 1 un chico nuevo en la ciudad

Yas es un joven amante de lo beyblade, uno de sus sueños es ser un reconocido blader en toda España y quizás del mundo

Para ello, ha llegado hasta Madrid, la capital de este país para poder participar en un torneo por equipos pero... Desafortunadamente de allí de donde el proviene, no había gente que compartiera sus gustos por los combates por tanto se ve obligado a intentar reclutar gente para poder participar en el torneo. 

Nada más llegar a la capital, tomó un mapa y se dispuso a ir hacia el piso que tenía compartido con otra persona, al parecer era otro recién llegado a Madrid, ese chico se llamaba Héctor, al parecer era un joven programador, él no estaba interesado en los beyblade pero para ganarse un dinero, se dedicaba a reparalos y examinarlos. 

Yas consiguió llegar a su nuevo hogar sin ninguna dificultad y nada más llegar, lo primero que hizo fue lanzar sus maletas a su cama, revolver entre el equipaje de mano para poder así sacar su bey y su lanzador para poder dirigirse al parque más cercano para entrenar. 

[...] 

Unos veinte minutos tardó en llegar al parque, al parecer por aquel barrio el beyblade era de lo que más se hablaba pues había bastantes pistas de entrenamiento, aunque había una particularmente llena de gente alrededor, Yas curioso de lo que ocurría se acercó y le preguntó a un chico de no más de 9 años 

-oye esto... ¿Qué se supone que ocurre ahí?- preguntó al niño 

+no lo ves? Al parecer una blader que usa un bey de tipo equilibrio está ganando a uno de los bladers más fuertes de la ciudad

Después de decir esto, el niño volvió a la multitud, yas algo intrigado se preguntaba que clase persona podría ganar a alguien con tanta fama, después intentó meterse entre la multitud para que una vez terminada la batalla preguntar a la blader misteriosa si le gustaría unirse a su equipo, él tenía la pequeña esperanza de que aceptara para así ser un equipo invencible en torneo, pero desgraciadamente cuando sus pensamientos volvieron a la tierra, la gente ya no estaba, y la noche estaba a punto de caer, al parecer estuvo mucho tiempo imaginando. El chico suspiró pesadamente y comenzó a caminar de vuelta a su casa, estaba algo decaído no solo por no haber podido hablar con esa blader, sino que también por no haber podido entrenar. Las farolas del parque se encendieron, dando así inicio a la noche, Yas pudo divisar una silueta pequeña, parecía que alguien seguía entrenando sin descanso, la curiosidad le volvió a invadir y se dispuso a caminar a la dirección de aquella persona. Una vez cerca pudo observar que quien entrenaba era una joven de pequeño tamaño, un largo cabello marrón y unas tiernas gafas, después de que el bey de la chica dejara de girar, el chico comenzó a hablar. 

Y- hala! Eso ha sido bastante genial, 

+... Gracias 

Y- oye... Por un casual no serás tu la blader que dicen que se ha enfrentado a no sé quien idiota famoso? 

+pues no... Yo acabo de llegar ¿por qué dices eso? 

Y- me han dicho que la chica usaba un bey tipo equilibrio y pensé que eras tu porque también es de equilibrio, por cierto, soy Yas

K+ eh soy Kumi

Y- sabes, hay un torneo por equipos dentro de unos meses, he venido a esta ciudad para intentar reclutar un equipo y poder ganar el premio... Te gustaría unirte al mío 

K+ he oído sobre el torneo pero no pensaba participar.... Hagamos una cosa, tengamos un duelo, si me ganas me uniré a tu equipo y te ayudaré a conseguir miembros antes del torneo, pero si gano yo... Tendrás que comprarme nueve pepinos deluxe. 

Y- ¡acepto! 

Después de esto, Yas sacó de su mochila su bey y su lanzador, se posicionó en la otra punta del campo y se colocó para dar inicio al duelo, lo mismo hizo kumi 

3.... 2..... 1...... Lanzamiento! 

No muy lejos de ellos, una joven con la mitad de su cabello teñido de rojo y la parte inferior de su cara tapada por una máscara se encontraba sentada bajo un árbol mientras escribía lo que parecía ser una historia. 

Continuará