JongIn vive una hermosa mentira, se acostumbro a ser un buen mentiroso y fingir que todo en su vida era perfecto.
Un hermoso chico llega y cambia todo eso.
"La primera vez que lo ví, el mundo como lo conocí dejó de tener sentido. De repente, la g...
Habían pasado dos meses, LuHan estaba preocupado por su esposo, en todo el tiempo que lo había conocido jamás lo había visto así. Iba a trabajar y regresaba a casa para beber hasta quedarse dormido y luego despertaba para trabajar nuevamente.
Kai le había contado lo que pasó con el reportero y se sintió mal por ambos, el chico debió haberse sentido como la peor de las mierdas para haber dejado su trabajo y hasta su departamento. Porque sí, LuHan lo había querido buscar para tratar de explicarle la situación, pero no había dado con él. Después de que el artículo de su "Bonita vida de ensueño" había sido publicado, el reportero había renunciado a su trabajo, vaciado su departamento y se había perdido.
Sus compañeros no sabían nada de él y no podían encontrar a ningun familiar que les diera información. Estaban en un callejón sin salida y eso estaba consumiendo a JongIn lentamente.
ChanYeol lo rodeó con sus fuertes brazos y besó la cima de su cabeza. —¿Como puedo ayudar? —Estaba igual de preocupado por el moreno.
—No sé, Channie, pero tenemos que hacer algo. Míralo —señaló al moreno que yacía dormido con botella en mano en medio de la sala—. Tenemos que encontrarlo, es la única solución.
El guardaespaldas asintió de acuerdo.
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BaekHyun estaba agotando sus ahorros, necesitaba encontrar un trabajo pronto y dejar de vivir en una sucia habitación de hotel, ya había comenzado a buscar empleo, pero se había topado con la noticia de que LuHan Kim, lo estaba buscando. Seguramente para sacarle los ojos por haber casi-follado con su marido. Joder, ¿dónde había estado su sentido común en ese momento?
Suspiró y le dio otro vistazo a la revista que tenía en sus manos. El artículo de los Kim estaba ahí, recordándole lo que no debía desear; Kai era un hombre casado y él casi se convertía en un sucio amante.
No podía, no lo haría, su madre se había echado al abandono después de que se enterara de la infidelidad de su padre y él había estado a punto de convertir a un hombre en infiel, de meterse en medio de un matrimonio. Pobre LuHan, no se merecía eso. El hombre había sido amable y atento con él, no había sido presuntuoso como la mayoría de los ricos que le había tocado entrevistar y así le había pagado.
Cerró la revista y cogió el movil, revisó su correo electrónico para ver si tenía respuesta de los sitios a los que había enviado su currículum. Afortunadamente la tenía, era de un periódico pequeño ubicado al sur de la ciudad, pero por el momento eso tendría que bastar. También había dado el depósito para un pequeño departamento, pues no quería ni podía seguir en este hotel. Cogió sus cosas y salió de la habitación para comprar algo de comer, ramen, tendría que bastar por que no podía permitirse más hasta que cobrara su primer cheque y para eso aún faltaba demasiado.
