Capítulo XI

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-En ese momento mi mente reflexionó en las últimas palabras que el corazón alcanzó a decir, y decidió intentarlo una nueva vez sin dar vuelta atrás,ya que le causaba mucho dolor vivir en el pasado.

-Luego de haber escuchado esa disputa que tuvo lugar dentro del desconocido que reflejaba un rostro semejante o igual al mío incliné mi rostro, mientras lo inclinaba mis labios se estiraron como cuando agarramos una goma y le aplicamos fuerza de ambos lados, mis pestañas se juntaron tan rápido como nubes en tormentas y me salió una suave sonrisa que curó algo dentro de mí y me volvió a recordar que nunca es tarde para darle cabida al amor.

-Cuando declino mi rostro para dirigirme hacia aquel desconocido ya había desaparecido, miré y miré pero no alcancé a ver que horizonte había tomado, al ver que volví a estar solo y sin compañía decidí reanudar mi búsqueda, la búsqueda de esa puerta que haría que zarpe de esas orillas.

-Comencé a caminar y tratando de no ser tan curioso y pararme a observar mi alrededor, ya que nunca alcanzaba a ver algo que me envolviera de tal manera que no quisiera escapar y ser parte de eso que no podía tocar ni apreciar.

- Todo me parecía extraño y a la vez familiar, algo oscuro pero en el fondo sinónimos de claridad y oportunidades de poder escapar.

A Las Orillas De Una Lágrima.(PAUSADA) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora