Solo Amor De Hermanos [Gumball x Darwin]

¿Prólogo?

Para aclarar, en esta historia todos los personajes serán humanos, porque debemos admitir que si hacemos de los personajes normales será super raro •-•

Para dar idea de cómo son los personajes iré dejando diferentes dibujos según valla aumentando los en la historia.

Gumball y Darwin multimedia.

Ahora sí empecemos.

° \(^•^)/~ <3

Era un día normal en Springfield.

Digo.

En Elmore.

Y todos los niños se encontraban felices, cosa que era muy extraño ya que estaban en la escuela ¿La razón? Era porque ese era el último día de clases; todos esperaban con ansias el sonar del timbre para poder salir e ir directo a sus amadas vacaciones.

—¡Por fin! Último día, y solo faltan, Eh..—se quedó observando el reloj de la clase intentando decifrar lo que para él, eran jeroglíficos.

—10 minutos—dijo el de cabellos naranjas sin dejar de prestar atención a la clase, siempre con su tierna sonrisa.

—si si, ya lo sabía—puso los ojos en blanco mientras cruzaba los brazos. Odiaba admitir cuando él se equivocaba, aunque muy en el fondo lo reconocía.

Como ya era bien sabido, todos los alumnos querían que Simian simplemente se callada y  sonará el timbre,era su sueño más anelado de todos los días, en especial ese. Pero la espera había dado frutos, sonó el tan esperado timbre haciendo que todos salieran sin dejar terminar a la "señorita" Simian.

—¡al fin! —Gumball dió un gran suspiro y colocó los brazos en su nuca— había esperado este día desde el inicio del año —sonrió feliz mientras movía sus orejas de gato.

—¡Valla! Me sorprende que aún puedas mover tus orejas—dijo mientras miraba los movimientos del contrario.

—¡nunca podría perder mi don, hermano!—sus palabras tenían algo de narcisismo

—¿Y aún puedes ronronear? —acariciaba la cabeza del peli-celeste.

—¡Hey! No hagas e- Prrf~ —dio unos pequeños roroneos.

—¡Awww! ¡Que adorable!—dijo Darwin con ojos brillantes y una sonrisa tierna en su rostro—

—...—

Gumball no pudo evitar sonrojarse, adoraba cuando su hermano hacia esa cara, la amaba, pero para no hacer muy notorio este teñido simplemente voltio el rostro y frunció el seño.

(...)

Todos subieron al autobús y fueron a sus respectivas casas, algunos solo para comer y dormir, otros para alistar sus maletas para el viaje o para ir a la casa de su abuela; cada quien por su lado.

Al llegar los dos hermanos a su casa, se encontraron con la imagen de su madre regañando a su padre.

—¡Richard! ¡Ya te dije que no llevaremos comida!—gritaba enojada, pero no su máximo grado—

—Pero Nicole, en el viaje me voy a morir de hambre, necesito llevar comida—decia mientras guardaba poco a poco todo lo que había en el refrigerador.

Nicole dió un grito y miro a Richard con los ojos completamente oscuros, o como los mismos familiares la llaman: 'Mamá enojada'

El conejo simplemente dejo de guardar comida en la maleta para guardarla en de vuelta a la nevera.