Crying in the club - Taekook OS

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Taehyung lo había sabido desde el primer momento, esta era una muy mala idea. Tanto él como Jimin se habían negado cuando Hoseok se los propuso. El por qué habían accedido finalmente, se encontraba en la sonrisa encantadora e irresistible que el dueño del plan siempre usaba como arma de manipulación.

Habían estado bien por un buen rato. Sus amigos no tenían la culpa, ellos solo querían que se sintiera mejor, que volviera a ser el chico al que no le costaba tanto sonreír. Tampoco era culpa de su ex novio, él tenía tanto derecho para ir a cualquier sitio libremente y demostrarle amor a su nueva pareja como quisiera. Fue una coincidencia amarga cruzarlo justo cuando se dirigía a los sanitarios, después de que Jimin lo hubiese dejado solo con Hoseok.

Él consideraba que había hecho un buen trabajo mientras había podido evitarlo; desde que Namjoon se sinceró con él y le pidió terminar porque posiblemente estuviera teniendo sentimientos por otra persona, Taehyung lo había evitado a toda costa. Era difícil como el demonio, porque después de dos años y medio juntos todos sus lugares favoritos eran de los dos. Pero lo había logrado bastante bien y eso había hecho que el de dejarlo ir, no doliera tanto.

Su rutina se vio rota por completo, muchas cosas cambiaron y se sentía tan vacío que en ocasiones era difícil de explicar. Namjoon era un buen chico, y no estaba justificándolo; lo sabía porque él había preferido terminar lo que tenían incluso antes de saber si la persona por la que se sentía confundido estaba experimentando lo mismo. "No puedo lastimarte, mentirte o algo por el estilo. No mereces eso" le había dicho, y sí eso estaba bien; pero Taehyung lo amaba, tanto que cuando se fue sus sentimientos quedaron adormecidos por la tristeza.

Taehyung sabía que no era su culpa, que él era un buen partido: tenía un lindo rostro, cuidaba su cuerpo, le gustaba estudiar, divertirse y quería con todo el corazón. Era difícil de aceptar, pero Namjoon no era para él... Y habiendo visto cómo él y Seokjin caminaban entre el gentío tomados de la mano, cómo bailaban, se reían y se besaban suave, a Taehyung no lo quedaban dudas de que ellos se merecían el uno al otro. Y eso estaba bien, pero dolía.

Namjoon era feliz, y él se sentía miserable y solo. También un poco patético, encerrándose para no cruzarlo, dejando de lado sus hábitos para evadir el dolor. Era tonto porque tarde o temprano pasaría, él no se lo había ocultado nunca, había otro y Taehyung tendría que haberlo aceptado desde un principio porque permanecer en negación, hacer como si nada hubiese pasado nunca, fue lo peor.

Seis meses habían pasado desde la ruptura, y ahí estaba él, llorando hasta perder por completo el aire de sus pulmones, sentado en el interior de un cubículo en el baño del club. Y no podía irse a casa, no podía dejar que sus amigos lo vieran de esa forma, porque estaba bien. Él no estaba enojado, solo era triste ver a quién quisiste demasiado, feliz de aquella forma con alguien más. Era amargo, porque una de las cosas que siempre alababan de Taehyung era que podía querer de forma pura y a corazón abierto... Estas eran las consecuencias de ello.

No había sido consciente de qué tan mal estaba llorando, pero seguramente se había dejado llevar mucho porque de repente unos golpes estaban resonando en la puerta.

—Mmmhh ¿Estás bien ahí adentro? ¿Necesitas ayuda? —oyó que una voz le preguntaba a través de la madera, alto por sobre la música resonando en el exterior.

—Yoo-o —Taehyung se apresuró a sorber y a limpiar su rostro con la manga de la chaqueta que llevaba —Estoy bien, gracias... No-no hay problema —dijo de manera entrecortada por los hipidos.

—¿Seguro? —el tono al otro lado sonando preocupado.

—Sí, no es nada... Sólo, no me siento del todo bien. Pero lo estaré —dijo volviendo a sorber, entre sollozos ahogados.