Capítulo 12: Viaje (parte 2)

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Con algo de duda terminaba su conversación con el segundo jade, que alguien supiera el temor irracional de Wei a los perros en el presente era casi al punto imposible, los que sabían fueron asesinados en la toma del Muelle de Loto hace 17 años, ¿cómo podría saberlo alguien hoy en día?

[[Flash Back]]

La mañana dejaba de ser silenciosa luego que el primer discípulo de Yunmeng Jiang azotara el ambiente con sus gritos pidiendo ayuda mientras saltaba e intentaba treparse de los arboles...

- ¡Que alguien me ayude! – gritaba un joven Wei de 14 años mientras corría hacia el campo de entrenamiento - ¡Vete, vete! – lloraba ya pálido y tembloroso –

Ante el asombro de los demás discípulos por el espectáculo repentino solo se vio el ceño fruncido de Madam Yu...

- ¡Otra vez con eso! – gritaba furiosa mientras lanzaba a Zidian y espantaba al pequeño perro tirando lejos al joven en el proceso - ¡¿cuándo a vas dejar de ser tan cobarde?! – reclamaba acercándose con su látigo activado dejando a todos petrificados con su aura – ¡¿quién trajo ese perro acá?! - 

- ¡No lo puedo evitar! – decía muy asustado el chico –

- Madre – se acercó Jiang Cheng – yo me lo llevaré de aquí – dijo tomando al chico que aún estaba aturdido –

Con algo de molestia centellando en sus ojos acepto que su hijo saliera del entrenamiento y se llevara al caótico estudiante modelo...

- Harán de cuenta que no vieron nada – ordenó Yu Ziyuan –

Su hijo escuchó esa orden y luego supo que por petición de Jiang Fengmian y su esposa cualquiera que viera ese bochornoso acto de pánico tenía prohibido hablarlo en público, no por el bien de Wei sino por evitar la vergüenza de tener un discípulo con fobia...según su madre

[[Fin Flash Back]]

- ¿Quién pudo haberlo dicho fuera de la secta? – se preguntaba miles de veces el actual líder – nadie se atrevería a desobedecer a mi madre... -

Ante la revelación del proceder del victimario Jiang Cheng comenzó a creer en la posibilidad de tener alguna pista dentro de su propia secta...

Por su parte, Lan Wangji se dirigió a la habitación que habían asignado para Wei; lo encontró ya dormido acompañado por los jóvenes quienes estaban conversando trivialmente mientras vigilaban al mayor...

Por su parte, Lan Wangji se dirigió a la habitación que habían asignado para Wei; lo encontró ya dormido  acompañado por los jóvenes quienes estaban conversando trivialmente mientras vigilaban al mayor

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- Hanguang-Jun – dijo Sizhui haciendo una pequeña reverencia para retirarse junto a su compañero –

- Mañana saldremos a los alrededores – comentó – por lo pronto, descansen –

Los chicos asintieron y salieron del recinto a la habitación continua...

CRISTAL CARMESÍDonde viven las historias. Descúbrelo ahora