Vuelta a casa

1K 68 228
                                    

No leáis este capítulo si no habéis acabado Sueña

Una vez dicho esto... bienvenidos al último OS. Sin embargo, estad atentos a la historia principal, que a lo mejor os lleváis una sorpresita muy agradable

Septiembre de 2018

Empieza a entender, y cada vez más, por qué Nerea siempre se quejaba cuando Agoney y él se daban el lote delante de ella. Ser el sujetavelas se ha convertido en su himno oficial del verano, y el primer día de clase parece llevar el mismo cartel.

—¿Podéis parar? —Le va a dar un tic en el ojo como se vuelvan a dar un beso—. A este paso no llegamos nunca.

—Amargado... —Aitana pone los ojos en blanco.

—¿Y qué esperabas? —bromea Nerea, agarrando la cintura de su novia y avanzando hasta situarse a la altura de Raoul—. Lleva un mes sin follar, tú espera a que pille a Agoney...

—¡Nerea! —La riñe mientras se pone rojo—. Por favor, ¿eh?, un respeto.

—Un minuto de silencio por todas las pajas de Raoul en agosto... —Aitana se pone la mano en el pecho, pero no aguanta mucho la seriedad, empezando a reírse.

El rubio, poniéndose aún más rojo, las adelanta, cansado de sus tonterías. Es todo muy bonito cuando las dos chicas son de Barcelona y pueden verse casi todos los días. ¡Que tengan ellas una pareja canaria, que se van a enterar!

—Ay, no, Raoul, no te enfades... —Nerea lo alcanza, apretando su hombro—. Aitana lo siente, ¿verdad? —El tono final suena tan amenazante que Aitana tiene que asentir con mucha energía.

—No te pongas mal... —Aitana se sitúa a su otro lado—. Lo vas a ver hoy, ¿no?

—Último año de instituto. —Su mejor amiga aprieta su mejilla.

—Un chupito por cada vez que mencionen la Selectividad el primer día. —Sonríe el rubio.

—Entonces vamos a morir de coma etílico, mi vida. —Bromea la morena.

—Qué mal todo, de verdad...

—Dijo la que va a sacar de doce para arriba en Selectividad... —Pica a su novia

—Pero si aún no sé si voy a ir a la universidad. Ya te dije que a lo mejor estudio música y teatro musical...  —musita Nerea, bajando la mirada.

—Me vas a abandonar para irte a Madrid a cumplir tus sueños musicales, me siento engañada. —Se lleva una mano al pecho.

—¡Menuda dramas eres! Además, aún queda un año. Y ni siquiera lo tengo claro...

Raoul empieza a ignorar de nuevo el pique entre sus amigas, sobre todo porque están llegando a la entrada del instituto y ha vislumbrado a Alfred. No es Agoney, pero también tiene muchas ganas de verlo. Nunca había visto tan poco durante un verano a su mejor amigo.

—¡Chiquitín! —Ya no sabe ni dónde ha dejado a Nerea y Aitana, pero en cuanto el catalán lo llama, sale corriendo hacia él.

Alfred abre los brazos para recibirlo, apretándolo en un abrazo enorme.

—¿Qué tal todo?

—Te he echado de menos. ¿Qué tal Pamplona? —Apoya un brazo en su hombro y empiezan a caminar hacia el interior del instituto.

—Al final estuvimos super poco por allí. Hemos acampado más que otra cosa, pero molt bien. —Asiente, con una pizca de brillo en los ojos. Raoul sonríe, porque es lo que merece—. Necesitábamos esto.

Sueña-One-shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora