Hoy he operado a una niña. Tiene unos 9 años. Y necesitaba sangre 0-. No contábamos con ninguna, pero su hermano gemelo tenía la misma. Le expliqué que era una cuestión de vida o muerte. Se quedó callado durante un momento y luego se despidió de sus padre. No sospeché nada hasta después de que le sacáramos sangre cuando me preguntó:Bueno entonces ¿cuando voy a morir?. Pensó que estaba dando su vida por la de su hermana. Por suerte, ambos están muy bien.