Saliendo de un callejón con la sangre ajena cubriendo su rostro, el miedo a flor de piel e ignorando los últimos jadeos de dolor que aún podía escuchar reúne toda la fuerza que le queda y arrastra sus piernas lo más rápido posible, puede sentir su corazón latiendo en sus oídos, le es imposible creer lo que acaba de pasar, tiene ganas de llorar pero no tiene tiempo para ello, debe salir de ese lugar. Culpa a la madrugada de qué no haya nadie en las calles, su temor aumenta cuando al girar su rostro ve una una sombra oscura caminando a toda velocidad detrás de ella casi de una manera extraordinaria, quiere gritar pero su voz está atorada en su garganta. Ruega por salir viva de aquel lugar pero la persona que estaba matando a su mejor amiga hace unos instantes ahora viene tras de ella....
Eran las 7 de la noche cuando su mejor amiga aún no se cansaba de pedirle que salieran a un bar o a bailar a cualquier lugar menos aburrido. Suspira cuando esta arta y asiente con la cabeza, su amiga sonríe y le arroja unas prendas de ropa que ya había escogido para ella pero está se las lanza de regreso y elige algo más conservador, aburrido en opinión de la chica que está con ella.
Entran al lugar preferido por todos y la música la ensordece, los empujones no tardan en llegar y ella aún no se explica por qué acepto ir. Se sientan en los sillones rojos y acolchonados. Su amiga le pega un codazo el en brazo solo para decirle que hay un chico extremadamente sexy en la barra, beqa lo mira y siente su cuerpo vibrar al encontrarse con unos penetrantes ojos chocolate mirándola fijamente. El chico se levanta de su asiento y se acerca a ellas como un tigre que está a punto de cazar a un siervo. Se sienta junto a su amiga y ella se siente un poco defraudada y podría jurar que la miraba a ella pero entiende que aquella chica sentada a su lado es estéticamente más atractiva que ella. Delgada, rubia con aquellos hermosos ojos azules y labios gruesos. Lo que ella no sabe es que aquel chico está perturbado por ella y no por la rubia egocéntrica que ahora le habla sin parar, beqa es hermosa en toda la extensión de la palabra, los rizos perfectos cayendo por toda su espalda, su piel color canela y esos hermosos ojos verde esmeralda contrastando hace que aquel chico recapacite un poco por lo que planea hacer. Aceptan una invitación a casa de aquel hermoso chico llamado Bradley Simpson bueno en realidad su amiga acepta por ambas y por miedo a que algo le pase por que ahora está un poco ebria ella no se niega. Su piel se eriza cuando pasan por un oscuro callejón para poder llegar al apartamento de el. Al entrar se tranquiliza un poco al ver que es un lugar bastante normal. El se ofrece a servirles algo lo cual aceptan, sirve tres copas y regresa a la sala con ellas mientras el va por la botella que olvidó en la cocina y su amiga toma su copa de un solo golpe, ella aprovecha para tirar la suya a la planta, ya que no es de beber pero no quiere tener que decir que no y la obliguen. El regresa y ella pide permiso para adentrarse en el sanitario el cual el concede con esa hermosa sonrisa conformada por un par de finos y rojizos labios. Ella se sonroja y entra en el baño, tarda un poco antes de salir ya que no quiere presenciar una escena de besos entré su mejor amiga y aquel chico que le robó el corazón desde que lo vio. Escucha algunos ruidos extraños y pide al cielo no tener que quedarse ahí toda la noche mientras ellos tienen sexo. Toma valor y después de pensarlo un poco abre la puerta y no puede entender que es lo que está pasando, su amiga ahora está sobre el sofá sangrando por las múltiples heridas causadas por el cuchillo que ahora descansa en la mesa, aquel chico está sobre ella y tiene sus manos apretadas en el cuello de ella quitándole el aire y en poco tiempo la vida, ella se abalanza sobre el machandose de sangre, pero evidentemente el tiene más fuerza y solo la empuja al sofá justo a lado donde su amiga está muriendo, con los últimos suspiros le dice que se vaya, con un nudo enorme en la garganta y con las piernas tiritando se levanta mientras el aún asfixia a la rubia, abre la puerta y sale corriendo lo más rápido que sus piernas le permiten atraviesa aquel callejón de nuevo....
El ya viene por ella, escucha los pasos apresurados y las lágrimas ahora corren por sus mejillas, siente que se aproxima y en efecto el la toma por la cintura y ella sabe que está apunto de morir. El la gira quedando frente a ella, mirándose fijamente se le eriza la piel cuando él le sonríe de nuevo y la besa suavemente, ella no puede moverse ni un poco. Su cerebro no puede digerir lo que pasa la toma de la mano y la lleva de vuelta a su hogar donde aún yace el cuerpo sin vida de su amiga.
La lleva a una habitación donde ella contiene la respiración al ver un muro lleno con sus fotos pero hay algo en especial que llama su atención de sobremanera, un anuario de su colegio pero de hace más de 3 años. con marcador rojo está encerrada su foto en un corazón , en la misma hoja y con el mismo color está la foto de su amiga pero está con una enorme x sobre ella. El se acerca por detrás y gira la hoja a una dónde aparece un Bradley totalmente diferente, aparentemente más joven, desprolijo y nada agraciado. Pero ella lo recuerda, era el chico que estaba en su clase de matemáticas con ella y con Brooke, si ese era el nombre de la chica rubia la misma que humilló a Brad cuando supo que estaba enamorado de beqa aunque ella misma ni siquiera lo sabia, lo humilló tanto que todos se burlaron de el, dejó el colegio pero no sus ganas de vengarse.Pasa sus manos al rededor de su cintura y la espalda de ella choca con su cuerpo pero ella ya no siente miedo, siente un calor agradable recorriendo su cuerpo. Él le explica que todo esto lo ha hecho por ella, le pide que no lo odie, pero deshacerse de Brooke era la única manera de que pudieran estar juntos. Le explica que espero tantos años para planear todo a la perfección y que no pudieran atraparlos. Le ruega que lo perdone, ahora el es quien teme, no quiere que ella lo rechace pero ella parece no tener ninguna expresión en su rostro, cierra el libro y lo azota en la mesa, lo mira y ella sonríe de una manera que asustaria a cualquiera, el le sonríe de vuelta y hora ambos tiene en sus rostros la misma sonrisa psicópata.
Te hubieras tardado un poco menos es lo último que ella dice antes de besarlo.....