BNHA y tú • Escenarios •

Reto cumplido - Bakugō Katsuki

—Me gustas...—Le dije, al fin se lo habia confesado después de tantos años de ocultar mis sentimientos. Yo no era la más bonita, ni tenía el mejor cuerpo, era obvio que me iba a rechazar. Solo necesitaba decírselo.

—A mi no me puede gustar una fea como tú, ya te viste en el espejo? G-gorda!—Bien sabía que recibiría ese tipo de palabras de parte del chico que se robó mi corazón, ¿Quién sabe cómo? Con ese carácter del infierno, cualquiera lo vería como un demonio.

Se alejó con una sonrisa arrogante hacia el grupo de personas que se había formado atrás de él.—Reto cumplido—Lo escuché decirle a uno de sus amigos mientras se daban los cinco.

Ese mismo día me fuí a llorar a los brazos de mi mejor amigo, mi primer amor arruinado en la secundaria. Izu-chan me dijo que habrían muchos chicos más, chicos que me verían hermosa, ese día se me confesó.

A mí no me gustaba Izuku, lo rechacé amablemente. Mi corazón se encontraba roto, no quiera ningún tipo de sentimiento por alguien más.

A partir de ese día me decidí. Empecé a hacer dietas y ejercicios, empecé a preocuparme por mi físico, cuidaba mi rostro, mi cuerpo y mi cabello. Izuku y yo nos prometimos ingresar juntos a la prestigiosa academia U.A, me pareció raro que él no aceptará entrenar conmigo, tal vez quería un tiempo solo.

Incluso habían pasado meses sin hablarnos.

El día del examen de admisión no lo ví, me preocupé por él, no respondía ni mis mensajes ni llamadas. Llegué a pensar que ya no quería estar conmigo, tal vez se había confesado por lástima.

Y... Todo eso nos lleva a la actualidad. Nunca creí que podría llegar a ser así de hermosa, hasta podría alardear, pero no creo ser ese tipo de persona.

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Ingresé a paso lento al salón de clases, iba muy temprano, eso es bueno.

Ví a un chico de cabellera bicolor, era realmente guapo, ¿Y si ponemos a prueba mis esfuerzos? Seh.

Me acerque al asiento a su lado, me senté arqueando levemente la espalda, dando más vista a mi trasero.

—Es... Linda—Sonreí al escuchar su opinión sobre mi apariencia, esas palabras significaron mucho.

—Oye... Me podrías avisar cuando llegue el maestro? No pude dormir muy bien...—Y Tallé uno de mis ojos con la intención de verme lo más tierna que me fuera posible. Su leve sonrojo fue respuesta suficiente.

Lo ví asentir volviendo a su aura fría y seria.

Escondí mi rostro entre mis brazos esperando a los demás, me mostraré cuando no se estén presentando, soy muy torpe con las personas nuevas.

Estube escuchando el bullicio que se formó poco después en el salón de clases. Mi corazón se detuvo al escuchar una explosiva voz muy conocida. Era Bakugō Katsuki, el mismo chico que me humilló frente a sus amigos, el mismo que provocó las burlas de parte de las chicas de la secundaria, era ese estúpido, el mismo chico por el cual ya no tengo ni el más mínimo cariño.

Me levanté ocasionando un leve golpe en mi pupitre, obviamente que fue intencional. Un chico enérgico que estaba cerca y se percató de mi me habló.

—Soy Kaminari Denki, un gusto, chica linda, ¿Te gustaría salir a por un café luego de clases?—Me dió una sonrisa coqueta. Sentí mis mejillas calientes, aún me tengo que acostumbrar a los cumplidos.