Le llegó la muerte a la astuta paloma,
La que se reía de ella a cada hora,
La que desde su infancia, la envolvió en la sombra,
esa misma que con coloridas bromas,
pintó de aurora.
La paloma loca, pintó su vida,
amo sin mezquindad, amo el delirio,
no resistió pasiones, vivió de ellas,
Tiñéndolas de sonrisa y picante ritmo,
bailando en su nicho.
Amo un sapo, amo una liebre,
esas que visten de brillo y usan sostenes,
las amo igual que amar un macho,
las amo con delicia ...sin sentir descaro.
Vivió entre la fama, en el ¡yo te admiro!,
Pero lo mejor de todo... " le valió canijo".
Quería igualdad y mostrarse en vivo,
Sus pinturas, su arte,
En ellas siempre lo dijo
Usó palabras, usó poesía,
De coloridos ambientes pintó su vida,
Aunque en sus adentros estaba destruida y
hubiera agonía.
La vida se le albergó entre azul y verde,
Entre sueños de vida y muerte,
Entre comunismo y formalismo,
Entre exposiciones y sentimientos vivos,
Arte y vida le fueron siempre gemelos
Esos que en sus brazos anhelo tenerlos.
Siguió la vida, con abundantes faltas,
Esperando en una noche,
No esperar mañana,
Prometió un “hasta que la muerte nos separe”,
Pero privilegio un “nunca jamás volver”,
La mano que siempre habló por ella,
esa noche se le tornó helada pero serena,
no tomó ese día un lienzo, sino el rostro de aquel menos perfecto.
Le acarició sincera,
prometiéndole
un eterno "hasta nunca"... un “ya no vuelvo”,
aceptó el sapo perder a la paloma,
verla partir de la ventana,
de su cuarto y eterno ensueño,
disfrazada de negro,
siguiendo el arcoíris,
detrás de la fantasía de un atardecer de encuentro.
En un cercano vuelo, un eterno..." nos veremos luego".
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"La llamaban Frida"
PoetryLe llegó la muerte a la astuta paloma, La que se reía de ella a cada hora, La que desde su infancia, la envolvió en la sombra, esa misma que con coloridas bromas, pintó de aurora. La paloma loca, pintó su vida, amo sin mezquindad, amo el delir...