Me despierto en la mañana, un día de pleno frío y lluvia, era precioso. Pero tenía que volver a la rutinaria de todos los días, estudio y más estudio, maldito quien te creó!?
Había dejado de estudiar un rato y decidí salir a caminar ya que el día estaba más que perfecto. Me choque con alguien, venía un chico cuya visión no estaba enfocada donde iba caminando seguramente. Los jóvenes de hoy en día están metidos en sus máquinas tecnológicas que en la propia vida real. --Lo siento– salió de sus labios color carmesí, se notaba que era una persona cálida a simple vista, –No te preocupes– dije sin más que decir, siguiendo mi camino, aunque fuera extraño me quedé pensando en ese chico.
Al día siguiente tenía que ir a un lugar con algunos compañeros del colegio, habíamos arreglado para ir por algunas copas, tengo 17 pero.. No impedía el que pueda tomar, ¿Verdad? Se estaba haciendo tarde y mis compañeros no llegaban, –¡Ay dios! Siempre hacen lo mismo.–Decidí irme por mi cuenta, sólo. Mi mamá no tenía problemas en dejarme salir ya que le había dicho que iría donde mis compañeros.
Al cabo de unos minutos llego, pero no había nadie. –¿Dónde estarán?–
–¿Buscas a alguien? Sonriendo–
–Volteo y veo al mismo chico que me había cruzado el día anterior, ¿Acaso fue coincidencia? Me parecía un lindo muchacho, pero no, a mi no me gustan los hombres, QUÉ ESTOY DICIENDO. ¿Qué hacia aquí en todo caso? -Eh, ¡Hola! Qué haces aquí?
–Pues ¿A qué más se vendría a un bar?–
–Buen punto–Sonreí por la estupidez que había preguntado ¿Qué te pasa Jeon Jungkook?
–Y... ¿Cómo te llamas?-Sonrío de manera cálida.–
–Jeon Jungkook, ¿Y tú?–
–Kim Taehyung, encantado de conocerte– Me extendió su mano, y yo le extendi la mía
– ¿Quieres una bebida?– dijo sonriendo con una sonrisa cuadrada, era la primera vez que veía una sonrisa así
–Soy menor!!– dije sin más, reaccionas tarde Jungkook.
–Qué tiene? Tu cara dice lo contrario pequeño.– le extiendo la bebida
–La agarro y tomo unos tragos.–Tú cuántos años tienes?-Pregunto algo mareado ya, mi cuerpo no estaba acostumbrado a ingerir bebidas alcohólicas.
–Teng... –Interrumpió un chico el cuál se metió enfrente mío besando al individuo con el que estaba hablando.
–Eh...–Me di la media vuelta para irme, y me toman del brazo.
¡Holaaa! Volví a escribir de nuevo, quizá es muy corto esta parte, pero se vendrán más largas y mejores. Espero le den amor y compartan esta historia que recién comienza.
