¿VOLVEMOS? 『namjin ; os』

✿u n i c o✿

‒ ¡Oh vamos Nam! levanta ese inexistente trasero y vamos algún lado, estoy aburrido y tu cara no me alegra la tarde‒ Yoongi bufó y aventó un pequeño papel hecho bolita hacia la cabeza del moreno.

‒Cállate y déjame en paz, si viniste fue porque quisiste te dije muy claro que no quería verte‒ NamJoon se giró en el sofá ignorando la imagen de Yoongi haciendo un puchero.

‒Bien, está confirmado... ¿por qué no admites de una buena vez que la cagaste? ‒Yoongi alzó sus cejas y se sentó en la orilla del sofá donde estaba tirado NamJoon.

‒No lo he hecho, déjame en paz joder ¿no tienes algo que hacer? Molestar a Taehyung, no sé has algo con tu vida‒ El peli morado rodó los ojos molesto, él no necesitaba compañía en ese instante.

‒ Nam, eres mi amigo y me preocupa que tan deplorable te ves... y no quiero hacer más grande la herida pero tú fuiste quien le pidió que se dieran este tiempo, porque solo no vas lo buscas y le pides que cenen o algo para aliviar tu cara de culo‒ aconsejo el mayor mirando sus uñas con fingido interés.

NamJoon bufó una vez más, él no estaba mal por haberse dado un tiempo con Jin. Él no estaba cayendo en depresión por haberle pedido que se fuera de su departamento, él no estaba tirado en su sofá sin ánimos porque no sabía dónde mierdas estaba el castaño, claro que no, él estaba así solo porque era un mal día. Era todo, no había resentimientos, ni había culpas, solo un mal día. Se levantó y miro a Yoongi molesto.

‒Es un mal día, mierda Yoongi ¿no has tenido malos días? bueno, pues yo tengo ahora uno en el que solo quiero ver porno y dormirme ¿sabes? ‒ hablo cruzándose de brazos tratando de sacar lo más que pudo su pecho.

‒ ¿Qué crees? ¿Que tengo cinco años? Por favor, te conozco desdé hace más de diez años... sé que estás así por SeokJin, sé que estás dándote cuenta del error que has cometido ¿Por qué mejor tú no lo aceptas? ‒ Yoongi se levantó y tomo su teléfono de la pequeña mesa que ya tenía finta de ser un basurero por el descuido del moreno ‒ me iré, solo para dejarte en paz como tanto deseas. Cuando aceptes tu error y quieras hablarlo, llámame‒

El peli morado siguió con la mirada a su amigo hasta que este salió por la puerta. Suspiro fuerte y dejo caer su cabeza con pesadez en el respaldo del sofá, no lo iba aceptar ¿por qué aceptar algo que no era verdad? él no quería a Jin de regreso, él no quería tener al mayor riendo y aromatizando el departamento por doquier.

Se levantó pisando un pedazo de pizza que estaba ahí desdé sabrá dios cuantos días y refunfuño, tenía que darle mantenimiento a su departamento antes de que las ratas y las cucarachas lo comenzarán a invadir.

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‒Solo quería saber cómo están‒ NamJoon se rasco la nuca mientras miraba la pantalla de su computador y sostenía con una mano el teléfono inalámbrico sobre su oreja derecha.

‒Muy bien hijo‒ su madre tenía una voz cálida que siempre lograba calmarlo ‒las chicas ahora mismo han ido de compras, deberías llamar cuando ellas están. Realmente te extrañan‒

‒Yo también las extraño mamá‒ bajo la mano de su nuca y con el mouse comenzó a navegar un poco por sus redes sociales.

‒ Bueno ¿y qué tal tú? ¿Cómo estás? ¿Cómo vas con Jinnie? ¿Cuándo vienen? ‒ Su madre estaba feliz, NamJoon lo podía notar. Ella tuvo una gran conexión con el castaño desdé que se conocieron.

‒ Estoy bien... y bueno, Jin y yo hemos terminado o nos dimos un tiempo, diablos, no sé solo sé que ya no está aquí conmigo‒ suspiro profundo, una parte de su cabeza tentándole a buscar el perfil de Jin en Facebook o Twitter tan solo para ver que había sido de él, ningún interés de por medio, claro que no.