Un mundo casi perfecto

¿Amigos?

¿Qué es un amigo? Se podría decir que es aquella persona con quien compartes muchas cosas, sales de paseo y te diviertes, sabes que puedes contar con ellos para cualquier cosa, sin embargo aquella palabra era desconocida para la azabache, ella únicamente se limitaba a observar cómo aquellas personas solían divertirse, hacer planes para salir el fin de semana al cine o a cualquier otro lugar "Me pregunto... ¿Qué se siente tener un amigo?" Era uno de los muchos pensamientos que solían rondar aquella mente; antes de que se revelara aquel secreto ella estaba rodeada de amigos de su misma edad, pero desde aquel día aquellas personas se alejaron, quedando completamente sola...

-Vamos, sal no te haremos daño- Las risas de aquella chicas eran insoportables, la joven se había encerrado en un cubículo del baño mientras escuchaba los fuertes golpes que le daban a la puerta, de la nada aquellos golpes cesaron, quizás ya se habían marchado pero no se atrevió a salir en aquel instante así que decidió esperar otro rato más y cuando por fin había pasado un poco de tiempo del timbre de salida abrió aquel cubículo, el baño estaba totalmente vacío, esa era una buena señal, lanzando un suspiro de alivio se asomó a la puerta para ver los pasillos y no habían personas, al parecer ya no había nadie, sin embargo cuando procedió a caminar por aquellos grandes pasillos para dirigirse a la salida escuchó varios pasos aproximarse hacia ella, al dirigir su mirada hacia el frente pudo percatarse que las mismas chicas que la habían molestado seguían en aquel lugar... ella salió corriendo hacia el lado contrario y subió las escaleras –No puede ser, no se han marchado...- Dijo mientras intentaba buscar un lugar donde esconderse.

-No puedo creer que hayas olvidado tus libros- Dijo Hao totalmente molesto mientras Yoh buscaba sus cosas en la clase –No ha sido mi intención- Respondió su hermano mientras escuchaban un fuerte ruido en las escaleras...

-¿Escuchaste?- Preguntó Yoh mientras ambos salían de aquel aula –Sí, me parece que fue por las escaleras- Ambos salieron caminando un tanto apresurados y cuando llegaron a las escaleras del segundo nivel la vieron en el suelo.

-Oh no...- Dijo Yoh mientras observaban a la azabache en el suelo, su cabeza estaba herida, al parecer se había "caído" de las escaleras –Este no fue un accidente- Hao se acercó y la sostuvo con cuidado, ella aún estaba un tanto consciente, él la cargo y su hermano subió rápidamente las escaleras para encontrar a los responsables de aquel incidente.

"Me duele" La joven empezó a abrir sus ojos mientras observaba el techo totalmente blanco –No puedo creer que tengamos que atenderla, es un desastre- Reclamaba una mujer a un hombre en aquel lugar –No hables fuerte, ellos pueden escucharte- Aquel hombre le recriminaba su imprudencia, la joven sostuvo su cabeza y la tenía vendada -¿Eh...?- De pronto unas cortinas fueron deslizadas y aquellas personas que eran los encargados de la enfermería del lugar la vieron totalmente furiosos –Bien, ya despertaste, puedes irte- Fueron sus palabras mientras que ella intentaba asimilar que sucedía, se bajó de aquella camilla y una vez se colocó sus zapatos salió totalmente mareada de aquel lugar "¿Cómo llegué aquí" Pensó mientras salía hacia la puerta de aquel lugar, ya había anochecido completamente –Oh... es verdad- Recordó que aquellas chicas que para su mala suerte eran shamanes la habían logrado acorralar con la ayuda de sus espíritus, la sostuvieron de las manos y ella empezó a luchar, sin embargo aquella mujer la soltó y ella perdió el equilibrio cayendo hacia atrás por aquellas escaleras –Aun así no entiendo cómo fui a parar a la enfermería- Murmuró totalmente confundida, sin embargo cuando llegó a aquel gran portón notó la silueta de dos personas, ella se detuvo y presionó sus manos contra su pecho "¿Qué hago?" Fueron sus pensamientos, pues en ese instante tuvo mucho miedo.