Harry despertó esa mañana en su nueva casa, en Detroit.
Refregando sus ojos, dirigió su vista hacia la ventana de su izquierda y pudo ver como su madre corría las cortinas para así dejar estrar la luz del sol.
—Buen día cariño. ¿Listo para comenzar el nuevo instituto? - dijo su madre, con una sonrisa alentadora.
-Narra Harry-
¡Oh, el instituto! Mierda. Lo había olvidado completamente. Nueva casa, nuevos vecinos ¿y ahora? Nuevos compañeros, nuevos profesores, nuevas "amistades"... ¿No les parece mucho para un adolecente de 15 años que a penas puede ser sociable con su familia? Hace dos días nos mudamos y ellos ya quieren que empiece el instituto aqui, esto debería ser ilegal -pensé.
En fin. Me vestí, me preparé y bajé a desayunar. Mi madre ya tenía todo listo, como de costumbre, para que yo comiera rápido y me fuera sin llegar tarde.
—Harry... ¿Está todo bien? -La oigo decir desde la punta de la mesa.
—Sí mamá, es solo que... nada, olvidalo -dije para no preocuparla.
Ella sabía muy bien que estaba nervioso por empezar en el nuevo instituto. Sabía lo que me costaba hacer amigos o simplemente "socializar", es por eso que yo quería demostrarle que esta vez si podía hacerlo. A decir verdad, mi miedo no es "socializar" si no, que mi miedo sería que me rechacen, me critiquen, etc, etc. Digamos que me importa bastante lo que opinen los demás y eso me volvía una persona tímida cerrada, y eso era lo que planeaba cambiar.
El relog ya marcaba las 7:40 am y yo entraba a las 8:00 , mi ventaja era que vivía a solo 6 cuadras del instituto. Así que me puse mi gorrito de lana gris, agarre mi Iphone, mi mochila y me fuí.
Mientras caminaba iba pensando en como sería el día de hoy, espero que todo salga bien.
Después de caminar las 5 cuadras que se hicieron infinitas, al fin llegué a mi instituto. Era genial. Parecía esas típicas universidades de las películas de Estados Unidos, con la diferencia de que este era un instituto.
Comencé a caminar hacia la entrada sin mirar a nadie, solo a mi relog, el cual me indicaba que eran las 7:50, lo cuál me daba tiempo de entrar y recorrer por dentro. Pero al entrar todos fijaron su mirada en mí, no sabía que hacer así que miré hacía abajo y comence a caminar rogando encontrar un baño para poder estar solo un rato, o eso esperaba. Me sentía "acosado" y nervioso. Por suerte ví que a centimetros de mí se encontraba un baño así que decidí entrar. Pero al querer abrir la puerta choque con una persona que justo estaba saliendo, Qué conveniente ¿no?, estaba más nervioso todavía.
—Oops -digo con la mirada baja.
—¡Hola! -escucho decir a una voz masculina muy simpatica y finita.
Levanto la vista y veo a un chico castaño a penas de unos 5 cm más que yo, era castaño, tenía ojos azules y una sonrisa bastante... sexy.
—Lo- Lo siento -digo volviendo a agachar la cabeza.
—¡Oh! solo a sido un choque, nada grave -suelta una carcajada suave- Nunca te había visto ¿Eres nuevo? -Pregunta muy simpático.
—S-sí.
—Genial, te encantará este lugar, es mágico -dice en un tono medio sárcastico pero agradable- ¿Cómo te llamas?
—Sonrío nervioso y lo miro —Harry Styles.
— ah sí que Harry, ¡Bonito nombre! Genial Harry, tengo que irme, nos vemos luego -Me da una agradable palmada en la espalda y se va.
—Adiós.. -digo casi susurrando y sonriendo a la vez.
Entro al baño por fin y me miro al espejo confundido. Algo en ese chico llamó mi atención, tal vez su simpatia, o su sentido del humor o su hermosa, hermosa sonrisa.
¡Que estas diciendo harry! -Me digo a mi mismo, y salgo rapidamente del baño buscando mi salón, ahora más calmado.
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My new life {Larry Stylinson}.
FanfictionHarry Styles tenía 15 años y se mundó junto a su familia a Ditroit, a causa de un nuevo trabajo que su padre consiguió allí. No era una persona sociable, al contrario, era muy timido y cerrado. Pero alguien apareció en su vida y hará lo posible pa...