Desastre.

-Di "ah~" -ordenó Hansol a Byungjoo. El menor abrió la boca para que Hansol pudiese depositar un pedazo de carne ahí. Byungjoo le sonrió mientras masticaba y Hansol le acarició el cabello.

Ahí estaban de nuevo. Lo estaban haciendo de nuevo. Claro, desde hace algún tiempo que las cosas estaban así, pero últimamente era peor que antes. Jiho no sabía si siempre eran así o si tenía la mala suerte de justamente estar ahí cada vez que escenas como esas ocurrían. Los demás miembros del grupo no se quejaban. Al menos cuando Jiho había intentado tocar el tema para saber si a los demás también les molestaba de la forma en que le molestaba a él, nadie parecía tener algún problema con aquel par. ¿Por qué sólo él se sentía así? Cada vez que veía una de esas escenas, sentía que le hervía la sangre y tenía deseos de estrangular a alguien, a quien fuese. Era imposible para Jiho no fruncir el ceño. A veces creía que lo hacían a propósito, pero cuando comenzó a pensar mejor en esa hipótesis se dio cuenta de lo paranoico que sonaba. ¿Por qué lo iban a hacer a propósito? ¿Con qué fin? Ridículo Jiho. Como si siquiera pensaran en la existencia de alguien más cuando tenían "sus momentos". Lo más probable era que no notaran a nadie más alrededor suyo. Jiho de verdad odiaba la manera en que la "amistad" de esos dos lo enfurecía. Se supone que debía ser normal que dos personas pudieran ser así de cercanas, eran mejores amigos. Y Jiho también era mejor amigo de Hansol, de hecho no hacía mucho tiempo que Hansol solía realizar algunas de esas acciones con él. De hecho, recordaba muy claramente las veces que el mayor le había dado de comer, o cuando se sentaba siempre a su lado y lo abrazaba de vez en cuando, o cuando decía una broma para molestarlo y le sonreía y desordenaba su cabello, o cuando lo tomaba del brazo mientras iban caminando... Eran cosas normales para él, que antes no había notado, pero que ahora se daba cuenta de su ausencia. Bueno, pero una persona podía tener más de un mejor amigo, eso era cierto. A pesar de que Hansol nombrara a Byungjoo en las entrevistas cuando le preguntaban, Jiho sabía que él también era su mejor amigo, porque había hecho todo ese tipo de cosas con él también, por lo tanto también lo era... ¿Verdad?

Jiho salió por un momento de sus cavilaciones para darse cuenta de que estaba mirando fijamente al par. Hansol abrazaba a Byungjoo y apoyaba la cabeza en su hombro, mientras el menor jugaba con su celular. Jiho desvió la mirada. Hacía meses que Hansol no lo abrazaba. Pensándolo mejor, ahora el mayor apenas le hablaba, y cuando lo hacía mantenía cierta distancia. Sintió una nueva ola de ira recorrer su cuerpo, y volvió a su mente la misma pregunta. ¿Por qué demonios lo enojaba tanto? ¿Y qué si Hansol había cambiado de mejor amigo? ¿Por qué le importaba tanto? A Jiho nunca le habían importado ese tipo de cosas. De hecho, no creía que a ningún hombre pudieran importarle, era algo más como "de chicas". Era ilógico que se pusiera sensible por eso. Y si de verdad había cambiado de mejor amigo, tanto mejor, ya no tendría que soportar sus historias y sus llantos y sus problemas y sus bromas y su risa y sus abrazos y sus caricias y sus sonrisas porque ahora tenía a Byungjoo y él se encargaría de eso...

Jiho golpeó la mesa violentamente, sintiéndose aun más furioso que antes, si es que eso era siquiera posible, y todos los demás miembros dieron un salto, asustados. Luego lo miraron con extrañeza.

-¿Qué te pasa, Jiho? Casi das vuelta la salsa de soja. Ten cuidado -advirtió Seogoong, acercando hacia sí el plato con salsa.

-Lo siento -se disculpó, aunque no sonó como una disculpa. Aún sentía la sangre hirviendo. Volvió a echarle una mirada a esos dos, notando que Hansol seguía abrazado a Byungjoo, y no pudo soportar seguir en la misma habitación que ellos-. Voy a la sala de ensayos -dijo, con el ceño fruncido, en un tono más bajo y más serio que el usual.

-¿A ensayar? Acabamos de salir de ahí y son las doce de la noche, no hemos comido nada desde el almuerzo... -sermoneaba Sehyuk, mientras Jiho se ponía de pie-. Jiho, vuelve aquí y termina de comer -exigió.