Alma gemela

nuevos inquilinos

La noche es tan gelida que mis brazos y piernas se congelan ... su manos tan cálidas que cada parte de mi cuerpo que toca arde... y hace que me estremesca con cada roce... mientras puedo sentir su ancha y firme espalda bañada en sudor, con cada una de las yemas de mis dedos.

aun no se como esto termino así... pero si se, cuando empezó.

Era una típica mañana de otoño, el cielo totalmente nublado, con ese color gris claro que tanto me gusta y el aire fresco y apasible que acaricia y refresca cada parte de mi rostro.

Ese tipo de días me gustan, me hacen sentir tranquilo, limpio, sin ninguna preocupación.

así que decidí dar una vuelta por las calles del barrio.
nada nuevo... las calles solas y en silencio, solo se escuchaba el ligero canto de los pájarillos que rondaban por el lugar y el disimulable silvido del viento que pasa recojiendo las hojitas que llacian tiradas en el suelo.... me sentía tan en paz... tan tranquilo... y sin preocupaciones.

pero eso termino muy pronto, justo cuando a lo lejos escucho esa fastidiosa y cantarína voz que tanto detestaba.

exacto
era Hanji, la última persona con la que me quisiera topar en mi día libre

H- hola!! levinin!!!

L- tch/ te dije que dejaras de llamarme así, loca.

H- he!!!... pero !¿porque tu si puedes llamarme loca?¡

Porque puedo. Y ¿Que rayos es lo que quieres ahora? !¿Acaso no me puedes dejar en paz al menos en mis días libres?!

H- Jajaja muy gracioso levinin solo quería presenta...

L- No

H- pero si aún no e dicho nada¡ Aparte ya deberías hacer tu vida! Tener una pareja y hacer una familia¡¡

L- ya te dije que no, no insistas, yo ya tengo mi vida, mi vida son los libros, y nada más.

H-A... Pero no creo que con los libros puedas tener hijos¡¡ Andale... Solo una..

L- no¡ Y mejor ya lárgate.

Y con esas últimas palabras me dirigi con pasos apresurados hacia mi hogar, para retirarme lo mas que pueda  de esa loca entusiasta.

Llego a mi departamento y dejo mi saco en el perchero, para enseguida dirigirme a la cocina a hacerme un te negro, seguro eso me relajaría y podría conseguir la tranquilidad que quiero en mi día de descanso.

Pero... Justo cuando estoy apunto de darle el primer sorbo...

Brrr brrrr (suena el celular)

*Tch/ ¿Que es lo que quiere ahora?*

Era la loca, no quería contestar pero sabia que si no lo hacia, en cuestión de minutos aparecerá frente a la puerta Pateando y gritando,  y eso, sería mil veces  peor.

Mejor contesto.

H-¿Hola? Levi...

L- deja de estar fastidiando¡¡

H- espera¡ Levi ¡ No me cuelgues ¡ Te llamo por cuestión de trabajo, al parecer a la editorial no les gusto el último capítulo de tu libro y quieren que lo arregles y se lo envíes para pasado mañana.

L-¡¿Que?! Esos hijos de perra! ¡¿como carajo se supone que haga eso?!

H-no lo se Levi, yo intentaré arreglarlo para que te den más días pero por lo pronto trata de hacer lo que te piden, por favor.

-ch! ...

¡¿Que acaso el destino se puso en mí contra?! ni siquiera un día de descanso puedo tener.