Capítulo 10

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Chat Noir saltó entre los edificios, a los pocos minutos llegó a la mansión y entró por la ventana hacia su habitación, quitó su transformación, dejando a un goloso kwami a la vista.

—Tengo hambre. —Plagg se quejó abriendo sus brazos con pereza.

Adrien pasó por su lado, suspirando, con una sonrisa enorme en su rostro. Se arrojó a la cama, viendo el techo y Plagg lo observó curioso, mas al notar que no lo había oído, frunció el ceño volando sobre él.

—¡Adrien!, ¡necesito comer mi preciosidad! —exclamó cruzándose de patas.

—En el mueble deben quedar tus reservas.—respondió por fin y el kwami entrecerró sus ojos con extrañeza.

—¿Estás bien?, te ves raro. —al no recibrir respuesta, bufó exasperado. —por lo menos podrías decirme porqué estabas destransformado en la casa de Marinette.

—Ella me cuidó porque estaba enfermo. —musitó cerrando sus ojos un momento. —¡me cocinó! —su voz se volvió más dócil en cada palabra. —ella es genial... decidida y, una muy buena persona. Jamás la había visto de este modo.

El felino rodó los ojos volando por su trozo de queso, mientras, su portador seguía hablando como todo un enamorado.

—Me miró con esos ojos tan... y luego cuando le conté sobre mi mamá, me abrazó. ¡Dijo un estaba orgullosa de mi! —exclamó sentándose en el lecho con más energía.

—Yo también lo estoy de ti —musitó el kwami, sin que su portador logrará oírlo, y buscó en los cajones un poco de su alimento.

—No se qué hacer Plagg. —suspiró bajando el rostro, viendo así sus manos sobre su regazo. —ya no puedo negar que Marinette me gusta y creo que... creo que Chat Noir no le es indiferente.

—¿Y tu amor por Ladybug? —preguntó acercándose a su portador.

—Mi amor por Ladybug... quizás eso era mucha admiración, con Marinette es distinto. Siento un cosquilleo en mi pecho cada vez que la veo y, es tan dulce. —tomó su cabello jalando un poco de él. —¡Y ella se irá de París!, ¡y no se que hacer! —alzó más la voz. —necesito que me diga como Adrien, también a Alya y Nino, de alguna forma podemos convencer a sus padres, el problema es que sólo "Chat Noir" sabe que se irá y no puedo ir a hablar con sus padres como tal, es absurdo.

—Entonces convencela de que le diga a "Adrien", de paso le pides un sea tu novia y ambos me compran un queso por mi magnífico trabajo. —terminó de comer el manjar de sus patas sonriendo con sus colmillos ampliamente.

—Tu sólo piensas en comida. —rodó los ojos. —pero tienes razón. Le diré que confíe en mi y me diga lo de Shangai.

—Y si ella se queda, ¿qué piensas hacer?

—Yo... —por un momento se perdió en sus pensamientos. —No lo sé, no puedo revelar mi identidad, pero tampoco quiero alejarme de ella. —comenzó a toser y Plagg hizo una mueca.

—Mejor ve a dormir, quizás mañana puedas volver al instituto.

—Tienes razón. —se puso de pie y buscó en el suelo de la habitación su celular. —aquí estás.

—Bueno, yo iré a dormir. —habló el kwami dirigiéndose a la cama.

—Si. Claro, Plagg... buenas noches.

Adrien vio las notificaciones de mensajes y deslizó la pantalla para abrir cada uno.

💬Nino👊: Hey bro, Marinette nos dijo que estabas enfermo y fuimos a verte, pero la asistente de tu padre no nos dejó pasar. Lo siento, espero mañana te sientas mejor y nos veamos en el instituto.

Following The HeartbeatDonde viven las historias. Descúbrelo ahora